Solo seguía ese delioso aroma tan familiar, lo seguí hasta llegar a él. Estaba apoyado en un costado del puente y la luz del atardecer sólo lo hacía ver más hermoso. Me acerque casi atacando su cuello solo con besos.
Nos estábamos besando y debido a la falta de aire tuvimos que separarnos dejando un hilo de salíva, quedamos con nuestras frentes juntas y permanecimos con los ojos cerrados disfrutando de la sensación.
No pude resistir mucho más así, lo tomé de la mano y nos dirigimos directamente al apartamento donde sin decir palabras seguimos besándonos, solo que ahora teníamos la privacidad para poder tocarnos. Sus manos sujetaban mi rostro y cuando lo tome de la cintura para acercarnos paso sus brazos por mi cuello, todo cambió cuando sentí que subía su pierna con la sola intención de atraerme mas hacia él y con la lujuria a flor de piel nos dirijimos a la habitación.
Su piel era tan suave y con cada caricia podía seguir deleitandome con sus gemidos ahogados que hacía evitando hacer ruido. Cubrí de besos y mordidas su clavícula, su cuello, sus hombros, su pecho y pesones, me detuve cuando llegué a sus labios, esos deliciosos y suaves labios.
- Puedo seguir verdad? - pregunté sabiendo su respuesta. No creo que pudiera contestarme todo jadeante y exitado después de nuestra sesión de besos y caricias así que sin esperar mucho más nos empecé a desvestir a ambos, deseaba entrar en él de una buena ves.
Una ves que estuvimos completamente desnudos metí mis dedos en su interior esperando preparalo cuanto antes y Dios sus gemidos suaves en mi oído solo me desesperaban mas, no quise esperar otro segundo y antes de que él reaccionara lo di vuelta levantando su trasero para poder penetrarlo tan duro y tan rápido como se me diera la gana, él no decía nada solo sus gemidos y el choque de nuestros cuerpos era todo el ruido de la habitación.
- Haaa~ mmgs - gemia mientras se aferraba a las sábanas mientras recibía mi miembro en su interior a la perfección.
- Más, gime mas~ - trató de separarse cuando trate de anudar, me detuve y lo voltie quedando él sobre mi. Entre nuevamente con mi pene casi adolorido por evitar el nudo la primera ves.
Se empezó a mover a su propio ritmo y no podria quejarme, era fantástico y sin más me moví llegando tan profundo que ninguno evitó que yo anudara. Nos quedamos así hasta quedarnos dormidos.
~~~~~~
Me desperté adolorido, no era la primera ves que pasaba por el su celo y el nudo que siempre me hacía sentir desgarrado. Traté de moverme hasta que...
- Emmm Satoru? Satoru?! - Dios no lo había sacado.
- Mmmm~ - bostezo y me atrajo más a él.
- Oye necesito que lo saques, me duele y necesito limpiarme - parecía que no me escuchaba ya que cuando lo moví me atrajo hacia él de nuevo haciendo que su miembro entrará un poco más lo que me hizo gemir. Solo entonces el muy idiota se despertó.
- Alguien quiere hacer un mañanero? - sonrió con aires de inocencia, me sonroje cual tomate pero seguía molesto.
- Satoru es enserio! Tu nunca lo mantienes dentro... - y antes de poder terminar ya me estaba besando.
- Solo un poco más. Lo haremos una ves y luego nos bañamos, lo juro.
- Eso es ment...! - estaba molesto pero antes de poder terminar mi respuesta se lanzó sobre mi y ahora no paro de moverse haciéndome gemir y aun antes de notarlo ya me había venido con solo unos movimientos, dios como amaba y odiaba a este hombre.
- Haaaag~ Yuuji~ - nos venimos juntos después de ese gemido. El quedó a mi lado dándome mimos y caricias. Lo único que me gustaba de su celo es que era extra tierno y muy intenso a la ves.
- Ahora nos levantamos o quieres estar un rato más en la cama? - dice acariciando mi cabello.
- Solo un poco más - no puedo evitar acurrucarme en él.
