Hobson explicaba a los niños todo lo que necesitaban saber mientras vivían aquí, les mostraba los salones, las secciones del castillo, quería que los niños se familiaricen rápido, le agradó mucho los pequeños desde que los vio.
- ¿Alguna duda?
Claramente el castillo era grande, más para unos niños que nunca habían estado ahí, pero eso no significaba que eran tontos, rápido tomaron notas mentales de cada cosa y posibles rutas de escape.
- Disculpe ¿hay una sección prohibida?
- ¿Sección prohibida?
- Donde nos sea prohibido estar.
El mayordomo mostró cara de insatisfacción, pero pronto la cambió a una pacífica. Hobson era como esos mayordomos que te recuerdan a un abuelo, es lindo y tierno, pacífico y amable, pero tiene su carácter.
- Claro que no señoritos, pueden ir a donde sea que sus pies quieran, es más, cuando quieran, puedo prepararles una salida del castillo para que conozcan los alrededores.
- Uh, eso estaría muy bien, muchas gracias mayordomo.
- Díganme Hobson, pueden buscarme para cualquier cosa que quieran. Lastimosamente no puedo estar con ustedes siempre, el castillo es grande y necesita que esté supervisando siempre. Como las cosas son así, tendrán una sirvienta que será su compañía durante todo el día, ella los ayudará.
- ¿Una niñera?
- Sería más bien una compañera más. No se preocupen por eso, si ustedes gustan pueden elegirla o puedo hacerme carga.
- ¿Podemos elegir?
- Claro que sí.
- Tengo a alguien en mente, pero no es de aquí, ella es del otro castillo.
- Puedo conseguir que la traigan aquí. Otra sirvienta le explicará a su cuidadora todo lo que tiene que saber.
- No hay problema, aprende rápido.
- Como diga usted, joven Nataniel. Y usted señorita Ayla ¿tiene alguna duda?
En todo el transcurso del castillo Ayla nunca habló, el único que hizo las preguntas era Nataniel, solo se escuchó su voz, pero nunca la de ella. Hobson tenía bastante curiosidad por estos niños, quiere acercarse a ellos, pero no quiere ser tan invasivo.
Ayla aún desconfía de todo y todos. Quiere hacer esto por Nataniel, pero su desconfianza es mucha, le preocupa todo, pero lo intenta.
- Ninguno.
Fue lo único que salió de su boca.
- Bueno, me podrían decir el nombre de su cuidadora.
- Lana.
- Y apellido, joven Nataniel.
- Solo Lana, es la única, rápido la encontrará.
Hobson llevó a los niños a sus habitaciones, estaban juntas, así que no había problema. Lo único complicado es que estaban algo lejos de todo. Como una sección apartada. Hobson pudo notar la cara de duda en los niños, intentando calmar las cosas.
- Es algo lejos, pero las otras habitaciones están algo descuidadas u ocupadas. Estas son las mejores que encontramos.
- Está bien, gracias.
- Me retiro, sus maletas están dentro, en un rato les traerán la comida, adiós.
***
Claro, otro perro con ese hueso. La verdad no le importa que los mandaran algo lejos del castillo principal, este lugar se ve que no ha sido usado durante mucho tiempo. No le sorprende que los enviaran aquí por ser bastardos, era mejor mantenerlos lejos de las miradas, pero detesta cuando le mienten, que tengan el valor de decir las cosas a la cara.
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LAUREL
RomanceOliver reencarnó con su amiga Ayla en una novela de harem hetero que su hermana menor amaba. Ahora los dos tendrán que ver cómo sobrevivir y no llegar al lamentable final que les espera. En la novela, la hija bastarda del rey se vuelve una princesa...