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Eh terminado mi tarea con JungKook, pero no hablamos de absolutamente nada, cada vez que quiero decirle algo, mi niñero no dejaba de interrumpirme. En ése momento me sentí enojado, irritado, cabreado y, todo lo negativo que terminé con “ado”, bueno, simplemente.. ¡Es demasiado molestó!.

Luego de acompañar a JungKook a la puerta, me despedí de él con un movimiento de manos porqué, ya había salido, diciéndome un “Adios”, con la cabeza baja y, caminando por la acera. Me eh sentido mal al verle de ése modo, entonces, apreté un poco los puños de mis manos y, frunci mi ceño, entrando de nuevo a la Casa.

Caminé por la sala, para dirigirme a la cocina, dónde me encontré a mi niñero con un café al lado y, escribiendo algo en su celular, cómo siempre. Entonces, suspire y, caminé para sentarme a la mesa frente a él, enredando mis dedos, viéndole ésa pálida cara de vampiro. ¿Alguna vez habrá tomado el sol?...

Negué con la cabeza frenéticamente.

¡No no!. No te distraigas.

— ¿Éstas bien acaso?. — Alce mi mirada sorprendido, ¿habrá escuchado algo?. No, sería estúpido

— ah ...Yo, no, en realidad. — Él alzó una ceja, pero no dijo más nada. Carraspeo y, empezó a mirarle serió — Quiero hablar de tu actitud de hace unas horas. —

— ¿De que hablas?.. —

— Pues.. Es algo que no me gustó ¡Para nada!. —

— ¿Y entonces?. —

Apriete los labios de la molestia al saber que no le interesaba en lo absoluto y, suspire, no iba a formar un alboroto por eso. Bueno, puede ser..

— Te portaste tan terrible y, hubieses sido más amable con JungKook. —

— Solo estaba al pendiente.. — Sigue sin mirarme a la cara, ¿que es lo interesante que éste viendo que no quiere voltear a verme?.

—T-tú Interrumpes. Pues, no me gusta y, yo  solo quería hablar con él un rato a... —

— ¿A solas? — Completó. Al fin, alzando la mirada para mirarme a los ojos, en ése momento me intimido un poco, pero traté de aguantar el contacto visual — No sabes cómo es él, ¿O si?. Solo es tu compañero de clases, es mi deber sacar extraños de la Casa. —

— ¡N-no es un extraño!, ¡Y es mi amigo!. —

— ¿Y que hacías acercándote tanto a él?. —

— ¿Que hacía yo.. qué?. — Me ruborizó un poco, desviando la mirada.

— Estabas hablando con él, pero creí que estaban en problemas o algo así, por eso entré.. — Sonrió levemente burlón.

— No entraste por eso. — Río seco.

Lo hice — Dijo eso en voz más grabé de lo usual, manteniendo su mirada en la mía, tanto que yo llegó a temblar si no hubiera vuelto su atención al celular de nuevo — Ahora, ¿puedes seguir en lo tuyo?. —

— No. Primero, ¿Porqué actuaste así con JungKook? ¡Y lo miras como si quisieras matarlo!. —

Fruncio el ceño — Deja de gritar y, ve a tu habitación —

— ¿¡Quieres al menos contestarme!? —

Me asalté cuándo de pronto bajó su celular, casi reventándo contra la mesa, YoonGi me lanzó una mirada aterradora, una de esas de terror y, alzó el dedo, apuntando a la salida de la cocina — ¡Ve a tu habitación y, no lo volveré a repetir! —

Me quedé un momento paralizado y, asombrado. Infle mis mofletes y, me levanté de la silla rápidamente gritándole — ¡¡Bien!! — Camine a las escaleras — ¡Me harté de esto! — y entré a la habitación azotando la puerta, diciendo un montón de groserías después.

MI NIÑERO | YoonMin |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora