Preciosos Algoritmos 🌠 18+ [Glamrock Freddy x Fem! reader] SemiAU

Chip De Memorias

Narra Freddy

Sabía que mi diva no duraría ni dos semanas en hacer válido su pequeño premio. Es decir, una parte de mí tenía la certeza de que no tardaría demasiado, pero otra parte piensa que ha vacilado un poco más de la cuenta. Es que acaso no deseaba verme? Tal vez esto es demasiado infantil para ella?

No. Genuinamente parecía emocionada. O acaso... No soy lo suficientemente llamativo como para atraer clientes incluso si han ganado el sorteo? Debo de dejar mis estúpidas crisis existenciales o podrían causarme un corto circuito.

Con cuidado cepillo el hermoso pelaje que recubre mis músculos de silicona. Es tan real, denso y suave, infinitamente mejor que el que tenía con anterioridad. Mi cuerpo previo era un modelo sumamente básico. Operaba en una pequeña pizzería, una de las primeras en abrir hace años.

Tuve suerte de que al ser desmontada como tantas otras sucursales debido a las malas finanzas de Fazbear entertainment mi endoesqueleto y varias tarjetas de memoria soportaran el paso del tiempo, encerrados a oscuras en una bodega. La humedad y el polvo carcomieron mi antiguo recubrimiento, que de porsí no era muy impresionante... Pero ahora soy un animatrónico nuevo gracias a la restauración e implantación de múltiples mejoras, un Freddy de última generación. Es increíble.

Admiro mis manos, también recubiertas de este material semiorgánico, capaz de restaurarse a sí mismo tal como la piel natural. Mis uñas absorben el baño de proteínas en aerosol que tomo cada seis o siete semanas, así que se han vuelto tan grandes y fuertes que en ocasiones me es requerido limarlas. Lo mismo puedo decir del armazón de silicona que recrea perfectamente los músculos debajo de mi pelaje, aportando una forma bastante llamativa, así como volviéndome resistente al agua.

Incluso podría sumergirme en una alberca. Con las debidas precauciones.

Una vez terminando mi rutina pre establecida de mantenimiento diario tomo el pequeño sombrero de copa que va sobre mi cabeza, colocándolo en su lugar respectivo. Un ligero click me hace saber que ha embobado en su lugar y no se moverá, gracias a los imanes que lo unen a mi cráneo.

Hmm... Parece que estoy listo. Me miro en el espejo de mi cuarto-camerino y doy una pequeña sonrisa. Qué dientes tan blancos tienes, Freddy Fazbear.