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Ahora dime tú, ¿Eres lo realmente fuerte para salir de la realidad de tu mente?
The time of our live-

                                           Alucard

     Meterme en el centro no era el plan, pero no siempre sale las cosas como quiero, a pesar de todo casi no tengo tiempo para nada.

     Me molestaba eso.

     Si no fuera porque Malori metió la pata al decir que estábamos era buscando trabajo nada de esto estuviera pasando, ahora tenía que pasar tiempo con personas enfermas y raras, además de que el velo entre lo sobrenatural con humanos cada día estaba más fino y era cosas que no se podía pasar desapercibido.

     Una de las cosas que mi difunto padre nos metió a la fuerza ena cabeza era tratar de no tener nada de relación con el mundo oculto, ellos estaban bien de su lado y nosotros del nuestro, pero quién diría que eso cada día estaba más débil, avistamiento y guerras que provocaban por diversión era lo más débil, sin hablar de los secuestros y demás cosas que se veía muy a menudo.

     Tire los lentes lejos y me recosté de la silla.

     Los informes que me daban semanal de como iba las cosas al rededor del mundo cada semana era peor, secuestros más que todo, pensar que son niños más que todo solo me pone más molesto porque no me gustaría que eso le pasara a mi hija, y como padre se que otros piensan lo mismo y el dolor que eso le debe causar no me lo imagino.

    Me doy la vuelta en la silla y miro la ventana que me muestra la parte trasera de mi casa en dónde hay una piscina y Nixy está recolectando frutas de el pequeño huerto que con esmero ella y mi madre construyeron. No sabría que hacer si esas malditas bestias se la llevarán a cualquiera de ellas.

     Mi teléfono suena con un mensaje recordatorio de que a las cuatro tenía un examen físico que supervisar en el centro y tiro en la mesa también el teléfono, necesitaba aunque sea un respiro para poder continuar.

     ~"—Ella es mi amiga nadshira..."~

     La voz de su amiga vuelve a mi cabeza mientras recuerdo su rostro llevo de arrogancia y superioridad de esos en lo que nace sabiendo que eres mejor y superior a los demás, era atractiva, no había que negarlo, más no está en mi el interés en hacer algo más que solo su supervisor de entrenamiento.

     Había estudiado su expediente ya que el director me la entregó directamente para indagar su estadía y resistencia más ella solo se esmeraba en hacer todo, no responder preguntas y desaparecer después. No estaban recluidas ya que eran nivel cinco así que podían salir del centro y hacer lo que quieran pero tenían que volver y reportarse.

     —Nadshira...

     Susurró su nombre saboreando como se desliza de mis labios, imagino que es de una lengua antigua semejante nombre y debo felicita a su padre por un nombre tan peculiar, hace que lo saboree y medite que tanto esconde.

     Tocan la puerta dándole paso a una empleada que ordena todo rápido y cuando está en la puerta se aclara la garganta. No me esmero en verle la cara, cada tres meses mi madre las despedía por seguridad de Nixy y la nuestra.

     —Señor...—la inseguridad se le nota así que me doy la vuelta mirando como se rasca el codo —Lo están solicitando en la sala, la señorita Isadora.

     Hace una reverencia leve y sale rápido como si le diera miedo lo que diría.

     Suspiro, lo que faltaba, ahora como me quito a esta loca de encima.

NadshiraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora