Cuando te conocí

Capítulo 3

Había recibido un mensaje de Elliot.

*Estoy en la puerta de tu casa. ¿Puedes salir un momento?*

Me dirigí hacía la puerta y ahí estaba Elliot.

- ¿Qué haces aquí? – le pregunte sorprendida

- ¿Acaso no puedo venir a visitarte? –

- Si... claro que puedes. Pero no esperaba que vinieras a esta hora.

Desde adentro de mi casa se escuchaba la voz de mi madre preguntándome si estaba todo bien.

- Estamos cenando. ¿Quieres pasar? – le pregunté

- Claro. – me respondio él

Entramos a mi casa con Elliot y mis padres se sorprendieron al verlo.

- Hola Elliot – lo saludaron mis padres.

La relación de mis padres con Elliot no era muy buena. Mi papá era bastante seco con todo el mundo pero cuando traía un chico a casa se transformaba. No le gustaba mucho que este con Elliot. Mi madre en cambio, le caía bien.

- ¿Quieres cenar algo querido? – le pregunta mi madre

- No, esta bien, gracias. Solo estaba de pasada y pase a visitar un rato a Maddie – le responde él

- ¿Solo un rato? –

- Tengo que hacer deberes de la universidad y todavía no he terminado.

- Ok, ven vamos a mi habitación

Nos dirigimos hacia mi habitación y una vez dentro cerré la puerta.

- ¿A qué viniste? – le pregunte enojada

- ¿Eh?. Ya te dije. Pasaba por aca y decidí pasarte a visitar

- ¿Así sin más?. Oh casualidad ahora pasabas por aquí y te dieron ganas de venir a visitarme...

- Maddie, no empieces –

- No empiezo nada Elliot. Hace diez días que no nos vemos, que no hablamos. Cada vez que te llamo para vernos me dices que estás ocupado con los entrenamientos de basquet pero después me entero que andas de fiesta con tus amigos por ahí. ¿Qué está pasando? –

- No esta pasando nada Maddie. Estoy muy concentrado con los entrenamientos del equipo. Sabes que dentro de poco empiezan las competiciones y tenemos que entrenar lo más posible.

- ¿Pero tienes de tiempo de irte de fiesta con tus amigos pero no tienes tiempo de venir a ver a tu novia?

- ¿Vas a seguir con eso? . Ni siquiera me diste un beso cuando nos vimos – acercandose a mi y agarrandome por la cintura

- No tengo ganas de darte un beso Elliot. Sueltame –

- Maddie, por favor. Se que estuve bastante distante estos días y te pido perdón. Por eso estoy aquí. – dandome un beso en los labios - ¿Quiéres que veamos una pelicula? –

No podía dejar de pensar que todo lo que estaba pasando era sumamente raro. ¿Por qué se aparecía por mi casa de repente asi sin más?

- Ok, como quieras –

- Maddie, ven –

Elliot me sostiene del brazo y me sienta en sus piernas

- ¿Qué te pasa amor? ¿Por qué estás tan peleadora ultimamente? –

- Elliot... no se como decirte esto... pero siento que las cosas no estan funcionando bien ultimamente. Estas muy raro, muy distante, casi que ni hablamos, de repente veo una foto tuya con esta chica que no se quien es. Te apareces por mi casa sin avisar cuando hace diez dias no nos vemos. No entiendo nada la verdad

- Maddie, por quinta vez consecutiva, no pasa nada. Vine a verte porque te extrañaba y quería estar con vos. ¿Acaso no estás contenta que te vine a ver?-

- Si claro que lo estoy –

- Y bueno entonces dejemos de discutir y aprovechemos el tiempo que estamos juntos –

- Perdon, no quería hacerte sentir mal –

- No hay problema . ¿Qué pelicula quieres que miremos? –

- La que tu quieras. Me da lo mismo –

Nos pusimos a buscar una pelicula en internet y la miramos. Habían pasado mas o menos 45 minutos desde que empezó la pelicula y me di cuenta que no paraba de vibrar el celular de Elliot.

- ¿Te están llamando? –

- Si, es mi madre que me estuvo llamando todo el día. No se que quiere. Seguro quiere molestar

- ¿Y por qué no la atiendes? –

- Porque ahora estoy contigo y no quiero que nos interrumpan. –

Seguimos mirando la película y el celular de Elliot seguía vibrando sin parar. Al pasar una hora la película ya había terminado.

- ¿Por qué no llamas a tu mamá? Capaz le paso algo y por eso te estaba llamando. –

- No te preocupes. Esta todo bien. Creo que es hora de que me vaya, ya es tarde y mañana tenemos que levantarnos temprano. –

- Si, mejor vete –

Elliot me saludo con un beso en los labios y lo acompañé hasta la puerta .

- ¿Seguro que esta todo bien Elliot? –

- Si Maddie, está todo perfecto.

- Ok, nos vemos mañana. Buenas noches –

Entre a mi casa luego de despedir a Elliot y no podía dejar de pensar en todo lo que había pasado. Me dirigí hacía la cocina y agarré un vaso de agua.

- Hija. ¿Te encuentras bien? – lo escucho decir a mi padre

- Papá, me asustaste – le respondí –

- Perdón. No era mi intención. ¿Te encuentras bien? –

- Si, solo estoy cansada. –

- ¿Seguro? – me pregunta él

- Si, segura.

Mi papá sabía exactamente cuando le estaba mintiendo y sabía exactamente que en ese momento lo estaba haciendo pero también sabía que debía darme mis espacios.

- Hija, sabes que hace unos días te noto un poco rara, con los ánimos por el piso y sabes que puedes confiar en mi. –

- Si lo se papá. Gracias

- ¿Estás teniendo algún problema con tu novio? –

- Se llama Elliot papá –

- Si, se como se llama hija. –

- Entonces llámalo por su nombre –

- Prefiero llamarlo "tu novio". ¿Está todo bien? –

Lo mire un poco preocupada ya que no quería contarle todo lo que estaba pasando ya que sabía que no le caia bien Elliot y si le llegaba a contar que sospechaba que Elliot me estaba engañando iba a matarlo.

- Tuve una discusión con Elliot pero nada grave. –

- Oh, lo siento hija. - ¿Puedo decirte algo?

- Si claro –

- No me cae muy bien ese chico. Me da mala espina. Pero se que tú erés feliz con él y eso es lo que me importa, que tú estés bien. Pero si yo me llego a enterar quete lastima o te hace derramar una mínima lagrima se las va a tener que ver conmigo. -

- Jajaja, si eso lo se papá. –

- Bueno, ahora vete a dormir que ya es tarde y mañana tienes que levantarte temprano . Hasta mañana hija. Buenas noches –

Saludé a mi papá con un beso en el cachete y subí a mi habitación. Dejé mi ceular cargando en la mesita de noche y me recosté. Había sido un día super largo y no tenía ganas de otra cosa que no sea dormir. Me acomodé en mi cama y fui cerrando los ojos de a poco hasta quedarme dormida. Mañana será otro día pensé...