Nunca le interesó relacionarse con los demás, solamente miraba hacia adelante sin intención de mirar hacia ningún otro lado
Hasta que un día al entrar en Rakuzan por diversos motivos termina por toparse con el Rey de aquella preparatoria
"Te daré...
- Me voy - Sentenció de golpe para que Akashi suspiré
- Siéntate - Ordenó dese su lugar con un tono autoritario - Si no vuelves aquí en menos de cinco, tendré que mostrarte lo que es un castigo, Ota - advirtió a lo que este solo se alejo un poco
- ¿Por qué? - Cuestionó algo molesto el más joven - Solo me voy a ir a casa - Volvió a decir a lo que Akashi suspiro levantándose
- Seré blando ya que es la primera vez que recibas un castigo - Dijo subiendolo a su hombro y llevándolo hacia su habitación
- ¡Espera! ¡Bájame! - Dijo molesto el menor tratando de safarse, pero solo fue soltado en la cama
Akashi se colocó encima suya acorralando a Ota y lo beso sin cuidado tomándolo de la nuca
Este parecía resistirse pero se sorprendió al sentir la lengua de Akashi atacando la suya a lo que sintió aún más rubor en su rostro
Al separarse sintió la respiración agitada y su mente en blanco mirándolo para luego tratar de tomar más aire
- Respira por la nariz - Ordenó para volver a tomar su boca está vez pasando su manos por su espalda provocando que está se arqueé levemente
- B...basta - Dijo tratando de alejarlo a lo que Akashi sonrió con aquellos ojos de nuevo, sentía que iba a ser devorado
- ¿Quieres que me detenga? - Cuestionó quitando su camiseta con simpleza - Solo di que te quedarás aquí y párare - Dijo para bajar a su cuello comenzando a besar en este
"Solo resistiré un poco y me iré" pensó decidido el joven para soltar un respingo al sentir como Akashi comenzaba a tocar su pecho
- Estás distraído ¿Acaso planeas dejar que llegue hasta el final? - Pregunto para bajar una de sus manos a su trasero - Solo debes decir que te quedarás - Ofreció en su oído para morder este
Ota parecía estar conteniendo cualquier ruido o reacción cosa que molesto al pelirrojo para luego morder su pecho provocando que se queje
Abrió su pantalón para bajar estos y tocar su hombría sin pudor haciendo que suelte un gemido para taparse la boca
- No lo diré - Dijo de forma temblorosa para morderse el labio
- Entonces no parare - Sentenció apretando levemente mientras movía su mano y llevaba las manos de Ota sobre su cabeza
- Yo... - Comenzó a temblar mientras gemía levemente para comenzar a desesperarse más al estar más cerca de correrse
Aunque al estar a punto de correrse Akashi se detuvo de golpe mirándolo fijo con una sonrisa maliciosa
- ¿Que? - Cuestionó Ota confundido
Akashi volvió a comenzar a mover su mano de forma lenta y tortuosa para que, de forma muy notaría, el peliazul comience a desesperarse y frustrarse
- ¡Por favor! ¡Deja de hacer eso! - Dijo cómo pudo molesto a lo que Akashi solo volvió a hacerlo - ¡Haré lo que sea pero para! - Dijo desesperado
- Ya sabes que tienes que hacer, así que si quieres que acabar solo debes decir que te quedarás - Sentenció
- ¡Me quedaré! - Dijo fuera de si para que Akashi finalmente le permita correrse de forma abundante en su abdomen
Se alejo un poco para admirarlo, estaba sonrojado con una expresión de alivio que lo volvía lascivo, y su abdomen totalmente manchado con su propio semen, mirándolo con cansancio
- Lo hiciste bien - Dijo para acariciar su cabello y besarlo con gentileza haciendo que Ota se relaje más para dormirse en aquel mismo lugar
Akashi sonrió satisfecho para simplemente acostarse a su lado admirandolo un poco
"Definitivamente voy a marcarlo tanto que solo podrá hacer esto conmigo" pensó de forma posesiva para dormir a gusto
A la mañana siguiente cuando el pelirrojo despertó no sintió ningún calor a su lado abriendo los ojos y viendo que estaba solo en la cama
Se vistió y busco en la casa con calma para sorprenderse de que Masanobu no estaba por ningún lado, cosa que pareció molestarlo
- Se ve que quiere jugar al gato y al ratón - Murmuró para ir a desayunar con toda la calma del mundo
El lunes sería Ota quien recibiría un castigo ejemplar por huir de él
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