22

2.6K 347 64
                                    

—Ah... Taehyung, aquí no, estamos en la oficina. Podrían vernos en cualquier momento.

—¿Pero eso no lo vuelve aún más emocionante? —Preguntó Taehyung, acariciando los glúteos del más bajo. Sus labios explorando la piel expuesta de su pecho.

—No... —Dio un suspiro entrecortado —. Esperemos a llegar a casa, ¿si?, necesito terminar unos documentos...

—Será rápido. Prometo hacerte sentir bien.

YoonGi apretó sus labios, tratando de controlar sus impulsos. Después de todo, Taehyung no necesitaba decirlo en voz alta para ser consciente sobre ello, recordando lo bien que se sentía las caricias y besos del Beta sobre su piel, además de su increíble capacidad para hacerlo delirar en cada encuentro íntimo que mantenían.

YoonGi lo besó en respuesta y Taehyung sujetó con firmeza sus caderas, uniendo sus labios en un beso dominante y lleno de lujuria. YoonGi gimió sobre los labios del contrario y desvío su mirada al sentir una presencia en la oficina. Su rostro palideció en esos momentos, y su cuerpo se puso rígido. Taehyung lo notó y se separó del beso, sorprendiendose al momento de ver al padre de YoonGi ahí, quien los veía con total indiferencia.

—Papá... ¿Qué estas haciendo aqui? —Preguntó YoonGi, su tono de voz demasiado bajo.

—Ahora entiendo porque no te negaste a contraer matrimonio con un "desconocido", tal parece que tu "etapa" perduró más de lo que pensaba.

YoonGi desvío la mirada por unos momentos antes de hablar de nuevo.

—Te lo dije hace años, que no era una etapa...

—YoonGi, no seas ridículo. Un Alfa no puede recibir por el culo, ¿sabes lo denigrante que es eso?, lo que debes hacer es pensar en tu futuro, formar una familia y...

—Lo que haga con mi cuerpo, no es asunto tuyo. Además, te estás olvidando que no estamos solos, por favor, se prudente y espera a que tengamos este tipo de conversaciones en privado.

—Por mí, ese Beta puede escuchar, después de todo, el lo sabe, que lo que ustedes tienen es algo temporal. Su matrimonio no es para siempre.

—¿Y qué pasa si yo quiero que lo sea?

—Pero, ¿que dices?, no estoy para bromas, YoonGi.

—No es una broma. Yo en realidad estoy enamorado de él.

Taehyung lo miró sorprendido. Si bien, no sabía de la negativa de su padre hacia su compromiso, no tenía idea de qué YoonGi respondería de ese modo.

—Llevas dos meses casado con este tipo. —Dijo, señalando a Taehyung —. No puedes decir que lo amas en tan poco tiempo, es básicamente imposible.

YoonGi suspiró, sintiéndose bastante fastidiado ya para ese punto.

—Como dije antes, es mi vida, yo se lo que hago con ella. Si lo amo o no, ese es mi asunto. Y ya he tomado mi decisión al respecto.

—Te vas a arrepentir, muchacho. Este tipo solo está jugando contigo.

Taehyung tragó duro, sintiendose de pronto demasiado expuesto. Sin embargo, ¿era realmente experimentar algo nuevo, jugar con esa persona?

Claro que no estaba interesado en tener algo serio con el Alfa. Más, no consideraba que estuviera haciendo algo malo, después de todo, ambos lo estaban disfrutando.

—Él me ama, no tengo dudas sobre eso.

Taehyung sintió la sensación de pesadez en su estómago al escucharlo, no se esperaba que el Alfa dijera eso.

—No sabes lo que dices. Vas a salir herido, y no quiero que vengas a lamentarte conmigo cuando eso suceda. Te estoy advirtiendo desde ahora.

—Bien, ya he escuchado tu advertencia, padre. Ahora, ¿podrías retirarte? ¿O vas a decir algo realmente importante?

—De hecho si, venía a hablar de un par de negocios que quedaron pendientes.

YoonGi asintió.

—¿Podrías esperarme fuera? —Preguntó YoonGi, su mirada fija en Taehyung.

Taehyung asintió y salió de la oficina, la incomodidad en su pecho persistiendo aún estando fuera. Iba a dirigirse a su escritorio cuando escucho su teléfono vibrar, era una llamada entrante de su mamá.

—¿Qué pasó?

—¿Cómo va el plan? ¿Ya se enamoró ese Alfa de ti?

Taehyung dudó, pero aún así respondió:

—Sí, creo que si.

Taehyung escucho un chillido de emoción por parte de su madre a través de la línea, aquello provocando que el malestar sólo incrementara.

—Ese es mi hijo. Tu sigue así, tenemos que conseguir que firme los documentos. Ese dinero tiene que ser nuestro, hijo.

—Sí... Nuestro.

Mɑtrimonio por Contrɑto (𝕺𝖒𝖊𝖌𝖆𝖛𝖊𝖗𝖘𝖊) 𝓣𝓪𝓮𝓰𝓲Donde viven las historias. Descúbrelo ahora