Bright ha sido mi mejor amigo desde que teníamos dos años. Hacemos todo juntos, y es por eso que me sentí... raro cuando siendo adolescentes me enteré que él era gay. ¿Cómo puede Bright hacer algo sin mí?
Pero ahora se va a casar... con un tipo con...
—Los declaro esposos —, dijo el oficiante, las palabras apenas salieron de su boca antes de que Win me atrajera hacia él y me besara, con el sonido de los aplausos y los vítores a nuestro alrededor. Por supuesto, técnicamente ya estábamos casados, pero queríamos otra ceremonia, para hacerlo bien esta vez y fingir que era la primera.
Nuestros padres estaban en primera fila, el resto de nuestras familias detrás, y también algunos de nuestros amigos de la infancia: Dew, que estaba felizmente casado con un hombre, y Tu y Prim, que no se habían sorprendido en absoluto cuando se enteraron de que estábamos juntos.
Y First, también estaba allí. Había conducido desde Chiang Mai con el amor de su vida a su lado.
Win me agarró la mano y la levantó. —¡Es hora de festejar y celebrar lo nuestro! En serio. Somos la mejor pareja de la historia —, dijo, haciendo que todos aplaudieran más fuerte y se rieran. Nadie se sorprendió de sus payasadas.
La boda fue increíble, y la recepción aún mejor, llena de risas, felicidad, amistad, familia y amor.
Había sido un año largo. Win y sus padres habían tenido muchas conversaciones difíciles, y sus padres se habían separado. Aunque él pensaba que era lo mejor, seguía siendo difícil para él lidiar con ello, pero yo había estado ahí para él, asegurándome de que sabía que era amado y que nunca lo dejaría.
La noche fue rápida y lenta a la vez. Quería saborearla, pero también quería llevar a mi esposo a la suite de luna de miel, aunque no fuera todo eso en el pequeño pueblo en el que crecimos. Pero al día siguiente nos iríamos a nuestra segunda luna de miel, esta vez a Europa. Pensamos en volver a Puerto Vallarta, pero queríamos algo diferente, algo nuestro. Íbamos a recorrer Irlanda, Escocia, Inglaterra y Francia. Queríamos viajar a todas partes, explorar el mundo al lado del otro.
Bailamos y comimos pastel. No habíamos tenido padrinos, porque éramos los mejores amigos del otro y eso era todo lo que necesitábamos: el uno al otro.
Finalmente, pudimos escapar, una limusina nos llevó del lugar de celebración al hotel.
En el momento en que estábamos en la habitación con la puerta cerrada, tiré de Win hacia mí, ahuecando su cara, rozando las puntas de mis dedos sobre sus mejillas. —No puedo creer que seas mi esposo.
—He sido tu esposo por más de un año.
—Sí, pero esto es diferente... y todavía no podía creerlo en ese entonces.
—Tienes mucha suerte —. Win sonrió.
—Estaba pensando lo mismo de ti.
—Los dos somos afortunados. Podemos estar casados con nuestro mejor amigo. — Sonrió y lo besé —. ¿Podemos tener sexo de luna de miel ahora?
—Pero tienen una bañera de hidromasaje. Quiero bañarme contigo primero.
—Bien. Baño y luego sexo de luna de miel. Quiero ser el de abajo primero. Y tienes que hacer eso que haces con tu lengua y mi culo, ya sabes lo que me gusta. — Habíamos descubierto en el último año que Win era un trasero bastante codicioso. Lo cual tenía sentido. Siempre había querido tenerlo todo y no sentirse excluido.
Enarqué una ceja. —¿Alguna otra exigencia?
—De momento no, pero si me das tiempo, seguro que se me pueden ocurrir algunas más, esposo.
—No me cabe duda de que puedes.
Pusimos en marcha la bañera y nos despojamos mutuamente de nuestras ropas.
Permanecimos en el agua hasta que nuestros dedos se arrugaron, Win entre mis piernas con su espalda contra mi pecho. Jugué con sus pezones, su polla, ahuequé sus bolas, pero la mayor parte del tiempo, solo hablamos y disfrutamos el uno del otro.
Cuando el agua se enfrió, me incliné y le chupé el lóbulo de la oreja. —¿Quieres que te coma el culo ahora?
—Pensé que nunca lo pedirías.
Salió de la bañera y me arrastró con él. Nos secamos y nos tiramos juntos a la cama, besándonos, tocándonos, acariciándonos, saboreándonos.
—No hay nada como el sexo contigo —, dijo Win mientras nos besábamos tranquilamente.
—Date la vuelta.
Se puso a cuatro patas y yo me arrodillé detrás de él, separé sus mejillas y lamí su agujero mientras se retorcía y gritaba, empujando su culo contra mi cara como si lo estuviera cabalgando.
—Fóllame... por favor, date prisa y fóllame —, dijo sin aliento.
Me lubriqué, sujeté sus caderas y empujé dentro de él. Exhalamos los dos a la vez, mis ojos se pusieron en blanco al sentir su agujero caliente y apretado exprimiéndome.
Lo levanté para que su espalda quedara pegada a mi pecho mientras lo follaba y me introducía en él, haciéndole el amor, besando su cuello y sus hombros, dejando que mis manos exploraran cada centímetro de él.
Hicimos el amor lentamente, en todas las posiciones que se nos ocurrieron. Cada vez que uno de los dos estaba a punto de correrse, nos apartábamos. Él también se lubricó, empujó dentro de mí, pero cuando finalmente nos corrimos juntos, fue con mi polla dentro de Win de nuevo, su cuerpo exprimiendo mi carga, mi liberación llenándolo mientras él se corría sobre nuestras manos, su estómago y la cama. Caímos juntos en un montón, abrazados el uno al otro.
—Te amo, esposo —, dijo primero Win.
—Yo también te amo. Siempre.
Y supe que era cierto. Siempre seríamos nosotros, Bright y Win, envejeciendo juntos, sentados en el porche delantero por las tardes, molestándonos el uno al otro, tal y como había soñado.
—Me pregunto cómo estará Air —, dijo Win, sorprendiéndome.
Habíamos intentado encontrarla, invitarla a la boda, pero no habíamos podido.
No sabíamos lo suficiente sobre ella.
—Creo que ella sabe que somos felices —, le dije.
—Dios, eres tan dulce y sensiblero.
—Cállate. Te odio.
Nos reímos, nos abrazamos fuerte y luego nos fuimos a dormir.
FIN
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Hasta aquí la historia, espero les haya gustado 🥰 Cuídense ♥️.
