Esperanza.

Fé

Sus manos están manchadas de sangre, por lo regular es algo que no le importa, pero está vez siente como si la sangre tibia le quemara las manos.

Está sujetando a Takemichi, abrazándolo más bien, Michi está hincado y tiene la cabeza reposando contra su hombro, Mikey siente las lágrimas que manan de los ojos azules contra su ropa, nunca ha entendido como es que su Takemitchi puede llorar tanto mientras el no puede .

¿Cómo es que esto paso? Un día está con sus amigos en un templo hablando de hacer una pandilla, al otro esta amenazando a los que aún quedaban, los que querían ayudarlo, llevarlo de regreso a la luz.

Y de repente, en un paroadeo está disparándole a Takemichi, su Takemichi, el más empeñado en ayudarlo, el que ha cargado con el peso de todo y todos en silencio, el que dejó atrás su futuro perfecto solo por él ¿Por qué?, ¿Por qué? ¿¡Por qué Takemichi!?.

Michi se ríe, logra escuchar el borboteo de sangre en esa risa “Mitchi no te rías, no hagas esfuerzo, la ayuda ya viene” ni siquiera sabe si la ayuda ya va, vio a Koko llamar a una ambulancia, pero la espera es eterna.

Para Takemichi es irónico que la forma en que llegó ahí es tan similar a la forma en que todo está acabando, aún cuando sabe que no ayudo a Manjiro, aún cuando el se lo pidió con lágrimas en los ojos antes de que ambos cayeran y se estrellaran contra el pavimento

“lamento no haber podido ayudarte, no haber salvado a Baji como me lo pediste, a Emma y a Draken, al final creo que el que te causo más problemas fui yo” siente que el rubio entre sus brazos tiembla “tengo frío” y luego se sacude y tose, Mikey siente el calor de la sangre fresca empapar su ropa, sabe que Takemichi está escupiendo sangre.

Cómo puede se quita la chaqueta blanca que apenas y colgaba de su hombro y cubre a Takemichi con ella, es casi hipnotizante ver cómo la chaqueta se mancha con sangre rápidamente, Mikey ahoga un gemido al ver eso, Takemichi está frío, casi inconsciente, ambos sobre un charco de sangre ¿Cuántos disparos le dio? Ni siquiera recuerda haberle disparado, de igual forma que no recuerda haberlo golpeado aquella noche lluviosa.

Chifuyu e Inui quieren correr hacia Takemichi, quitar a Mikey lejos de él, pero Kakucho detiene a Chifuyu y Koko a Inui, los demás están viendo la escena, unos más impactados que otros, el llanto de Senju se puede escuchar, Hakkai también está llorando, adora a Takemichi como un hermano.

Benkei se cuestiona ¿Cómo es que todo eso paso? ¿Qué diría Shinichiro de ver a Mikey así? Tal vez no se sorprendería, no después de ver lo que le hizo a Sanzu siendo niños y la forma en que Sanzu enloqueció y se sometió a Mikey ¿Por qué en ese momento no hicieron algo? Pudieron evitar todo esto.

Takeomi está abrazando a Senju, sin dar crédito a lo que vio, de la nada Mikey saco un arma y disparó una y otra vez contra el pequeño rubio.

Mientras tanto Mikey tiene tantas ganas de gritarle lo que siente por el, que debe vivir para que estén juntos, que volverá, que buscará ayuda, que aún pueden tener un futuro feliz, pero el sabe que en el fondo es un cobarde, siempre lo ha sido.

Pero Takemichi no lo es, oh no, siempre encarando problemas más grandes que él, aferrándose, todos sabían que era el más valiente de Toman y de todos los pandilleros habidos y por haber, así que el lo dice “Te amo Mikey, por eso no podía quedarme y casarme con Hina, no cuando tu sonrisa invadia mi mente al verla” y esas palabras retumban en la mente de Manjiro, ya no puede evitarlo y comienza a llorar, todo lo que no ha llorado en su vida, se aferra más al cuerpo de Takemichi, que ya está laxo sostenido únicamente por la fuerza de Mikey.

¿Cuánto tiempo ha pasado? Piensa que horas, pero sabe que no es así apenas un par de minutos, la ambulancia no llega “¡KOKO LA MALDITA AMBULANCIA!” grita desesperado y está tentado a tomarlo y llevarlo el mismo al maldito hospital.

“Anda Mitchi vamos, te llevaré al hospital, está vez mi moto está aquí, llegaremos a tiempo” la voz de Mickey tiembla y todos lo están viendo llorar, Mitsuya no da crédito a eso.

Mikey se levanta y trata de llevar a Takemichi con el, pero esté cae de lado, Manjiro lo detiene y lo pone de pie, pero Takemichi apenas y reacciona, está muy pálido.

Mikey da un paso y trata de cargar al rubio, pero este se queja, apenas audiblemente, vuelven a quedar como antes, con Takemichi hincado y recargado en Mikey “por favor Mitchi, te llevaré al hospital” Takemichi gimió “Mitchi no puedo vivir si soy culpable de tu muerte, te amo, maldita sea levántate y vámonos, luego podremos huir juntos y seremos felices” todos los presentes estaban en silencio.

Era sabido que Mikey tenía una preferencia por Takemichi Hanagaki, pero ¿amor? Había sido inaudito pensarlo.

Takemichi  alcanzó a mirar hacia Chifuyu que también estaba llorando y por fin pudo entender a Baji y porque hizo lo que hizo.

Le regaló una sonrisa a su querido socio y se aventó hacia un lado para tomar la pistola, Mikey no alcanzo a sostenerlo ni detenerlo, Chifuyu entendió, tuvo un dejavu y grito “Mikey detenlo” Manjiro apenas reacciono cuando  Takemichi hablo “tu no serás culpable de mi muerte Mikey” Takemichi uso las pocas fuerzas que le quedaban, apunto la pistola a su pecho sobre el corazón y disparó

“¡TAKEMICHI!” Grito Chifuyu soltándose del agarre de Kakucho y corriendo hasta su socio, pero ya era tarde, Takemichi había muerto, a los pocos segundos llegaron Mitsuya, Hakkai e Inui, todos rodearon el cuerpo de amigo mientras lloraban.

Sanzu corrió hacía Mikey y lo levanto, tenían que huir de ahí antes de que la ley llegará, pero Mikey, quien seguía llorando y llamando a su Mitchi, estaba sujetando la mano de Takemichi, Chifuyu lo vio con los ojos muy abiertos.

Chifuyu aventó a Sanzu para que soltará a Mikey, lo tomo de la playera y lo zarandeo con fuerza “dime que lo hiciste ¡DIMELO!” Mikey asintió, estaba destrozado y seguía llorando mientras aún sujetaba la fría mano de su Takemitchi.

“¿Cómo sabremos que funcionó?” cuestionó Mikey en un susurro, Chifuyu lo miro y negó con la cabeza “no se, solo mantengamos la fé”

El resto de los espectadores no entendían absolutamente nada de lo que hablaban, creían que habían enloquecido.

Mikey sollozo aún más fuerte, esperando un milagro mientras recargaba la cabeza sobre el pecho de Takemichi.

Por primera vez en años Manjiro Sano tuvo esperanza y fé, a pesar de que no se creía merecedor de ser salvado.

***

Llevo días pensando en el final de la pelea de Kanto vs Toman, así que para desfogarme escribí, quiero tener fe de que todo y todos estarán bien, pero siento que estoy siendo muy optimista.

Quise dejar el final abierto a interpretación de cada lector, justo porque es una forma de mantener la esperanza aún en la incertidumbre.

Espero que disfruten la lectura, tanto como yo disfruté escribirlo.

Gracias por leer y no sean tímidos con los corazones y comentarios ✨