Las niñas llevaban corriendo varios metros, las pequeñas habían presenciado la muerte de sus padres por aquellos monstruos. Todo había empezado hace una semana llegaron un tarde y atacaron a todos sus pobladores, matando a todo hombre y mujer que se atreviese en su camino.
Blum.. Un fuerte sonido estremecedor se oyó. Mariana de solo cinco años recordaba lo que habían dicho los adultos las naves habían caído en la capital varias personas habían muertos avanzaron por todo el país hasta llegar ahora a su pueblo. Sus padres habían tratado huir peor al caer mas naves, no sabían si podrían llegar a escapar por la frontera. Caminaron hacia el sur por el bosque, y se refugiaron en una cabaña a las orillas del rio pero cuando menos lo esperaba los monstruos los habían rodeado.
Sus padres las encerraron rápidamente en un armario. Las niñas no vieron nada solo escucharon un par de tiros cuando Sabrina su hermana mayor abrió la puerta del armario vio a los dos cuerpos llenos de sangre. El ser en la oscuridad parecía que disfrutada de la sangre se arrodillo junto al cuerpo de su madre mostro su lengua y comenzó a lamerla. El mostruo toco su pecho y lo abrió.
No mama -Mariana al ver la escena grito quería correr al lado del cuerpo de su madre
Sabrina tuvo que detenerla rápidamente, y taparle la boca .Pero aquel ser ya las había visto.
Ambas niñas salieron corriendo hacia el bosque.
El ser empezó a perseguirlas y detrás de el salieron dos seres más. Mientras ellas corrían parecía que uno de los monstruos discutían entre ellos.
Ya estaban agotadas de correr las piernas de la pequeña Mariana estaban cansadas. Cayo rendida junto aun árbol y aunque Sabrina la jalaba era en vano..
El ser cuya sombra por fin se dejo ver era un hombre, vestía ropa militar y llevaba en las manos un arma.. El hombre disparo a Sabrina directo en la cabeza matándola en ese instante. Mientras la pequeña Mariana lloraba y temblaba:
-por favor Sr. monstruo no me mate , el hombre sin miedo y sin pena le pego dos tiros una bala cayo en su pecho y la otra en su pierna derecha mientras agonizaba el hombre que venia persiguiéndolos llego..
Solo llego a escuchar una voz mientras todo se oscurecía : maldito idiota solo eran unas niñas.
