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Alexis
Me encontraba caminando entre las calles de la ciudad mientras escuchaba música en mis auriculares. Era una linda mañana, un día bastante tranquilo, a decir verdad. Después de caminar por un buen rato, decidí ir a una cafetería para comer algo, moría de hambre; así que me detuve en el primer establecimiento que vi, que casualmente, era mi cafetería favorita.
-Nick, su orden está lista- se escuchó el nombre de uno de los baristas.
El olor a café y pan recién horneado inundó mis fosas nasales casi al instante, provocando que mi estómago rugiera. Caminé directo hacia una de las mesas vacías cerca del mostrador de la tienda, desde donde se podía ver la mayoría de cosas que pasaban, como las personas que entraban o las personas que pasaban por fuera de la tienda.
Después de pedir mi orden, tomé mi teléfono para poder perder el tiempo mientras esperaba mi pedido. No pasó mucho para que ingresara un cliente a la tienda, haciendo sonar la campana de la puerta. Levanté mi mirada, percatándome de que era una chica rubia con un lindo vestido amarillo y tacones a juego con su vestido, no pude evitar pensar inmediatamente en Elara, esa chica era tan parecida a ella que juraría que es la misma chica de la que me enamoré hace un par de ayeres. Claro que no le quité mi mirada, si era Elara, estaba dispuesto a hablar con ella y aclarar un par de cosas que no pude hablar antes de terminar nuestra relación.
-Hola, un espresso y un panqué de moras a nombre de Elisa, por favor- logré escuchar la voz de la chica gracias a la poca gente que había en el local y el silencio que había en este.
No era Elara, pero era increíble que hasta en el nombre se parecieran demasiado, son como dos gotas de agua, aparentemente iguales, pero, a final de cuentas hay un par de rasgos que las diferencian. Por ejemplo, la nariz de esta chica no era igual de alargada y fina como la de Elara, sus ojos eran verdes, no azules con sólo un poco de verde en el centro de estos y tampoco tenía la misma dulce voz de Elara. Sinceramente, no sé porqué me esfuerzo tanto en creer que es la misma Elara quien está frente a mí, es decir, nuestra historia ya terminó hace un par de meses y no hemos tenido ningún tipo de contacto en todo este tiempo, quizás por lo que dijimos aquel día o quizás sólo porque ambos sabemos que a pesar de lo que pasó, no podríamos dejar de guardarle cariño al otro y eventualmente, volveríamos a terminar juntos. Pensándolo bien, no había pensado en ella desde hace un tiempo, buscando enfocarme en otra cosa para evitar sentirme peor de lo que ya me sentía, creí que ya la había superado por completo y que su recuerdo ya no me atormentaría. Supongo que me equivoqué.
Espero que les haya gustado mucho <3.
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