☽︎༆

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Empieza con mi mejor amiga, ¿cómo podría empezar a describirla?

Bueno, no hay mucho que decir, solo es mi compañía, sonará muy seco, pero es que ella es una máscara, debajo no hay más que simple hipocresía, todos la ven como un ser divino y no los culpo yo también lo veía así, es complicado, pero siempre recuerdo las veces que me miraba a los ojos y me descalificaba y gritaba diciéndome lo inservible que soy y también las veces en las que me decía como siempre la arrastraba conmigo en cada cosa, en cierta forma tiene razón pero ¿Qué puedo hacer yo con eso?....

Una de esas cuantas noches, desvelada pensando en todo lo que sucedía, me di cuenta de que estaba demasiado consternada, pensé y pensé y tomé una decisión podría ser precipitada y quizás errónea, supongo que lo esperado es que le haya puesto fin a esa toxica amistad o que incluso la aleje de mi por mi bien... pero por mi mente, pasaban otros planes.

Tales como acabar con ella de una vez...

Estaba tranquilamente acostada en la bañera, con el chapoteo del agua y la espuma comenzando a hacer burbujas, una imagen que daba una severa paz a esta mente consternada que solo repetía una y otra vez "mátala", "acaba con ella", "ponle fin a esta tortura" y yo solo obedecí.

Tomé la cabeza y la sumergí hasta el fondo, el chapoteó del agua ceso al momento en el que sus últimas burbujas de aliento salieron a flote, saqué mis manos del agua y al mirar la escena solo sentí un escalofrío recorriéndome todo el cuerpo y una sensación de liberación se hizo presente, lo hecho echo estaba...

Al salir nadie lo noto, así también sucedió al día siguiente, ya alterada acudí a la multitud, pero nadie parecía prestarme la más mínima atención y ahí en ese momento comprendí...

Este juramento era eterno, si ella moría yo igual, era la voz en mi cabeza y si una vez callaba significaría que yo ya no estaría en este mundo...

Tarde logré entenderlo, pues ya era un ser inexistente para muchos, una sombra que solo vagaba por los pasillos semi vacíos, en completo silencio, yendo de un lado a otro y se repetía, y repetía, y repetía, así pasaba...

Hasta la hora de mis medicinas.

𝑰𝒏𝒆𝒔𝒕𝒂𝒃𝒍𝒆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora