La noticia

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Hoy 19 de Septiembre de 1997 lo recordaré como el peor día de mi existencia, porque mis padres fallecieron hace unas horas, cuando me lo informaron lo único que pude hacer es llorar y gritar al teléfono.

Dijeron que mis padres habían chocado en la carretera mientras conducían hacia el aeropuerto, según la autopsia mi padre se había roto el tórax al igual que cuello por el golpe que ocasionó el otro vehículo y mi madre al no tener su cinturón de seguridad salió disparada por la ventana murió contra el pavimento a unos cuantos centímetros del accidente

La chica que estaba detrás del teléfono contándome todo esto trataba de calmarme pero, ella no entendía que antes de que mis padres viajaran a Estados Unidos había discutido con ellos

--¿¡Porque no puedo ir a la fiesta de Jessy!?--dije con un tono tan enojado que ni hasta yo me reconocía hablando

--Cariño, tu sabes que estas castigada por lo que hiciste la otra semana y tenemos ordenes estrictas hacia Mary, que no puede dejarte salir de esta casa hasta que te disculpes-- dijo mi madre con un tono serio y estricto

--Porque no limpio la casa, o los ayudo a subir las maletas-- dije simulando una sonrisa y mostrándome halagadora para que me levantara el castigo

--No te levantare el castigo hasta que no te perdones con tu padre y conmigo-- dijo mirandome y cruzando los brazos

--¡Ayyyy, los odio ¿sabes que mama?, ojala te mueras!-- dije con un tono tan sincero que rompí en llanto dirigiéndome a mi cuarto

Ahora me lamentaba lo que había dicho y desearía abrazarlos, decirles cuanto los amo, en ese instante corrí a mi habitación cerrre la puerta de un golpe y cayó una fotografia que tenia en mi estantería la levante, logre divisar cuando fui a pescar con ellos a las orillas del lago Hurón, los veía de nuevo sonriendo, mi pecho me comenzó a doler de una manera muy penetrante, me sostuve de mi pequeña cajonera lo mas fuerte que pude para no caer al suelo, las lagrimas comenzaron a salir una tras otra al recordar lo felices que eramos, antes de que todo esto pasará.

Con lo débil que estaba, mis piernas temblaron y me resbale cayéndome al suelo por suerte no logre lastimarme solo fue un golpe seco en el suelo, de tan triste y melancólica que estaba ya no sentía el dolor del golpe, tan solo pensaba en lo infantil que me comporte con mis padres y como los había perdido para siempre.

-¿Porque se fueron?..... dije con una voz entrecortada y sollozada-- fue mi culpa que murieran.....si tan solo hubiese cerrado mi boca, si tan solo me hubiese disculpado...

Después de casi 1 hora de llorar caí cansada, con los ojos rojos y húmedos al suelo me quede dormida tan solo con sentir lo caliente y suave que estaba la alfombra de mi cuarto, al abrir los ojos divise que había despertado en un bosque lleno de color y vegetación, mis padres estaban parados a lo lejos extendiendo sus brazos esperándome, lo único que pude hacer cuando los vi fue levantarme y correr lo mas rápido que podía pero al abrazarlos ellos se desvanecieron formándose en hojas de otoño, me quedé paralizada y el bosque comienzo a agrietarse, a oscurecerse como la noche pero una grieta se rompió debajo mío y caí al vacío gritando con todas mis fuerzas solo escucha la voz de una chica que me decía

--¡Elizabeth despierta!

Abrí los ojos sudando y temblando cuando vi a Mary, mi vecina, acariciando mi cabello tratando de calmarme

--Cariño, tranquila todo esta bien-- dijo en un tono dulce y amable

La mire y recordé lo que había sucedido hace unas horas, la abraze con todas mis fuerzas llorando en su hombro

--Ay Mary...todo esto fue mi culpa...si tan solo no les hubiera gritado...ellos no estarían muertos...-- dije volviéndome melancólica de nuevo

--Tranquila cariño no fue tu culpa, me informaron hace unos minutos y lo lamento mucho, ahora mismo estás a mi cargo-- dijo acariciándome la espalda-- pero no puedes estar a mi cargo toda tu vida ya que no soy parte de tu familia así que policia decidido hablar con tus abuelos maternos

¿Mis abuelos?...-- dije tartamudeando

Yo no sabía nada de ellos desde hace 10 años, ya que vivían en Italia y era muy difícil conseguir boletos para ir a su pueblo, por eso casi ni recuerdo sus rostros y sería bastante incómodo de mi parte ir a vivir con familiares que solo vi cuando tenía 7 años

--Si Beth, estoy segura de que ellos estarán encantados y felices de recibirte en su hogar-- dijo amablemente-- pero la que debe de llamarlos eres tu, ya que no dispongo
de su número de teléfono

--Si, no te preocupes Mary, yo los llamare

Sombra mortalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora