REUNIÓN CON DON ROBERTO

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REUNIÓN CON ROBERTO MENDOZA

En esta historia hagamos que Mario Calderón no ha leído el diario de Betty, y después del Almirante Padilla, Betty no se va y Armando tampoco. Ambos se quedan trabajando para levantar Ecomoda.

Pov Armando

En Ecomoda, en la oficina de Armando y Mario, a Armando se le nota nervioso.

M - Hermano, se puede saber ¿qué le pasa? Anda de aquí para allá como tigre enjaulado.

A - Mario, hoy mi papá viene a Ecomoda. Tiene una reunión con Betty.

M - Será que su papá le pidió reportes del lanzamiento, de cómo va la empresa, hombre, no entiendo su nerviosismo. O es que cree que su papá y Betty ¿tienen algo?¿ No estará celoso de su papá?

A - Ay Calderón, no sea ridículo hombre - digo hastiado.

M - ¿Entonces? ¿Qué le pasa hermano?

A - Yo creo que Betty quiere renunciar y por eso llamó a mi papá, para entregarle todo e irse. Después que leí su diario, la perseguí, le dañé su cita con el francés... ella se ha quedado, pero yo creo que para dejar todo en orden e irse con él. Pienso, hermano, que se me va a Cartagena con el maldito francés ese.

M -¿ Nos va a dejar botada la empresa?

A - No sé, Mario, no sé, pero tengo el presentimiento que se me va. Y si se me va, yo me muero Calderón, me muero sin ella. Yo la necesito como el aire para vivir.

M - ¿Y a qué horas es que tiene la reunión su amorcito con su papá?

A - Ahora a las 11:00h.

M - ¿La reunión será en presidencia?

A - ¿Qué le pasa Calderón? Claro que será en presidencia, ¿dónde va a ser?

M - ¿Y si escuchamos la reunión? Hermano si nos metemos en la Sala de Juntas y ¿le hacemos la competencia a Berta?

A - Calderón por Dios, ¿quiere andar de chismoso? - me quedo pensando, estoy histérico, lo sé y necesito saber qué va a hacer Betty, si la voy a perder. - ¿Sabe? No la voy a perder - digo decidido - si se me va a Cartagena, yo me voy detrás. Ella me ama, y algún día conseguiré que me crea, no me puedo rendir. Si para ello tengo que dejar Bogotá, Ecomoda, lo que sea, ella es más importante que todo eso. Estaré constantemente a su lado, insistiendo y algún día creerá que es cierto que la amo, que ella es la razón de mi vida.

M - No nos adelantemos ¿quiere? Primero veamos cuáles son sus intenciones, para qué demonios llamó a su papá y luego toma las decisiones que crea convenientes, yo lo voy a apoyar en todo, como siempre, pero primero sepamos qué decisión toma ella, ¿le parece?

A - Está bien, hagamos de chismosos porque no puedo contenerme, la verdad.

Cerramos con seguro la puerta de nuestra oficina y la puerta de la Sala de Juntas que da al lobby para poder escuchar tranquilos. Esperamos tranquilamente pues todavía faltan unos minutos para las 11:00h y se ve que Don Roberto todavía no llega. Escuchamos atentamente y oímos hablar a Betty por teléfono con el Banco Montreal, pero solo escuchamos la parte de Beatriz.

B - Todavía no le tengo una respuesta Don Manuel José, pero le prometo que en una semana le doy una respuesta definitiva.

Se oye silencio, se ve que está hablando Manuel José y Betty escucha. No presto mucha atención a la conversación, estarán hablando de costos, de la deuda pendiente, de temas de negocios, en definitiva.

B - Claro que sí, en cuanto me decida, le prometo que será la primera persona en enterarse.

B - Sí, claro, luego me paso y le firmo los papeles que quedaron pendientes.

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