Lo más horrible de la vida son los hospitales si ellos quieren pueden matarte.
- Adal!. - Una voz media chillona inundó la habitación.
Mi hermano, Eric, había entrado y me abrazaba con mucha fuerza. Sonreí mucho y lo abrace más fuerte aún.
- Me estás matando...! - Grito el niño cuando sentía que se asfixiaba. Una vez que lo solté, sonrió. - Estás bien?. Papá te hizo algo?.
Negué con la cabeza, el niño de solo 10 años me miraba intrigado y curioso, me veía de arriba hacia abajo, sus pequeños ojos marrones examinaban cada parte de mi cuerpo. Me quedé mirándolo atentamente.
- No puedes hablar?. - Pregunto finalmente. Asentí.
El niño me miraba atónito y, en sus pequeños ojos, se veían lágrimas que iban a salir. Me sorprendí y entre en pánico, no sabía cómo debía calmarlo hasta que mire la libreta y empecé a escribir apresurada.
/No llores!./ Eric me miraba con algunas lágrimas cayendo de sus ojos.
- Adal... - Seco sus ojos con un pañuelo que saco de su campera. - Vas a recuperar tu voz?.
Asentí como respuesta. / Esto solo será temporal. Voy a poder a hablarte luego de recuperarme./
- Está bien. - Parecía algo inseguro. - Hay otra noticia que debo decirte!.
/ Es una buena o una mala?. / Me daba miedo saber otra cosa aparte de lo que había ocurrido.
- Puede ser ambas. - Respondió. - La primera es que... La tía me echo de su casa...
Me alarmé enormemente. / Por qué lo hizo?!. No tiene cerebro!?./ Sabía que pasaría pero no tan pronto. Mi tía, Carolina, no era la mejor cuidando niños, especialmente, si eran ajenos. A pesar de que le prometió a mi padre que iba a cuidar a Eric como suyo, parece que llegó a impacientarse. Y ahora que haremos?.
- Pero no te preocupes!. - Gritó. Se veía feliz. - Ya tenemos dónde vivir!.
/ Vino una asistente social?. / Tenía que preguntar, esa era nuestra mejor solución ahora pero Eric negó con su cabeza.
- Vino nuestro tío!. - Respondió con los brazos abiertos.
Tío... Nosotros no teníamos tío. Quién era esa persona?. / Eric... Quien es esa persona?. /
- De que hablas?. - Pregunto el niño. - Estoy hablando del tío Calíope!.
Un enorme dolor de cabeza me inundó, no sabía quién era ni siquiera recordaba que estuviera por ahí pero... / No recuerdo a ningún tío que se llame así. Nunca tuvimos un tío. / Debía decirle la verdad. Eric me miraba confundido y muy extrañado.
- El tío me dijo que era hermano de mamá. - Se veía muy seguro de eso. - También dijo que era la primera vez que sabía sobre nosotros.
/ Primera vez...?. / Eric asentía. Entonces era un tío que nosotros no sabíamos que existía y él tampoco sobre nosotros?. Me quedé pensando hasta que la puerta de mi habitación se abrió.
El doctor venía a revisarme pero otro hombre vino con él. Podía ver lo alto que era, también lo delgado que estaba, su pelo era blanco y llevaba un traje negro, el traje marcaba sus músculos, parecía muy ajustado. Un empresario?. Pero, lo que más llamaba la atención, eran sus ojos. Sus ojos rojos eran igual a los de mi madre, igual que los míos y tenían la misma forma que los ojos de Eric. Constrataban con su pálida piel, era como de fantasía.
El doctor me sonreía. - Parece que tienes visitas, Adal.
Asentí nerviosa...
......
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Song Of Butterflies...
DiversosAdal Ivanova, una joven muchacha de 17 años, vive con su padre en una pequeña casa mientras que su hermano menor, Eric Ivanova, se queda en lo de su tía. Ella sufre de los constantes abusos de su padre y, en su último esfuerzo en intentar ver la luz...