Capitulo 2.-La decisión

29 0 0
                                    

Julio camino hacia la puerta principal tomo la silla y la arrastro hasta colocarla en su lugar junto a la de Mauricio. Luego se sentó en ella cruzándose de brazos diciendo:

-Es algo fastidioso no lo crees tener que colocar la silla en su lugar y tener que ver a tu ex jefe muerto todos los días. !
Sabes el viejo no quería que vendieran la funeraria!...pero su esposa , ni sus hijos no se quisieron hacerse cargo de este lugar...

Al principio solo era la silla ahí junto a la puerta, después papeles regados sobre el escritorio pero ahora él está sentado hay observándome. Creí que me estaba volviendo loco! ...
Claro que cuando acompañaba a don Antonio a sus viajes de chófer pasaban cosas extrañas...pero es tu decisión. Entenderé si te niegas.
Le dije a Jorge lo que me ocurría y él no me creyó hasta que él también lo vio.

-¿Cómo que cosas extrañas?
¿Como que Jorge sabia? ..Mauricio estaba confundido.

-Si fue una noche, estábamos cerrando el local, la luz de la bodega donde guardamos los archivos y ataúdes se había quedado encendida ya le había dicho a Jorge que no se preocupe que la luces son automáticas, se encienden cuando estas cerca de ellas y que tal vez era el espíritu de mi exjefe estuviese hurgando por ahí..
¡Pero no me creyó! pensó que se trataba de alguna rata. Bajo a la bodega ahí lo vio, don Antonio sostenía varias hojas en su mano, con esa misma expresión monstruosa que acabar de ver o al menos es lo que Jorge me conto. Lo encerró en aquella habitación tuve que buscar las llaves para poderlo sacar. Estaba tan asustado, lo encontré acostado en el suelo en posición fetal...

-¿Hubieras visto a Jorge? -prometió no volver a pisar este lugar.
Mauricio entonces entendió porque Jorge no le había dado muchos detalles sobre el empleo.
Sabía que tal vez se negaría al tratarse de un lugar embrujado como este y de un trabajo tan espeluznante como una funeraria.

Como te explique, es tu decisión. Aunque Jorge me comento tus problemas, con este dinero podrás pagar todas tus deudas..

El sonido de la puerta principal distrajo, era una mujer de unos 25 años piel canela y muy simpática.

- Julio traje los papeles que faltan para retirar el cadaver...
La mujer abrió la puerta quedando abierta de par en par.

Mauricio quedo impresionado era Diana. La hermana de Jorge tan hermosa como siempre, llevaba el cabello suelto que le llegaba hasta la cintura, una blusa blanca con botones y un pantalón negro que dejaba ver la fina forma de su cuerpo. Mauricio quedo hipnotizado por un momento, su mente regreso al pasado aquel día de la fiesta cuando quiso invitarla a bailar pero Julio se le había adelantado. Talvez si la hubiera invitado primero, Julio no tendría aquel apodo del patas chuecas.

Diana continúo hablando esquivando la mirada de Mauricio como si solo Julio fuera el único en aquel lugar. Al percatarse de su rechazo Mauricio bajo la mirada. Diana avanzo hasta donde estaban los dos hombres.

- Ya está todo listo, he conseguido los permisos necesario para empezar con los preparativos funerarios. Has conseguido quien maneje esa carroza.

-Claro, estoy en eso mi amor... Contesto Julio acercandose a ella y besandola en las manos.

-Bueno Mauricio pregunto Julio qué opinas de mi propuesta, por cierto si te acuerdas de Diana ella es mi....

Aunque Mauricio trato de extender su mano hacia Diana penso que seria mejor irse rapidamente y sin dejar que Julio continuase hablando camino hacia la salida sin mirar atrás respondiendo

-Lo pensaré...

                                                                                   ***

En aquel parque se encontraba Mauricio sentado en una banqueta ya era de tarde. Su almuerzo consistía en un sanduche con café que suele vender en las calles a 0.50 ctvos. Volvió a marcar el número de Jorge pero este lo enviaba al buzón de voz nuevamente. En su mente planificaba las cosas que le diría a Jorge al no contarle todos los detalles del empleo.

Mientras daba otro mordisco a su sanduche, tres hombres se acercaron a él. El primero era un hombre alto y fornido, el segundo era mediano pero algo robusto y el tercero era un jovencito de 17 años de piel morena tenía una paleta en su boca.

-hola amigo te acuerdas de nosotros, exclamo el hombre mediano de alrededor de unos 40 años... Tienes mi dinero?

El hombre alto y fornido, tomo del cuello a Mauricio alzándolo con un solo brazo de la banqueta donde se encontraba, pregunto ¿tienes el dinero del jefe?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El hombre alto y fornido, tomo del cuello a Mauricio alzándolo con un solo brazo de la banqueta donde se encontraba, pregunto ¿tienes el dinero del jefe?

Mauricio asfixiado balbuceaba unas palabras poco entendibles, el fornido aflojo un poco su mano. Dejando ver una sonrisa cruel -suel...ta...me, suéltame maldi...to gori..la.

-Juan te ju..ro que t...te pa..gare...la voz de Mauricio era débil y entrecortada

-Mauricio que hago contigo necesito el dinero de las apuestas... bájalo Ramón ordeno aquel hombre mientras se sentaba en la banqueta...

-Si no fuera porque tu madre está en el hospital ingresada ya te hubiera matado, continúo el hombre, pero siempre he pensado que no es justo que una madre entierre a su hijo.

Mauricio con el rostro todo rojo volvió a sentarse en la banqueta, trataba de tomar grandes bocanadas de aire. El hombre robusto a quien llamaba Juan prosiguió diciendo:

- tienes hasta mañana para conseguirme ese dinero o perderé mi paciencia contigo.

- Lo entiendes

-si.. si respondio Mauricio temeroso

El chico mas joven entrego un celular a Juan. Este lo habia tomado mientras Mauricio habia estado alzado por su compañero.

-Veo que Félix encontró algo interesante, por el momento me llevare esto para cubrir los intereses.

-Yo soy un hombre piadoso. -No lo olvides tienes hasta mañana o estarás en problemas.

Mauricio sabia muy bien el peligro en el que se encontraba. Hace un año atras tenia un buen trabajo en una empresa muy reconocida, tenia un buen sueldo pero todo se desmorono cuando empezo a realizar pequeñas apuestas en linea gastandose todo su sueldo sin importar nada. Llegando solo a trabajar para cubrir las deudas de las deudas. Cuando su madre enfermo realizo varios prestamos de los cuales muy pocos invertio en la salud de su madre. Pues el vicio lo seguia llevando a apostar. Eso es lo que mas le remordio pues si no se hubiera gastado el dinero su madre no tuviera la enfermedad tan avanzada como ahora. Los medico le dijeron que podria llevar un tratamiento pero que no sabian que tan efectivo seria.

Mauricio paso toda la noche sin dormir, pensada que podía hacer tendría que ver a ese fantasma una vez más, el cuerpo se le erizaba.

También recordó aquel amor que dejo perder. Diana no sabía si estaba listo para verla de nuevo y arreglar aquello que quedo en el pasado. Su cabeza y su corazón era un revoltijo de ideas y sentimientos, también estaba el tratamiento de su mama en el hospital . Y el dinero que le debia a Juan. Eso último lo hizo recapacitar en su decisión.

Finalmente Mauricio tomo una decisión, en la mañana iría a trabajar en la funeraria...

El empleoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora