Mi matrimonio con un Alfa mudo

🌼 Capítulo 3

Los años pasaron y Xixi creció siendo un niño feliz y rodeado de ese amor que mendigo por muchos años de sus padres biológicos…

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Trece años después…

"¡¡¡¿Qué?!!!". 

 "Sí, Xi. Queremos que te cases", 

"¿Qué dices?". 

 "Pero, ¿por qué tan de repente?", 

"Ni siquiera me dijiste una palabra al respecto antes". 

 "¡Xi, sabes por qué!", 

"Vas a cumplir veintitrés años en un mes, y has sobrellevado tu celo durante varios años y siempre has reprimido tus deseos sexuales durante esos períodos". "Ya que odias la idea de que otros te toquen antes de descubrir que eres 'único', ¿por qué no te casas y sientas cabeza?" 

 "Mamá y papá, estoy bien con la forma en que están las cosas ahora", "Nunca pensé en querer encontrar una pareja", "No estoy interesado". 

 "Xi, no te estamos obligando. Si no quieres, entonces está bien. Pero tu respuesta parece que no te opones por completo".

 "¿Por qué no pensarlo dos veces?". 

 "Dame unos días para pensarlo". 

 "Tómate tu tiempo, Xiang". 

 "Mamá y yo tenemos una cena a la que asistir y tenemos que irnos ahora. Debes estar cansado. Descansa un poco y no te estreses".

"Ok, papá", 

"Llámame cuando lleguen allí". 

 "Sí. ¡Te amamos!" 

 "También te amo." Xiang fue a su habitación después de que sus padres se fueran. Sólo tenía la idea de su matrimonio. Rodó sobre la cama, izquierda, derecha, arriba y abajo. Luego, sin darse cuenta, toda su cara se puso roja y comenzó a sonrojarse. 

 Empezó a pensar en las veces que pasó por celo y conoció las dificultades de tener que soportar el dolor. Luego pensó en cómo sería la vida cuando tuviera una pareja: cuidarlo cuando está pasando por un celo, estar ahí el uno para el otro durante los momentos difíciles, tener citas, tener hijos. Estas cosas lo hacían bastante feliz, sabiendo que siempre habría una persona esperándolo en casa.

 "Todo lo que necesito es una persona que me ame y que siempre estará ahí para mí". "¿Pero es el momento adecuado para que me case?" dijo Xiang para sí mismo. Sin darse cuenta, se durmió. Con la luz de la mañana reflejando su rostro, sus padres estaban sentados mirándolo. Xiang pronto se despertó y jadeó: "¡Ahh! ¿Cuándo regresaron?"

Su madre, jugando con su cabello de cama, dijo: "Regresamos a casa a la medianoche. Solo vinimos a verte. ¿Dormiste bien?". 

 "Sí." 

 "Está bien, dúchate y baja a desayunar. ¡Estoy preparando tu desayuno favorito!" Cuando su madre se levantó de la cama para salir de la habitación, Xiang, sin pensar por un momento, tomó a su madre de la mano y dijo: "Lo he decidido". 

 "¿Qué decidiste  Xiang?" preguntó su padre. 

 "Sobre el matrimonio. Estoy hablando del matrimonio". 

 "¿En verdad?" dijo su madre. 

 "¿Cuál es tu decisión, Xiang?", Preguntó su padre con curiosidad...