-hyungs, gracias por traerme aquí, no los defraudaré...
‡‡‡‡
Ahora mismo se encontraba caminando de la mano de su mayor, estaba muy nervioso y Félix lo notaba.
-Tranquilo, la primera clase la tienes conmigo, la segunda es con un amigo mío y por todos estos niños no te preocupes se van por las apariencias y tú serás amado aquí.- revolvió de nuevo el cabello ajeno.
-oye, oye.- el par de chicas anteriores llegaron de nuevo hablándole a Yoongi pero el solo se ocultó en el antebrazo de su mayor. -oow eres muy tierno.
-g-gracias.- salió de su escondite apenado.
-soy Kim Dahyun- saludo una linda chica de cabello claro.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-yo soy Yoo Jeongyeon.- saludo la adorable chica rubia.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Yoon las miro y luego sonrió mostrando sus encías, cosa que dejó muy feliz a Félix.
-s-soy Min Yoongi.
-oye Gigi, espero que no te moleste pero, ¿Tienes miedo?- pregunto Dahyun, eso avergonzó a Yoonie por lo cual bajo la mirada. -no te preocupes, todos le tenemos miedo al primer día.
-chicas, Yoongi a tenido una vida peculiar y es por eso que se nota tan asustado me gustaría que lo ayudarán a sentirse seguro.
-¡No se preocupe profesor Lee!- alegaron al mismo tiempo cosa que les provocó mucha gracia.
-vallamos al salón.
Caminaron todos juntos a su aula pues tal parece que la compartirían, entraron y Yoon no sabía qué hacer así que Yeon le indico lo que debía hacer y él se lo agradeció mucho. La clase empezó el profesor hizo preguntas y Yoon se sentía como pez en agua al saber la respuesta de todas incluso sus nuevas amigas lo felicitaron por ser tan inteligente.
La segunda clase también pasó y los demás alumnos comenzaban a mirarlo con rareza cada que una clase iniciaba y Félix iba para hablar con el profesor que entrase.
Dahyun y Jeongyeon notaron la incomodidad de Yoongi así que fue el turno de Dahyun para mover su butaca y sentarse a un lado del blanquecino para tomarle la mano y así se iban turnando una en cada clase.
La última antes de salir al almuerzo era un poco complicada pero Yoongi ayudaba en lo que podía a sus amigas y ellas a él.
-chico blanquito, ya que terminaste tu trabajo hazme el favor de llevar unos documentos al aula K de último grado.- pidió el profesor de química a lo cual Yoon se levantó mirando por última vez a sus amigas buscando que lo salvarán pero ellas le animaron con una sonrisa.
-ve tranquilo- le susurró Jeongyeon.
Yoongi avanzó al escritorio y enseguida le entregaron un par de papeles.
-solo debes dejarlos dile que se los manada el profesor Choi y listo, Félix me platicó sobre tu caso, eres el único que ha terminado pero si no te sientes listo puedes sentarte yo los entrego después- Yoon no quería sentirse como un inútil ni quería que todos lo vieran como uno, las miradas de sus compañeros solo lo jugaban y él no quería eso.
-no se preocupe profesor Choi, yo lo hago.- tomo los papeles y salió del aula para dirigirse al edificio del fondo donde estudiaban los de último año.
Subió por la única escalera de acceso al edificio y fue mirando la letra grabada en la puerta hasta dar con la letra K, llamo a la puerta y enseguida un chico que lo miro de pies a cabeza le abrió dejando ver al profesor.
Hubo varios chiflidos y apodos que no hicieron más que asustarlo.
-él profesor Choi me mandó a dejarle estos papeles- entro después de que el profesor se lo autorizará.
-te lo agradezco hijo.- Yoongi reverencio para disponerse a salir sin mirar al alumnado.
-no lo puedo creer la joya de Park está aquí.- escucho del fondo del salón, algo dentro suyo se paralizó mientras buscaba a quien lo había dicho y cuando su mirada enfoco a ese chico que tanto daño le hizo no pudo hacer más que quedarse inmóvil.
La chicharra sonó avisando el recreo y cuando eso pasó algo dentro de Yoongi se alertó corriendo fuera del salón pero el chico no se quedó atrás y también lo siguió.
Los jóvenes empezaban a salir de las aulas y las escaleras que eran su única opción para salir del edificio estaban a tope de jóvenes mucho más altos que él asi que corrió de largo en el pasillo esperando encontrar alguna salida pero llegó al final del barandal, sus ojitos no dejaban de llorar por los recuerdos estaba frente a lo que parecía ser el lugar donde guardaban los utensilios de limpieza, era demasiado alto para saltar y tenía miedo de entrar a ese lugar, miro por el pasillo y su miedo no pudo ser menos cuando ese chico lo miraba mientras se acercaba a él.
Se subió al barandal estaba dispuesto a morir antes de estar cerca de ese hijo de papi.
-¿Qué haces Yoon?, ¿Quieres que te dé de mi comida otra vez?- le pregunto con burla a lo que el menor solo negó frenéticamente. -miren chicos él es la joya, la perra con la que nos íbamos a divertir en tu cumpleaños Chan.
Yoongi no quería saltar pero lo prefería, intento hacerlo pero no pudo y sin pensarlo ya se encontraba en el suelo, ese chico lo había jalado y ahora estaba en el pasillo atrapado con ellos.
-Ven, te enseñaré la conserjería- lo tomo del cabello arrastrándolo adentro. -mis amigos no me creen lo que eres capas de hacer, ¿Porqué no se los muestras?.
-d-dejeme ir...
Recibió una cachetada que lo hizo entrar en pánico sin duda.
-n-no me golpe, p-por favor, s-sere bueno.- lloró sabiendo que todo se había ido al carajo en cuanto la luz fue prendida y ese chico desabrochó sus pantalones.
No sabía que prefería, ser golpeado o abusado definitivamente ninguna pero si tenía que elegir sería la primera opción.
-e-espere, espere por favor n-no...
-arruinaste nuestra fiesta y ahora lo pagarás pequeño.
-p-por favor n-no, yo no quise, castigueme con este- señaló el cinturón de cuero que portaba uno de ellos.
-quitatelo Baek- el nombrado hizo caso y ahora mismo Yoon anhelaba que alguien lo salvará.
-¡Gigi!.
-¡Yoongi, ¿Dónde estás?!- eran esas chicas.
-hoy te salvaste joya, pero mañana te quiero aquí en la salida o de lo contrario iré por ti hasta tu casa y te llevaré con Park.
El menor asintió y después salió corriendo del salón de limpieza, sus amigas estaban ahí, ellas lo abrazaron cuando vieron sus ojos llorosos.
-tranquilo Yoon, perdona por dejarte solo, vamos el profesor Lee te está buscando- le dijo Dahyun.
Sin duda ellas eran personas que valía la pena cuidar y querer.
