¿Te casarías conmigo desconocido?

Extra del día de San Valentín

⚠️Advertencia ⚠️: En este capítulo hay escenas sexualmente detalladas

El día de San Valentín por fin había llegado, podías ver por las calles a muchas parejas actuando melosas, agarrados de la mano y diciéndose palabras de amor el uno al otro, todos irradiaban felicidad, bueno, casi todos.

—¡No sé qué regalarle a Lan Zhan! —gritaba Wei Ying aferrándose a su hermano en el centro comercial

—Lo que sea que le regales a ese Yeti le gustará incluso si solo te pones un moño rojo en la cabeza de seguro estaría feliz por meses—respondió Jiang Cheng poniendo en su carrito de compras un frasco de Nutella

—Lo sé pero quiero regalarle algo especial—exclamó Wei Ying dramáticamente

—Mm—respondió el ojivioleta ignorando a su hermano olímpicamente

—¡Jiang Cheng! —gritó el doncel al ver como su hermano no le hacía caso

—No sé por qué te estresas tanto solo regálale algo y ya no me sigas molestando porque estoy viendo la fecha de vencimiento de los productos—dijo Jiang Cheng viendo como el ojigris hacía un puchero

—Ahora que lo pienso, ¿Qué planeas regalarle a Xichen? —preguntó elevando una ceja expresando su curiosidad

—El divorcio—respondió el ojivioleta arrugando una lata de leche condensada

—¡¿Qué?!—dijo un atónito Wei Ying sintiendo como se le bajaba la presión

—Bromeo—decía Jiang Cheng soltando una leve sonrisa

—No juegues con eso, casi me da un infarto A-Cheng—decía el doncel mientras se agarraba el pecho y hacía un puchero

—Bueno ¿Quieres saber que le voy a regalar? Pues le haré una cena y luego veré algunas películas con él—respondió el ojivioleta mientras fruncia un poco el ceño al recordar que película tendría que ver por onceava vez ya que su esposo estaba obsesionado con un anime sobre cazadores de demonios

–¡Vaya! A-Cheng a veces puedes ser romántico, por poco y no te reconozco—el doncel decía en tono algo burlesco

—Cállate, ahora vamos a la caja para pagar—respondió un sonrojado Jiang Cheng moviendo su carrito de compras

Mientras tanto en otro lugar del mismo centro comercial se encontraban dos hermanos en el área de mascotas.

—¿A-Zhan, Tú crees que este gorrito le quede a Richi? —preguntaba Lan Xichen mientras agarraba un gorrito para hámsters

—Mm—respondió Lan Zhan mientras veía fijamente a dos conejos

—¿Disculpe joven, Usted desea adoptar a esos dos conejos? —preguntó la asistente de la tienda

—Mm—asintió el ojidorado

—Si usted quiere a una parejita no creo que se pueda porque ambos conejos son machos y por eso los han intentado llevar por separado, pero siempre los regresan porque causan desastres—decía la joven algo apenada al recordar como algunas personas que habían adoptado a los conejos por separado regresaban con muchas mordeduras y obviamente los devolvían

—Los llevaré juntos—dijo Lan Zhan con una mirada seria que podría llegar a ser escalofriante a cierto punto

—E-está bien joven por favor pase por aquí, tenemos que hacerle algunas pruebas para que pueda adoptar a los conejos—pronunció la joven casi temblando llevando a Lan Zhan a una oficina

—Creo que este le quedará mejor a Richi ¿Tu qué opinas Lan Zhan? —dijo Xichen girándose y viendo que su hermano no estaba a su costado

—¿Lan Zhan? ¿Dónde estás hermano? Oh no, lo perdí ¡A-Xian me va a matar, aunque sería una buena muerte si es manos de Xian Xian pero no puedo dejar viudo a A-Cheng! —decía mientras comenzaba a dar vueltas por el área de mascotas