La vida para algunas personas es fácil cuando se trata de salud, algunas personas son tan afortunadas de haber nacido sanos sin ningún problema de salud, pero desgraciadamente para otras personas no lo era. Desde el nacimiento llegan a padecer de problemas de salud y eso hace que tengan una vida más difícil, llegando a tal punto que se prohíban muchas cosas por su bien, aparte de que tienen una carga muy grande y no puedan disfrutar su vida al 100%, para algunas personas eso no es un impedimento y eso quiere decir que para Clay no lo es.
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Clay o mejoro conocido como Dream, es un chico de 19 años con una gran personalidad, es el chico alegre y cariñoso que cualquier persona le gustaría tener cerca. Desgraciadamente el tenía una enfermedad, su enfermedad consistía en un problema en el corazón, conocida como Braquicardia. (La Bradicardia es una enfermedad del corazón que hace que tu ritmo cardíaco sea más lento de lo normal, normalmente inferior a 60 latidos por minuto. Puede llegar a ser un problema grave si la frecuencia cardíaca es muy lenta y el corazón no puede bombear suficiente sangre rica en oxígeno al cuerpo. Si esto llega a suceder, puedes sentir mareos, también puedes estar cansado o débil y con falta de aliento). Desgraciadamente Dream no corrió con la suerte de nacer con una condición de salud estable y desde entonces a estado luchando con esa enfermedad, pero eso no lo hace diferente a las demás personas, al contrario, el a tratado de llevar una vida normal y tranquila.
—Cariño, ¿puedo pasar?— Preguntaba la madre de Dream, pues al enterarse que su hijo tuvo que volver a ser internado no dudo en ir a verlo en el hospital, y ahora mismo estaba parada frente a la puerta de la habitación en la cuál se encontraba su hijo. —Adelante— respondió Dream sin ganas, su voz se le notaba apagada y eso su mamá no lo paso por alto. Cuando su madre entro lo primero que vió fue a Dream sentando cerca de la ventana viendo a las demás personas que se encontraban en el jardín del hospital.
—¿Qué a pasado?— preguntó su madre un poco preocupada.
—Lo de siempre mamá, ya no es novedad que me den mareos por mi estúpida enfermedad—
—Oh mi pequeño niño— su mamá se acercó para poder sentarse en la cama y poder darle un reconfortante abrazo, a ella no le gustaba ver a su hijo de esta manera.
Dream no soporto más y le devolvió el abrazo. Con la voz un poco rota le contestó; —Estoy hartó de no poder ni siquiera salir o hacer algo porque esta estúpida enfermedad me persigue y no me deja tranquilo, estoy tan cansado de no poder tener una vida normal como las demás personas. Es la tercera vez en la semana que me internan— Su madre lo abrazo con más fuerza, ella le quería decir que no estaba solo a pesar de llevar una vida difícil.
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Ya había pasado un pequeño tiempo desde que su mamá se había marchado, no sin antes darle un cálido beso en su frente y decirle que cualquier cosa le llamara. Y otra vez ahí estaba Dream mirando el techo y pensando en por que no puede tener una vida normal como las demás personas, se supone que se prometió a si mismo que su enfermedad no sería un impedimento para no tener una vida tranquila y felíz, pero cada vez eso se iba haciendo más difícil.
Sus pensamientos fueron interrumpidos por unos golpes en la puerta y después una suave voz de una mujer. —Es hora de tus medicamentos, Dream— no tuvo otra opción que pararse para abrir la puerta y recibir sus medicamento, pues sabía que si no los tomaba le informarían a sus padres y eso sería empeorar la situación y dejarlo más tiempo internado. La enfermera que ya tantas veces había visto y conocía muy bien, tuvo que supervisa que los tomara correctamente. Una vez hecho eso, ella se marchó. Al poco tiempo que el volvió a su lugar otros suaves golpes se escucharon, el un poco hartó grito que no tomaría más medicamento y que se marchara, pero vaya sorpresa se llevó al escuchar una voz muy conocida. —Imbécil, soy yo, Technoblade. Abre la puerta o juro que la voy a tirar— Dream no pudo evitar reír al escuchar a Techno del otro lado de la puerta. Se levantó para abrir la puerta y ver qué Technoblade traía un pequeño ramo de flores ya maltratadas y sus dulces favoritos. Dream se echó a reír cuando vió el ramo de flores ya maltratadas. —Hey! no te burles— dijo Techno un poco avergonzado. —Bueno, al menos me trajiste mis dulces favoritos— hablo Dream haciéndose a un lado para que Techno puediera pasar a la habitación, ya una vez a dentro de la habitación empezaron a conversar de cosas alazar hasta que se acabó la hora de visita y Techno se tuvo que marchar, pero antes de que se marchara Dream le pidió más dulces.
—Technoooooo, me puedes traer mañana más dulces, por favor—
—Mmm.... déjame pesandarlo... No, no te voy a traer más, pídeme otra cosa que dulces ya te traje y te puede hacer mal— Techno sabía que si Dream comía mucho azúcar le podía hacer mal y era muy rara vez que le regalaba dulces o cosas con mucho azúcar.
—Bueno, tráeme una hamburguesa de Mc Donal's— Dream era como un niño pequeño con Techno, pues al ser su mejor amigo y la persona más cercana a él, hacía que tuviera ese tipo de comportamiento con el.
—Entonces eso será. Bueno, tengo que ir Dream, que Wilbur y Tommy no tardarán en pasar a recogerme— Si, Techno tiene 2 hermanos que son Wilbur y Tommy. Tommy es el hermano menor, Wilbur el hermano de en medio y Techno el mayor.
—Mañana nos vemos Techno, saludame a Will y Tommy por mi—
—Descansa Dream— le dijo Techno ya marchandose.
Después de la visita de Techno quiso salir a dar un pequeño paseo por el hospital para no sentirse solo, una vez que salió de su habitación varías personas del hospital le saludaron, pues al ser ya muy recurrente sus visitas al hospital ya mucha gente lo conocía. Después de una larga vuelta por el hospital volvió a su habitación para poder dormir. Al fijarse en su celular y ver la hora vió que ya era un poco tarde y las enfermeras lo regañarían si lo veían fuera de su habitación a muy altas horas de la noche, así que lo mejor fue irse a su habitación para poder descansar.

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Te ame hasta mi último latido. (Dreamnotfound)
FanfictionSe supone que teníamos que estar juntos para siempre. Entonces... ¿Por qué tu corazón dejo de latir?. Créditos a la/el autor/a de la portada.