Capítulo 1: Llegada

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Muchas gracias a Maldevinine y Will S. LaVi por sus servicios de lectura beta. Todos los errores son culpa mía y no de ellos.

Capítulo 1: Llegada

Smallville, Kansas estaba a más de cuatrocientas millas de Pickettstown, Colorado. Clark corrió esa distancia en unos minutos. Una vez que llegó a las afueras del pueblo, sacó su teléfono y llamó a su mejor amigo.

"Estoy aquí", dijo. "Esta calmado."

"¿Incluso a tus oídos?" preguntó Chloe al otro lado de la línea.

"Si." Incluso en un pueblo pequeño como este, normalmente debería poder escuchar autos tocando la bocina o personas hablando. Era silencioso, aunque no como antes de que se desarrollara el increíble oído de Clark. Todavía había sonidos como el viento, agua corriente o animales salvajes, pero no personas.

"¿Ves alguna pista?" Ella preguntó, y él comenzó a caminar para investigar.

"Comprobándolos ahora". Escaneó los edificios con visión de rayos X y fue recibido por la vista que más temía. Cada casa estaba llena de cadáveres, de días de antigüedad como máximo. La mayoría de ellos tenían agujeros en sus cuerpos, las heridas en forma de algo les había estallado.

Clark cerró los ojos al ver el cadáver de un niño, demasiado destrozado para distinguir cualquier rasgo. Lo que más destacaba era que carecía de orificio de salida como los demás. En cambio, a su lado estaba el cuerpo de una mujer muerta. Tenía un gran desgarro en el abdomen.

La imaginación de Clark llenó los espacios en blanco. El fantasma debe haber poseído a la mujer y haber matado a su hijo. ¿Por qué? ¿Placer enfermizo? ¿Instinto?

¿Importó siquiera? Este fantasma había sido encerrado en la Zona Fantasma por una razón. Solo los peores criminales en la historia de Krypton habían sido encarcelados allí, e incluso después de convertirse en un fantasma prácticamente sin forma, este había matado a decenas de personas.

Deben haber estado asustados y confundidos. Nadie podría haber esperado que un extraterrestre los poseyera y se enfureciera. Ni siquiera Clark.

"Oye... ¿estás bien?" La pregunta de Chloe sacó a Clark de sus pensamientos morbosos.

"Es malo", respondió. "Tanta gente... si no hubiera-

"Basta, Clark". Ella tomó un tono autoritario. "Esto no es tu culpa. Culpa a Zod o Brainiac. No a ti mismo".

"Correcto. Correcto", respondió él, aunque no podía reunir la confianza que ella tenía en él. La única razón por la que los fantasmas habían encontrado el camino a la Tierra era porque lo habían seguido durante su propio escape de la Zona. Si hubiera tenido cuidado, si no hubiera caído en la trampa de Brainiac, estas personas aún estarían vivas.

No. Basta. Ahora mismo, tenía que concentrarse. Clark se armó de valor y registró la ciudad con su aguda visión. No era probable que el fantasma se quedara aquí por mucho tiempo antes de mudarse a otra ciudad, pero aún existía la posibilidad de que todavía estuviera presente.

En el lado opuesto de la ciudad, una figura oscura flotaba arriba.

"¡Ya lo veo! Te llamaré más tarde". Colgó y aceleró silenciosamente entre los edificios para acercarse mientras se mantenía fuera de la vista. La criatura se parecía exactamente a los fantasmas que Clark había encontrado en la Zona, una forma sombría que tenía cabeza y brazos, pero no piernas. Solo una masa indistinta debajo, como una cortina negra hecha de niebla.

El gran defensorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora