La Farsa

42 5 0
                                    

Me encuentro en medio de esta farsa que yo mismo cree, estoy sentado en mi trono esperando las supuestas candidatas a ser mi futura esposa, Dominik esta a mi lado dando me su apoyo aunque eso no me ayuda mucho, quiero salir corriendo, quiero huir de todo esto pero ya estoy grande para poder afrontar mis propios problemas

-Mi rey aquí están las señoritas más bellas de todo el reino- me dice un guardia mientras inclina la cabeza en señal de respeto

Una a una se acercan las señoritas tomando posiciones en una fila horizontal para poder verlas a todas poco después se arrodillan ante mi como señal de respeto, son bonitas lo acepto estaría ciego si no, llenas de vestidos lujosos y costosos incrustados de gemas y diamantes, pero nada comparado con la sencillez y calidez de una linda chica con hermosos ojos miel, toda ella muestra la belleza de un ángel, algo tan puro y delicado que ninguna de todas estas jóvenes puede siquiera imitar

Ellas se van presentando y comienzan a hablar sobre porque perecen el trono y porque quieren ser mi esposa, no le tomo importancia me valen sus nombres, estoy fastidiado de todo esto, creo que me va tocar elegir a lazar, estoy con una mano en la barbilla mirando al suelo pensando como debo de tomar la que sin importar cual sea es la peor decisión de mi vida estoy tan asordo en mis pensamientos que solo salgo cuando un guardia habla

-Arrodíllate ante el rey tu rey- odio esos apelativos

-Nunca me he arrodillado ante nadie y no voy a empezar ahora- una suave pero firme voz me hace levantar el rostro, esa voz que no e podido olvidar que recuerdo en sueños, pero me encuentro con una joven, llena de agua y algo blanco parece harina pero casi no se nota, su vestido blanco manchado de sangre, sus brazos descubiertos cubiertos de heridas y moretones, sus piernas que se flexionan y tratan de estabilizarse están manchadas con sangre y colores gracias a los golpes, su rostro tan maltratado que es casi irreconocible hace que me levante y camine despacio sin poder creer que una joven pueda estar en estas condiciones, debería estar doblada por el dolor, pero esta parada lo más firme que puede su cuerpo.

Se escuchan murmuro de las locas estas digo candidatas, pero no les presto atención.

Tiene el labio partido en la comisura superior e inferior, dos marcas de plasmas en su rostro y un moretón en medio de una de esta, su cabeza esta botando sangre y parece que le faltan hebras en el cabello, sus ojos uno esta tan hinchado que no lo puede ni abrir y solo eso me destruye, el otro no esta tan hinchado pero lucha con mantenerlo abierto, cuando estoy al frente de ella separada por menos de un metro de distancia, le agarro suavemente el mentón con miedo a romperla y le levanto el rostro, es en ese momento que puedo ver el color de su ojo medio hinchado bien, ese color que me derrite, su dulce color miel.

-Leo- dice en un suave susurro

El Corazón Del ReyWhere stories live. Discover now