Capítulo 28: Transformación. Batalla final - Parte 2

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James observó con una sonrisa de satisfacción el trabajo realizado por Allen, el brillo de aprobación en sus ojos era innegable. Sin embargo, en el otro extremo, Liam se sentía como si el suelo bajo sus pies se desmoronara. La traición de Allen le golpeó con una fuerza que no esperaba, haciendo que su confianza en él se desvaneciera como el humo de una fogata apagada.

La tensión era palpable, extendiéndose como una manta pesada sobre el resto de la manada. Nathaniel, con su habitual calma, no podía evitar mostrar su sorpresa ante la escena que se desarrollaba frente a ellos. Allen, con una frialdad que helaba la sangre, sostenía a Matthew por el cuello con una fuerza cruel, elevando su cuerpo del suelo con una sola mano. Los músculos tensos de Allen parecían tallados en mármol, mientras sus ojos oscuros observaban a Nathaniel de reojo antes de encontrarse con la mirada furiosa de Liam.

Mientras tanto, Matthew permanecía inmóvil, con las manos aferradas a la muñeca de Allen como si su vida dependiera de ello. Rachel, en un intento por comprender lo que estaba sucediendo, rompió el tenso silencio con una pregunta cargada de incredulidad.

—¿Por qué estás haciendo esto? —inquirió, su voz temblorosa reflejando la confusión y la preocupación que sentía por sus amigos—. Somos tus amigos —Allen se volvió hacia ella, su expresión impasible, como si estuviera completamente desconectado de cualquier emoción humana.

—Ustedes no son mis amigos —respondió con frialdad, su voz resonando en el aire tenso—. Joe está muerto, gracias a ese Cazador, y ustedes lo salvaron de su muerte —las palabras de Allen resonaron en el aire, pero había una desconexión entre sus palabras y su expresión, como si estuviera interpretando un papel en lugar de expresar sus verdaderos sentimientos.

Aunque su rostro mostraba una calma superficial, Liam podía sentir el hervor de la hostilidad y el resentimiento que bullía bajo la superficie, dirigido hacia una sola persona.

—Fredd, ayuda a Allen con ese mortal —ordenó James, su voz resonando con autoridad en el aire cargado de tensión—. También tú, John —agregó, señalando hacia el objetivo de la tarea y ambos tipos avanzaron hacia Allen, listos para cumplir con la orden dada por su líder.

Pero antes de que pudieran actuar, un grito desgarrador resonó en el aire, interrumpiendo el flujo tenso de la escena. Liam, consumido por la desesperación, se lanzó hacia Allen con un impulso irrefrenable. La reacción de Allen fue rápida y brutal; lanzó a Matthew por los aires, arrojándolo a los pies de Fredd, antes de centrarse en torturar a Liam.

Fredd y John, obedientes a las órdenes de James, levantaron a Matthew entre los dos, su cuerpo más pequeño en comparación con los suyos, pero su fuerza combinada era suficiente para elevarlo sin esfuerzo.

Liam experimentó una agonía que nunca había conocido antes, como si cada célula de su cuerpo estuviera siendo atacada por un voltaje invisible. El dolor ilusorio creado por Allen envolvía su ser, haciéndolo comprender el sufrimiento que había infligido a sus víctimas en el pasado.

Mientras luchaba por mantenerse consciente, Liam sintió cómo su cuerpo se retorcía en la agonía, una corriente eléctrica parecía atravesar su sistema nervioso, dejándolo sin aliento y al borde del colapso. El objetivo de Allen era claro: hacer que Liam cayera inconsciente para que alguien más se encargara de él. Pero antes de que la situación pudiera escalar aún más, Matthew, incapaz de soportar ver a Liam sufrir, lanzó un grito desesperado.

—¡DETENTE...! —exclamó, su voz llena de angustia y súplica. James, con su autoridad indiscutible, intervino de inmediato.

—Detente, Allen —ordenó, mientras Liam caía al suelo, jadeando por aire con dificultad.

Luna Llena (Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora