DANMACHI - "UN CAMINO DIFERENTE"

CAPITULO 18 "UNA CITA Y LA EXPANSION DEL GRUPO"

Bell junto con la Aiko se encontraban caminando por las calles de Orario en dirección a la iglesia abandonada donde Hestia estaba preocupada por la ausencia de su única dependiente, pasando por un lugar algo llamo la atención del chico, después de algunos segundos de indecisión se detuvo confundiendo a la pelimorada.

Bell: espérame aquí.

girándose Bell regreso por donde venían entrando en una tienda, se quedo algunos segundos mirando las estrellas recordó la sensación en sus labios cuando se beso con el semi-albino, uniendo sus manos detrás sonrió con un ligero tinte rojo en sus mejillas, ella quería repetirlo pero tenia que esperar un poco.

esperando algunos minutos el chico no regreso, caminando un poco encontró la razón de que Bell no regresara con ella, con la espalda en la pared rodeado por 6 amazonas a las cuales no les importaba invadir su espacio personal acercándose demasiado a el algunas apegando sus atributos a el.

-vamos ven con nosotras-

-si no hay nada mejor que una pelea nocturna-

Bell:*nervioso*no puedo tengo que acompañar a alguien.

-¿tienes que ir con la chica pelirroja?-

-¿o es con la pelinegra?-

Bell: y-yo-

-sabemos que quieres tener un harem, ¿Qué te impide venir con nosotras?-

Aiko: el esta conmigo ahora.

Bell: ¿!Aiko¡?.

la mirada completamente carente de emociones hiso retroceder un poco a las amazonas, esos orbes vaciaos intimidaban bastante y no ayudaba el color gris de sus ojos, Aiko lo tomo del brazo comenzando a caminar se llevo a Bell girando en un callejón, las mujeres despertaron su lado competitivo siguiendo a la pareja se adentraron en el mismo sin embargo no encontraron a nadie.

en el techo de una casa el semi-albino junto con la pelimorada miraban el callejón donde antes se encontraban, las amazonas siguieron buscando adentrandoce mas, los ojos de Aiko recobraron su brillo, mirando al chico cruzo sus brazos.

Aiko: sabes que pudiste salir de ahí por tu cuenta ¿verdad?.

Bell: perdón.

Aiko: ¿por que regresaste?.

Bell: por esto.

levantando su mano derecha se aprecio una pequeña bolsa, abriéndola el chico seco un broche para el cabello con forma de conejo blanco de ojos rojos.

Bell: es para ti, me comparan constantemente con un conejo así que pensé que seria una buena forma de que yo también te acompañara en esencia, acéptalo por favor.

Aiko:¿podrías ponérmelo?.

Bell: claro.

girando un poco su cabeza al lado izquierdo la pelimorada espero a que el chico le colocara el adorno, Bell llevo el broche a su cabello del lado derecho dejando mas a la vista su ojo derecho en contraste con su ojo izquierdo algo cubierto por su cabello, alejándose un poco el semi-albino pareció sonreír.

Bell: te ves linda.

sin perder su expresión algo seria un casi imperceptible rubor apareció en su rostro.

Aiko: ehhh~ ahora me dirás cosas cursis cada que me veas.

Bell:*nervioso* !no¡ es decir eh-

Aiko: fufu~ era broma ahora vamos.

de un salto la pelimorada llego al suelo siendo seguida por Bell. Caminando por algunos minutos llegaron a la iglesia abandonada adentrandoce bajaron al sótano, el chico se preparo para darle la noticia a la pequeña diosa, cuando se lo conto a Aiko le gano la emoción que sintió en el momento.