Mis Lágrimas En La Lluvia

Mis lagrimas en la lluvia

Te extraño, trato de no pensar pero de igual manera te sigo extrañando, ese día me preguntaste si daría la vida por vos riéndote, yo de broma dije que no, pero en este momento desearía que me hicieras esa pregunta de vuelta porque ya no se que hacer sin vos, trato de buscar una salida, buscar algo que me haga feliz o simplemente que deje de pensar en ti por un minuto pero no puedo, todos los recuerdos felices que tengo guardados en mi corazón son contigo y me empiezo a preguntar como podría seguir viviendo esta vida si la única razón que tenia era vivirla junto a vos.

—Deberíamos llevar a reparar la televisión—frunce el ceño, dándole golpes suaves para que funcionara.

—Esta tarde lo llevaré a arreglar, estará listo dentro de tres días pero ya sabes siempre se terminan atrasando —dejo salir un suspiro.

— ¿Cómo estuvo tu trabajo?

—Nada mal, se comportaron y tuvieron una buena conducta hacía mí, siempre vuelvo con dolor de cabeza pero hoy no hubo tanto revuelto y hicieron las actividades, también hablamos y compartimos pensamientos.

—Si tú estas feliz con eso yo también lo estaré.

De camino a casa veo aquellas calles en que me llega recuerdos, de cuando en la salida del colegio, éramos un poco más jóvenes y estábamos corriendo debajo de la lluvia y sonriendo mientra nos mirábamos, escuchando bocinazos de autos detrás nuestro pero nosotros sin darle importancia seguíamos observandonos, esos ojos que transmitían una calidez provocando que se parara el mundo por unos segundos cada vez que te miraba, aquellas calles ya no se sentia de la misma manera, los recuerdos que me traían ya no eran felices, solo podía pensar en que ahora está es la razón por la cual ya no estás.

—Ya sé ¿Qué piensas sobre Danna?

—Es un nombre adorable aunque me gusta más Mora— expresó dejando ver una sonrisa mediana.

—Tendríamos que buscar nombres para niños también.

—Pensé en el nombre Leo.

—No lo sé, Leo es un nombre corto y simple.

—Pero es parecido a como te llamas y tú nombre también es corto.

—Es verdad.

(empezamos a reir)

Tengo miedo de olvidar tu voz, una parte de mi vida desapareció para siempre y se que jamás volverá porque quedo dentro de ti, cuando cierro los ojos me siento segura porque te puedo ver, pero cuando los abro se que me voy a tener que enfrentar a algo que todavía no estoy lista pero lo voy a tener que hacer por nosotras.

Estaré bien si solo pudiera escucharte, me pregunto ¿Que pasaría si tuviera un día más para despedirme de tí? Siento que las noches se hacen largas y que los días son muy silenciosos, recuerdo que a la hora de dormir nos peleábamos por quien iría a apagar la luz, siempre lo terminabas haciéndolo tú y en este momento ya no puedo dormir porque sigo esperando en que apagues las luces, esta habitación ya no es la misma con estas cuatros paredes y yo, tu almohada está mojada por todas las lágrimas que he llorado, cuando me recuesto en la cama veo tu lado y lo siento tan vacío.

—Se que es duro, pero vamos a tener que seguir adelante, seguro ya va a llegar nuestra oportunidad a lo mejor no era el momento.

—Es que, realmente quería formar una familia—mientras dejo caer algunas lagrimas.

—Solo esperemos, yo también estoy mal pero se que juntos lo vamos a poder lograr —acaricia el pelo de Elena y se acerca para abrazarla.

A veces creó que la vida es muy injusta, porque te tuvo que pasar a vos, teníamos tantos planes que queríamos cumplir, pero ahora todo se me vino abajo y ya no se que hacer si no te tengo a mi lado, siento que me voy apagando poco a poco.
Voy a tratar de encontrar un nuevo camino para poder poner en marcha todos nuestros sueños, y en cada momento le voy a recordar lo especial que eras.

—Se me hace tarde— camina mientras agarra las llaves del auto

—Pronto va a llover, ¿Quieres un paraguas?

—No hace falta

—Cuando estés resfriado no quiero escuchar que te quejas— hablo mostrándole el paraguas en la mano

—Esta bien, dame el paraguas, ahora si me tengo que ir, chau te amo—va rápido y se sube al auto y desde allí él la saluda con la mano dejando ver su sonrisa

—Chau, yo también te amo— con su mano en la boca le manda un beso a Elena despidiéndose

¿Y ahora qué hago? Nunca más voy a poder escuchar tu risa, tus enojos ni tampoco sentirte cerca, esa fue la última vez que te vi, creo que tu pérdida fue el momento más difícil que tuve que enfrentar en mi vida.
Se que debo salir de aquí, pero tengo miedo, no quiero vivir una vida sin vos.
Me despierto todas las noches con lágrimas creyendo de que estás a mi lado pensando que solo fue una pesadilla pero no estás, me gustaría poder ver por última vez tu rostro, no se si voy a poder resistir pero se que lo debo hacer por ella, era nuestro sueño, pensé que íbamos estar los dos cuando llegara este momento pero todo dio un giro inesperado, voy hacer todo lo que pueda para que podamos recordarte sin tristeza y tener una vida con felicidad aunque siempre va quedar un hueco en nuestros corazones sin rellenar, eras la luz que me hacía iluminar y ya no te tengo,
me haces tanta falta pero se que si vos estuvieras en mi lugar nunca te hubieras rendido, por más que me duela, se que te debo decir adiós, aunque para Danna y para mí siempre estarás en nuestro corazón.

Fin.