7/6/2015
Alex tiene permiso de hacer la fiesta que quiera, por lo que la casa no tendrá supervisión durante al menos 12 horas.
Alex decidió que será una fiesta de disfraces así que he decidido disfrazarme de un dulce conejo. La fiesta de Alex está más grande de lo que creía, pensé que sería una fiesta pequeña. Pero no la gente llega por montones y como que ya no me está agrandando mucho la idea de convivir con tanta gente, no soy muy sociable pero realmente me agrada la gente solo no se como hacer para que yo les agrade.
Son las 12:00 pm la fiesta ya casi termina, pero por lo que veo Alex se paso de tragos que suerte que aún soy menor de edad si no quien acabaría la fiesta.
Les he dicho a todos que se marchen así que estoy terminando de recoger algunos vasos del suelo cuando veo la sombra de Alex recostado en la puerta de la cocina.
-Que haces acá Alex deberías estar en la cama, estás demasiado ebrio-
- Claro que no, te he dicho lo bien que te ves hoy-arrastra un poco las palabras por culpa del alcohol.
- Tendré que dejar esto para mañana, hay que llevarte a la cama-
Avance hasta donde el estaba y lo tomé del brazo para que sostuviera un poco de su peso en mí.
Llegamos a su cuarto y lo tiro a la cama, me levanto para irme pero me agarra de la mano y me recuesta en la cama por lo que quedó frente a su rostro, siempre he tenido un crush con él pero jamás le he dicho nada y supongo que aún no se ha dado cuenta. Tal vez si tengo un poco de valor me atrevería a besarle nunca recuerda nada después de una borrachera.
La idea viaja en mi cabeza durante un tiempo y me digo por qué no? no es como si nos fuéramos a casar es solo un beso, mi subconsciente me dice que no lo haga pero mi corazón me motiva a hacerlo así que accedo a los deseos de mi corazón y acerco mi rostro al suya despacio pero cuando ya estamos a pocos centímetros me acobardo y empiezo la retirada cuando el toma mi cuello y pega sus labios a los míos, el roce de sus labios en los míos lo caliente de su respiración me vuelve loca en mi cabeza suena una alarma pero lo deseo tanto que decido ignorarla. Cuando el aire me empieza a faltar decido separarme y alzó mi mirada veo esos ojos que me vuelven loca y en contra de toda mi voluntad salgo de la cama y me voy de su cuarto en dirección al de invitados. Ha sido demasiado por hoy necesito descansar y por el bien de nuestra amistad espero el no recuerde nada.

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El diario de Morgan
RomansHas estado enamorada de tu mejor amigo? no? pues yo si desde siempre pero jamás he tenido el valor necesario para decírselo quizá algún día.