Hasta que la muerte los vuelva a unir

Siempre a tu lado

El bosque estaba oscuro, todavía no era de noche, pero el tamaño de los árboles y sus hojas colgando tapaban los tenues rayos que aún sobresalían del sol. Debía ser un hermoso atardecer.

Los pocos pájaros que aún revoloteaban por ahí ya estaban buscando pequeñas lombrices para luego regresar a sus hogares a alimentar a sus pichones.

Los pequeños animalitos también estaban volviendo a sus madrigueras en el fondo de la tierra. Hasta el color de los árboles parecía haberse vuelto más oscuro. Poco a poco el bosque iba desapareciendo para sumirse en un profundo sueño, del que volvería a renacer cuando los primeros rayos del sol y el fresco aire de la mañana dieran comienzo a un nuevo día.

Poco a poco el bosque se adormecía.

Lo mismo pasaba conmigo, pero la diferencia sería que yo no volvería a despertar junto con ellos.

Al fin nos reuniremos, podremos estar juntos. Nada nos separará. Siento que mi trabajo aquí en esta tierra ya ha concluido. Espero haber ayudado a los demás en mi estancia en este lugar, pues para eso estamos todos aquí ¿no?. Estamos aquí para hacernos felices, para ayudarnos y apoyarnos. Siento que ya he cumplido con eso aquí.

Ahora me iré a ese lugar en donde la felicidad no tiene fin y la alegría desborda por doquier. Y estaré por fin a su lado.

Mientras pensaba esto mis brazos se adormecían y mis ojos se nublaban, ya no sentía nada y escuchaba cada vez menos. Delante de mí pasó una mariposa que se detuvo un momento en mis hombros y luego con un vuelo firme se alejó y se perdió entre las hojas que caían de los árboles. Traté de seguirla con la vista, pero en ese momento mis ojos se cerraron.

Y ese fue mi último recuerdo de este mundo.

Ya estoy junto a él, Kili, mi amor. Ya nada podrá separarnos.

Y por qué elegí bosque para morir. Pues porque en él todo puede volver a nacer. Hasta la insignificante semilla que cae de un árbol a punto de secarse, puede dar vida a otro árbol. Y yo espero que tal vez, solo tal vez, algún día todos volvamos a renacer como ese árbol. Que algún día, en algún lugar, nos volvamos a encontrar. Pero esta vez, sin peleas ni enfrentamientos. No. Solo como personas que por mas diferentes que sean, se traten con amor y respeto los unos a los otros.

Y por qué el bosque. Porque es un majestuoso lugar para contemplar.