Capitulo 1

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Sentimientos... ¿qué es eso?, siempre escucho a las personas mencionarlo... ¿Cuál es el significado de esa palabra?, siempre me formulo esas preguntas en mi cabeza... siempre están recorriendo mi mente de un extremo a otro...

- ¿Ninfa? ... Ninfa te estoy hablando...

-¿eh? ... – Al escuchar la voz de la pelirroja a mi lado baje de mi nube de ideas. - ¿Qué?

- La profesora ha estado diciendo tu nombre 3 veces

- ¡Presente! - rápido alcé mi mano para dar señales de existencia a la profesora de historia.

- Ninfa Monarca, esta es la quinta vez que esta distraída en mi clase, y no lo voy a tolerar más, si no te agrada mi clase te pido que te salgas-. En cuanto escuche las palabras de la profesora de historia, me levante agarrando mis cosas y salí del salón sin importarme nada más. La verdad no me interesaba en nada su clase, pues, la mayor parte de mi vida recibí clases particulares en casa por mi "condición". Mis padres al saber sobre mi salud mental y descubrir que no era como los "demás" decidieron darme educación en casa contratando a los mejores profesores, esto para protegerme de los demás.

Empecé a asistir al instituto por que no podía seguir con mis estudios en casa, pues comenzaba a tener que cursar la universidad. Mis padres no aceptaban la realidad, pero al ver que no había otra solución tuvieron que dejarme ir.

Después de salir del salón me dirigí al patio yéndome a un pequeño bosquecito que estaba en la parte trasera del campus. Procedí a sentarme y sacar mi sketch bock, me puse mis auriculares conectándolos a mi móvil y reproduje la canción Narcisista por excelencia de PXNDX. Mis gustos en la música no son ciertamente comunes comparados a los gustos musicales de las demás chicas de mi edad.

Normalmente lo único que suelo hacer es dibujar, pues es la única actividad en la cual encuentro algo de interés. Comencé a dibujar algo que había soñado desde hace un mes entero. Un ser masculino, de más o menos 1.80 cm de alto, podía calcular eso de una manera no tan exacta, pues normalmente estamos ambos de pie, lo que me hacía ver la diferencia de estatura. Su cabello era negro como la noche y un poco largo, en la parte trasera tenía una coletilla, sus ojos eran de un rojo carmesí muy intenso, era algo delgado, pero no mucho para decir que estaba en los huesos, llevaba puesto una camisa negra y unos pantalones de vestir, pero nunca llevaba zapatos. pero sin duda lo que más llamaba mi atención eran sus inmensas alas, tenían un color gris oscuro, median más o menos 3 metros de largo y 2 de ancho.

¿Qué era él? ... ¿un demonio?... ¿un ángel caído?... no lo sabía con exactitud, lo único que conocía de él era su nombre, "Adriel". Aunque su apariencia no siempre era la misma en mis sueños, a veces cambia su manera de vestir, pero otras veces lo veía como un gran lobo, el cual tenía el pelaje al mismo tono de color que sus alas, pero nunca pronunciaba una palabra, y yo tampoco lo hacía, solo me miraba y se alejaba. Y desde que soñar con él era algo cotidiano, decidí comenzar a dibujarlo según la apariencia de cada sueño, incluso llegaba a dibujar al lobo que aparecía con él.

Mientras yo estaba inmersa en mi mundo, no note que la pelirroja quien me había hablado minutos antes en clase de historia ya se encontraba sentada a lado mío.

-oye... Ninfa... Ninfi... ¡NINFA MONARCA VERNACCI TE ESTOY HABLANDO! – Una vez termino de gritar me quito el auricular lo que provocó que volteara a verla.

– ya te escuché... no estoy sorda- conteste.

– Pues lo pareces - se sentó a lado mío y me acerco el sándwich el cual estaba envuelto a la mitad en una servilleta y rodeada con plástico adherible, le agradecí por el favor de traerme mi almuerzo sin decir nada más. Deje mi sketch bock a un lado mientras abría la envoltura de mi sándwich. La pelirroja, que por cierto se llamaba Arte (un extraño nombre), no aguanto la curiosidad y tomo el sketch comenzando a curiosear entre páginas, llegando a los dibujos de aquel ser.

– Y bien Vernacci... me dirás ¿por qué dibujas mucho a ese amado tuyo? - después de decir eso soltó una carcajada dando a entender que era una broma.

- no es mi amado... es solo un sueño - dije sin dar más explicaciones, pues no sentía la necesidad de explicarle todo el asunto de lo que pasaba en mis sueños, además de que no se lo tomaría enserio. Pero no iba a quedarse así, al ver que no le daría explicaciones, comenzó a "molestarme". Deje que pasara bastante rato esperando a que sonar el tintineo de la campana del campus dando a indicar a siguiente clase, pero para mí buena suerte jamás paso, pues los profesores estaban en conferencia.

Una vez que vi que el mundo conspiraba en mi contra, decidí rendirme y darle la explicación a la pelirroja sin esperar nada de ella.

- ¿Qué quieres saber Arte? - al terminar la pregunta ella sonrió en señal de triunfo y rápido, casi sin pensarlo me dijo su pregunta -, ¿Cómo se llama el chico? - apunto al dibujo.

- Se llama Adriel, no sé lo que sea realmente ... nunca pronuncia una sola palabra... sin embargo, siento una sensación rara en el pecho cada vez que lo veo... - al terminar de hablar su expresión alegre había cambiado por una seria y sus ojos habían cambiado de un color miel (el cual era su color natural), a un color tipo violeta que se difuminaba con su color natural... nunca la había visto así.

- ¿Todo bien?

- ¿Eh? – Al hablarle reacciono y sus ojos regresaron al color habitual -, ah lo siento ninfi... bueno es un sueño raro je je, pero tal vez encuentres el significado en algún momento, ¿no crees? - su voz sonaba algo inquieta. No quise preguntar las razones de su cambio de comportamiento, pero supongo es normal, porque en realidad... yo no siento absolutamente nada.


//Holi :3...

Esta historia la deje abandonada hace mucho tiempo y recientemente la encontré y use para un proyecto escolar pero la verdad me gusto mucho y quise compartirla, espero les sea de agrado <3

Pdt: Los caps podrían ser cortos y las actualizaciones un poco tardías, pero hare lo posible por subirlas rápido, y perdón si se llegan a encontrar con una falta de ortografía (o゚v゚)ノ

En busca de sentimientosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora