~HIPOGRIFOS~ Gramander

N°8 ( Final)

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N°8 

Percival tuvo que soportar 5 horas en la enfermería por órdenes de Seraphina, aunque dejó de quejarse cuando Newt se la pasó a su lado preguntado cómo estaba, si quería algo o hablando de sus criaturas.

Una vez liberado de las garras de la medimago que no dejaba de hacerle estudios, volvió a su oficina a pensar de dónde sacaba un huevo de hipogrifo, y que sea legal claro, y la bella Queenie Goldstein fue su salvación dándole justo la información que necesitaba, aunque con la condición/amenaza de que ni se le cruzara hacerle daño a Newt.

Y así una semana después del duelo Newt Scamander fue llamado a la oficina de Graves.

Newt estaba hecho una bola de nervios cuando entró en la oficina, aunque esos nervios quedaron en segundo plano cuando se encontró con Percy en el sofá con algo envuelto en mantas.

-¿Me llamaste?- preguntó sintiéndose idiota despues, por supuesto que lo había llamado.

-Si, ¿Puedes sentarte en el sofá por favor?- Newt se sentó mientras Percival se paraba y extendía el bulto con matas hacia él. Newt lo tomó y se fijó que era.

-UN HUEVO DE HIPOGRIFO- dijo sorprendido e impresionado.

-A si es- hizo una pausa, respiró profundo y continuó- Newt, tu eres impresionante, fascinante, único, eres tantas cosas que no puedo terminar de decir cada una de las cosas que te hacen tu y que hacen que no pueda pensar si estas cerca, que quiera que estes conmigo y me prestes atención, que todas tus sonrisas, tus lágrimas, tu preocupación, todo eso y más me lo muestres y me tengas una confianza que con nadie más puedas formar. Quiero ser la razón de tu felicidad, poder iluminar los días malos como tú me iluminas con tus ojos, tu pelo y tu ser mi vida. Te pido que me aceptes como compañero, que me veas con amor, que armemos una vida y una familia juntos- Se paró por unos segundos para mirarlo- Y para probar que puedo ser aquel que pueda cuidar a tus cachorros, protegerte de los males y darte todo mi amor y cariño, te pido que me permitas cuidar a este huevo de hipogrifo junto a ti- Percival se quedó mirando fijamente a los ojos a Newt esperando una respuesta y se empezó a preocupar cuando vio a Newt empezar a llorar, dejo el huevo de lado y abrazó a Newt- Newt! Lo lamento, si dije algo malo, si te molesto algo, enserio lo siento, podemos seguir siendo amigos si quieres, no hace falta que me aceptes- se apresuró a decir, a lo que Newt empezó a negar con la cabeza.

- Percy, ¿enserio piensas todo eso?-Él asintió- Pues entonces yo te acepto como mi compañero, porque yo te amo Percy- dijo Newt, Percival por la emoción junto sus labios con los d Newt y se iba a separar porque no estaba siendo correspondido, pero Newt lo hizo, sellando sus palabras, prometiendose que se amarían, se respetarían y se cuidarían.

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Percival y Newt cuidaron al huevo y luego cría de hipogrifo por 12 meses, hasta que esta estaba preparada para ir a la reserva donde la Sra Scamander, quien fue la que le facilitó el huevo a Percival, criaba hipogrifos.

Ese año ambos aprovecharon para fortalecer su relación, teniendo citas, roces, toqueteos y besos acurrucados el uno junto al otro, largas charlas e incluso empezaron a convivir en la casa de Percy. Ambos estaban muy felices y Newt pensó que sería momento de dar un gran paso.

Pronto llegaría el celo de Newt y este decidió que sería su primera vez acompañado de un alfa, y a decir verdad ansiaba, como nunca se lo imaginó, ser marcado por Percival.

El Omega llegó a la tan conocida oficina, tocó y esperó a que le dieran paso. Al entrar fue recibido por los brazos del Alfa, el cual lo rodeó y apoyó su nariz sobre la glándula de olor del menor, este se acurrucó en el pecho del mayor.

-Percy- llamó al mayor.

-Mmm- gruñó en este, indicando que lo estaba escuchando.

-Pronto llegará mi celo-.

-¿Irás a casa de las Goldstein o a la de tu amigo Muggle?- preguntó pegando lo más a él sin prestarle mucha atención.

-No, quiero pasar mi celo contigo- Percy cual resorte se puso delante de él.

-¿Estás seguro? No creo que pueda contenerme de marcar te en ese estado-.

-No tendrás que hacerlo, quiero que me marques, porque yo se que quiero tenerte como mi Alfa a ti y a nadie más- Newt le regaló una gran sonrisa y Percival se la correspondió.

-Perfecto, porque yo no me veo junto a ningún Omega que no seas tú- se acercó a su oído- Porque te amo más que a nadie ni a nada en este mundo- le dijo dándole un cálido beso en la frente.

Y así, Newt y Percival compartieron el celo del menor. Percival asegurándose de cumplir los pedidos, caprichos y ruegos del pequeño, aliviando su malestar y su calor, dando y demostrando todo su amor en toques, besos, caricias y en palabras dulces.

Y en esa noche llena de amor y pasión, Newt y Percival se hicieron uno en cuerpo, en alma y corazón. 

Y al amanecer, Percival llevó el desayuno a la cama a Newt, junto con una cajita de terciopelo negro, con el anillo que avía dento y las palabras "Newton "Newt" Artemius Fido Scamander, ¿quieres casarte conmigo?", Percival y Newt se comprometieron a pasar sus vidas juntos.

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EPÍLOGO

Newt preparaba un pastel junto a Jacob, quien hacía la mayor parte del trabajo, sin magia para que sea más especial para el cumpleaños número 4 se su pequeño Credence Corvus Aurelius Graves Scamander. El niño tenía el pelo nego y ojos marrones, y su corazón, al igual que el de su papá, estaba dedicado a las criaturas, él las entendía y ellas a él.

Percival, por otro lado, estaba consiguiendo las decoraciones que Newt le había anotado, junto con un regalo para su hijo, suerte la suya de ser amigo de su jefa y que esta sea la madrina de su hijo, pues lo había dejado salir a buscar las cosas y ella se quedo cuidando a Credence.

A las 6 de la tarde, el jardín de la casa Graves - Scamander estaba decorado con guirnaldas y globos, con una mesa larga con diferentes comidas y el centro una gran torta blanca que decía "Feliz cumpleaños Credence" en azul. El niño iba de un lado a otro, jugando con aveses con sus padres otras con sus tíos o su abuela, en algunas ocasiones escuchaba las historias que tenían los Aurores que contar, otras como su tía Queenie leía los pensamientos del resto. 

Y así se pasó la tarde, el pequeño Credence soplo las velas, abrió los regalos y cuando llegó la hora de irse, se despidió de todos.

Muy cansados, Percival y Newt llevaron a su pequeño ya dormido a su cama, le dieron un beso en la cabeza y se fueron a dormir felices por haberse encontrado y enamorarse, felices de tener un pequeño hijo, felices por saber que él contrario fue lo mejor que les pasó en la vida.

FIN

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Y asi termina, espero que alla gustado esta historia.

Fue un placer para mi escribirla y estoy agracecida a todos ustedes mis bujas y magos por leer esto.

Espero pero poder volver a encontrarlos en otra historia, sin mas que decir, muchas gracias y buenas noches/dias/tardes.