Capítulo Único

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En los cinco años que lleva trabajando como ingeniero en sistemas jamás se había equivocado en algo, siempre fue muy dedicado a su profesión. Pero últimamente comete errores que ni un novato lo hace, a veces por una tecla debía de volver desde el principio o que también casi mete un virus a la compañía que trabaja.

—Cada vez se pone más serio —comentó un compañero mientras le extendía un vaso de goma, con un té helado que mando a preparar para al otro.

—Que cosa —respondió haciéndose que no entendía.

—Tus ojos, Itachi  —reprochó el otro aun sosteniendo el vaso entre sus manos —. Itachi, alza la mano y toma el vaso. —Tuvo que decirle eso para que el nombrado así lo hiciera.

—Exageras, Nagato. Yo estoy estupendo. —«Si, estupendamente mal.» fue el pensamiento del nombrado.

Itachi tomo el té como pudo, bajo la atenta mirada del pelirrojo. Cada día la vista de su compañero-amigo, estaba peor y este ni quiere ir al médico por una revisión. No queriendo perder más tiempo con su terco compañero decidió irse a su puesto de trabajo, que no dio tres pasos cuando escuchó un fuerte estallido y al voltearse ve a Itachi envuelto de humo; había regado el té en el teclado del computador por querer ponerse encima de la mesa.

—Claro, muy bien —ironizó Nagato mientras negaba con su cabeza.


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Tres veces que fueron acompañados de un golpe. Itachi se había estrellado contra un pared al estar entrando al edificio, después fue con la puerta del ascensor y el tercer golpe fue contra su propia puerta.

—Estoy excelente. —Se dio ánimos y por fin abrió la puerta.

Y al entrar a su apartamento, no fue tan diferente como antes, se tropezó todo y cayó de boca al suelo.

Kakashi Hatake, el vecino de al frente tenía la intención de salir a ver que pasaba. En los años que tiene como vecino jamás había escuchado tanto escándalo, pero lo dejó pasar cuando todo volvió en silencio.

—Debe ser que viene tomado —renegó para seguir con su lectura erótica.

Lo cierto es que allá Itachi en su apartamento, se empezó arrastrar por los suelos para llegar al mueble y dormir allí, ni loco volvería a ponerse de pie.



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Llegó el día domingo en donde la música de Luis Miguel llegaba hasta el apartamento de Itachi, era su vecino del al frente un amante a las baladas. Itachi no se queja, le gusta el tipo de música de su vecino más no comparte esa pasión musical. En esta ocasión puso Amarte Es Un Placer una de las canciones que más le gusta a su vecino.

—Va a rayar el disco de tanto ponerla. —Suspiro y siguió mirando en la tienda virtual cual álbum comprar.

Mientras que Kakashi estaba limpiando su librero, mezclado entre mangas Shoune, pero más con novelas eróticas y por ahí algún Boys Love que le llamó la atención y lo compró. Un día libre, escuchando a su cantante favorito, no podría pedir más.

Y al llegar el próximo domingo ahora es Itachi que tenia puesta a todo volumen reproduciendo el álbum Treasure Ep3: One To All de la agrupación Ateez, pero en especial la canción Wave. Itachi ama el K-pop y tiene todos los álbumes de sus artistas favoritos, y alguno que le faltará lo conseguía de segunda mano.

Kakashi en su apartamento tampoco se queja, además admite que tiene un buen ritmo la canción a pesar que no entiende nada.

Itachi y Kakashi, pasan quizás desapercibido la presencia del otro. Cada quien en su mundo, sin estorbar al otro. Aunque en ocasiones se habían intercambiado palabras que no pasan de un saludo y saben el nombre del contrario por pura coincidencia de conocidos.


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Tres meses después, fueron los que pasaron y la vista de Itachi cada vez peor.


“Lo sentimos, pero acá se registra que el paquete fue enviado a la dirección dada. Hubo retrasos, pero se fue enviado y recibido”


Fue el mensaje que recibió, después de estar reclamando una semana por su álbum que no llegó. Tomo su celular y revisó la página en donde había realizado en el envió, y a muy regañadientes tomo el par de gafas que hace un mes se le fueron recetadas: su madre le obligo a ir a un médico para que lo valorará. 

Miro con atención cada punto hasta que llegó a la dirección, cayendo en cuenta que el del error fue él y no el correo. Y lo peor de todo es que la dirección que puso fue la de al frente.

Dirección de Kakashi: 66-69, era el numero de la puerta.

Dirección de Itachi: 66-96, la diferencia algo distinta, pero Itachi las confundió.

Con sus cabellos alborotados y usando las enormes gafas, se dirigió a la puerta a paso rápido para ir hacia su vecino. Cuando abrió la puerta chocó con algo que lo hizo retroceder y por suerte agarró sus gafas.

—Lo siento, venia a entregarte esto. —Kakashi le enseña un paquete algo grande que Itachi recibe como si fuera un bebé.

—Gracias y… lo lamento.

—Descuida, los correos pierden cualquier cosa. —Le resto importancia.

—En serio fue mi culpa, puse tu dirección en vez de la mía y falta de sueño, problema de vista, estrés, estaba vuelto un caos ese día que hice la compra. —Negó con su cabeza por su propia torpeza, algo raro en él.

—Por suerte, pusiste mi dirección, no de algún ogro. —Y los dos rieron antes ese comentario.

Un silencio se formo entre los dos. Ahora que Itachi tenía más cerca a su vecino, podría apreciar que tiene un buen contorno de rostro. Aunque no se le puede apreciar bien por la máscara que siempre usa.

—Tengo algunas cervezas, si gustas te invitó a un par —propuso Itachi rompiendo el silencio.

—Encantado.

Y solo eso tan extraño, pero a la vez casual. Itachi empezó a conocer a Kakashi, descubriendo a parte de Luis Miguel también le gusta la Quinta Estación, La Oreja De Van Gogh y también que le gusta el tango herencia de su padre. Esa tarde fue muy amena para los dos y cada uno cuestionándose porque jamás habían intercambiando palabras más allá de un saludo formal. Kakashi por su parte supo que Itachi era más fanático de SS501, TVXQ, Shinee, Suju y entre otros, que también tiene apego mucho al rock en español y a la opera. 

Después de esa tarde, quedaron en volver a compartir más como estas y la idea no es mal en realidad.

Conforme pasaba los días y semanas, se volvió costumbre toparse en las mañanas y salir a trotar por la manzana, también tomar un desayuno juntos, intercambiar números para así comunicarse por mensajes y llamadas. En algunas tardes en vez de quedarse en el apartamento del otro, salían a caminar.

Itachi hasta pensó en que sí por poner una dirección errónea, iba a desencadenar aquella amistad que se estaba transformando en algo más intenso que eso, hace rato fuera puesto su dedo mal en los números.

En ocasiones Kakashi se quedaba mirando a Itachi mientras dibujaba y este ultimo hacia lo mismo cuando Kakashi leía. Una manía que comparte, pero no lo saben.

—Yo no tengo problema en quien fijarme. —Fue la respuesta de Kakashi ante la pregunta de Itachi.


¿Qué te atraen a ti?


Una pregunta algo confusa, pero que Kakashi la captó de inmediato.

—Y que me dices tu. —Devolvió el cuestionario.

—Igual, aunque siento que me van más los hombres, pero bueno, es cosa mía. —Desvío la mirada hacia otro punto que no fuera Kakashi.

El reloj estaba a poco de marcar la media noche, pero allí estaban los dos hablando sobre sus preferencias y tomando un buen vino.

—Me gusta un chico que le encanta el K-pop y vive al frente de mi apartamento —comenta Kakashi como si nada.

Itachi tuvo que tragar como pudo el sorbo de vino, ya que empezó a toser casi ahogándose sacando una risa de Kakashi.

—¿No es broma? —pregunta cuando se calmo.

—Para nada. En serio, me gustas, Itachi —reafirma lo anterior dicho.

Itachi sonreír, hace tiempo que no sentía esa calor abrigándolo de que alguien se te confiese y mejor aun que también siente lo mismo.

—Pensaba solo yo me cree ese mundo —dijo Itachi y el otro negó.

—Los dos lo creamos. —Y tomando la copa de vino que tenía Itachi entre sus manos para ponerla a un lado. Y así acercarse hacia Itachi quedando a milímetros de distancia de sus labios.

—Me besarás o te quedarás mirándome —cuestionó Itachi.

Kakashi se bajo su máscara dejando relucir aquel perfecto rostro y terminado de eliminar cualquier distancia entre los dos. Kakashi disgustaba de ese sabor a vino que Itachi aun tenia impregnado en su boca, mientras que Itachi podría saborear aquel ácido y dulce de las uvas que acababa de comer Kakashi.

Y que irónico que todo empezó por una dirección errónea por parte de Itachi. Nunca pensó que se sentiría tan feliz por un error que cometiera.


Fin.


Holaaa

1:52 de la madrugada o algo, y algo aquí. En verdad, no tengo sueño y además que escribir me ayuda muchooooo para distraerme de ciertas cosas.

KakaIta para ele corazón ❤ los amo a mis bebes preciosos. También que lo de Itachi me paso, empecemos de la vista, si me estrellé feo por ver borroso (y varias veces), esperé casi cuatro meses (o seis) por un manga ¡Un manga! Fue una tortura por eso y ahora estoy en la espera de otro -se va a llorar-, pero aquí lo puse a un álbum de K-pop jejejej, también los artistas mencionados son de mis favoritos 💅❤👀 así que vi la oportunidad y los incluir.

Y si lo de Itachi me paso a mi, también lo del té igual, aunque a mi se me regó encima de mi celular 💔, sobre la dirección también, ósea el oso que tuve que pasar con mi pedido de Boys Love y sí, me negaba mucho en ir al medico por el hecho que siempre que voy, salen con otra cosa que supuestamente tengo y no estoy para eso, aunque actualmente no tengo gafas, ya que el seguro medico acá anda locos y nos movieron a todos a otras entidades, además que si o si tengo que ir para a ver si mi vista empeoró y hacerme un chequeo de mis otros achaques jejejeje

Sin más, gracias por leer ❤

One Shot: Dirección Errónea-[KakaIta]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora