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Brian no se esperaba lo que ese día llegaría, algo que cambiaría su vida por completo.

Eran sus últimos días en la preparatoria, igual que todos los alumnos estaba en espera de la carta que les jugaría el futuro, la carta de aceptación a las universidades, a las cuáles ellos se postularon.

Brian había pedido una beca para una de las más prestigiosas de Londres, "Imperial College" pues según sus profesores con las excelentes calificaciones que llevaba, la universidad le aceptaría y quizás le pagaria la beca completa o al menos la mayor parte de esta.

Abrió la puerta de la pequeña vecindad dónde vivía junto con sus padres, la cerró con más fuerza de la normal, logrando que alguno de las vecinos se asomaran para gritarle un insulto.

También logro que Anita, la chica que estaba encantada de el, saliera de su casa para encontrarle, la niña le recibió con la linda sonrisa que adueñaba, no negaría que la adolescente poco menor que el, era muy linda, la timidez y alegría de aquella chica le acariciaban el corazón cada que hablaba con ella.

-¡Bri!- Corrió a abrazarle como un peluche, aunque en realidad ella era la que quedaba envuelta como un bebé en los brazos del rizado, pues sus quince años de edad eran poca diferencia a los 17 de Brian, pero eso no quitaba que la niña se viera como una pequeño hamster junto a un poddle.

-¿Cómo te fue en la escuela?-

-Muy bien pequeña, ¿Y a ti?-

-Demasiado bien, ya están preparando la graduación de secundaria, ¿Bri tú irias como mi acompañante?- Los ojos de la adolescente se llenaron de ilusión.

-Probablemente- La niña termino el abrazo para dar un salto de alegría, sus cabellos pelirrojos se alborotaron, haciendo que Brian se sintiera dichoso porque la joven estaba feliz gracias a él.

De un momento a otro la niña pareció tomar seriedad, como recordando algo

-Bri, hoy llegó una carta para ti- Le tomo la mano para correr a su casa, Brian optó por esperar afuera, no quería malos entendidos con los padres de la niña, ni con los suyos. Después de un rato la chica salió con tres sobres.

El rizado los tomo y empezó a revisar de que trataban.

-Luz, internet, universidad ¡UNIVERSIDAD!- Grito emocionado, corrió a su casa, para reunirse con su madre. Entro rápido encontrando a la mujer en la pequeña cocina, frente a la estufa -Mama llegó carta de Imperial College -

La mujer le miro con una pequeña sonrisa.

-¿Quieres abrirla ya, o esperamos a papá? Ya no tarda- Brian pensó un poco, era una noticia importante, una por la que sus padres también estaban ansiosos de recibir.

-Lo esperamos- dejo las cartas en la mesa, y le ayudo a su madre para poner los utensilios necesarios para la comida.

Una media hora más tarde llego Paul, un poco agotado, todos se sentaron a comer, un delicioso plato de sopa, y posteriormente un par de quesadillas.

-Padre, ya ha llegado carta una universidad- El hombre le prestó toda su atención.

-¿Ya la has abierto?- Cuestionó.

- No, te estábamos esperando- Le mostró la carta -No nos demos falsas esperanzas ¿si?, Esperemos cualquier cosa- sus padres asintieron.

El rizado suspiro y rompió la parte superior del sobre, para sacar la hoja de papel que traía la respuesta sobre su futuro. Después de prepararse para cualquier cosa procedio a leer en voz alta.

- Señor Brian, nuestra institución a analizado las calificaciones y comportamientos que usted a tenido a lo largo de sus estadías en las escuelas básicas como en media superior y sería un honor para nuestra universidad tener un alumno con su excelencia y disciplina en cuanto a su comportamiento y buen desempeño escolar. Es decir, el Imperial College le ha otorgado una beca para que curse en nuestra universidad, Felicidades -

Los tres integrantes de la familia saltaron con emoción, su hijo podría estar en una de las mejores universidades.

- ¡Brian! ¡Sabía que tú podías hijo, lo sabía! - Paul abrazo con emoción al rizado, el mismo no podía quitar la gran sonrisa de su rostro.

- ¡Lo he logrado! -

-Bri, creo que a la pequeña Anita le gustaría saber- Dijo su madre, el rizado asintio.

-Vuelvo en un ratito, le iré a contar-

Salió de su casita, camino un poco, bajo las escaleras y llegó a los dos cuartos en los que Anita vivía con su madre. Tocó la puerta amablemente y espero un poco.

La señorita salió confundida, aunque después de notar a Brian sonrió igual que siempre lo hacía.

-Bri, ¿Necesitas algo?-

-Anita, tu querías ser de las primeras personas en saber si me aceptan o no, ¿Verdad? Me hiciste prometerlo y aquí estoy- Guardo un largo silencio, solo para darle más intriga a la situación.

-Dime, ya lo juegues más- Soltó una pequeña carcajada, delicada y agradable.

-Bien, Anita, ¡Me han becado en el Imperial College! - La chica le abrazo con emoción, enredado sus brazos en el cuello de Brian, quedando casi colgando de ahí, Brian le rodeo la cintura para darle un par de vueltas, gracias a la emoción.

- Era obvio Bri, ¿Quien no querría tenerte a ti cerca?- Cuestionó en un susurro.

-Esto es lo mejor que me ha pasado-

-Espero que en un futuro, a mi también me acepte esa universidad, y así poder estar en tu último año y mi primer año juntos-

-Yo también Anita, sería fantástico- La abrazo nuevamente, dejando una caricia en sus mejillas.

Paso un buen rato hablando con la chica, imaginando lo que le esperaba dentro de unos meses.

Su primer día de clases era lo que le intrigaba, ¿Realmente sería la Universidad tan fantástica que todos mencionaban?, No lo sabía pero lo descubriría y eso le emocionaba.

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¿Y que tal?

Solo Nosotros ~Maylor~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora