- Ayudare A La Diosa En Su Venganza -

Capítulo 1

Desde pequeña, nunca me falto el amor y la atención, mis padres y mi hermano mayor Ian, ellos siempre me protegieron y me cuidaron, ellos eran tan importantes para mí como yo lo era para ellos, y me pusieron de nombre Emilia porque desde el momento en que nací, supieron que yo sería alguien que siempre se esforzaría y trabajaría duro para obtener algo.

Yo creí que pasará lo que pasará mi familia nunca me dejarían, porque creí que su amor por mi era tan grande como para nunca dejarme, pero ahora reconozco lo estúpida que fui al pensar en eso...porque al final de cuentas, nada es para siempre, y su cariño y mi felicidad también termino con la llegada de Mía.

Porque un día, mientras estaba en la sala con mis padres y mi hermano, a  mamá le llamo alguien por teléfono, así que mi madre salio para responder, y cuando volvió a la sala, se derrumbo en lagrimas, todos corrimos hacía ella para saber porque estaba así.

−M-mamá, ¡¡¿por qué estás así?!!− Pregunte mientras abrazaba a mi madre−

Después ella nos explico que una amiga suya, la cuál la había ayudado y apoyado mucho, por lo cuál le tenía un gran cariño, había muerto en un accidente automovilístico el día anterior, y también nos contó que estaba muy preocupada por la hija de su amiga, Mía era su nombre, y tenía 11 años, la misma edad que yo, y que Mía solo tenía a su madre, quién ya había muerto, así que se quedaría huérfana e iría a un orfanato.

−Entonces, si quieres podemos adoptarla, se que te gusta mucho ayudar y no soportaría que sigas sufriendo por  esto, además, si podemos hacerlo, entonces por que no? − Fue lo que dijo mi padre sonriendo y abrasando también a mi madre−

Mi madre estaba muy feliz, y acepto adoptar a Mía, mi hermano también se veía feliz por la noticia, pero en el momento en que dijeron que la adoptarían y se convertiría en parte de nuestra familia... me dieron escalofríos, y sentí una sensación de miedo.

''Esto...no me afectara, verdad? que pienso, es obvio que no, mi familia no me podría reemplazar, además, solo la adoptaran porque su madre era amiga de la mía, y tal vez pueda llevarme muy bien con ella y ella podría convertirse y ser como una verdadera hermana para mí, además, esta pasando por un mal momento así que debo de cuidarla y apoyarla en todo para que se sienta mejor''

Unos días después, por fin se terminaron los tramites y el papeleo para la adopción de Mía, y ya iría a vivir con nosotros, al principio, estaba muy emocionada y feliz al igual que mis padres y mi hermano, y cuándo ella llego, vi lo bonita y adorable que era, y me sentí un poco celosa, pero lo mejor que podía hacer era ocultarlo.

−Mía espero que te puedas llevar muy bien con tus nuevos hermanos, por favor preséntense− dijo mi madre mientras sonreía y tenía su mano en el hombro de Mía−

−Hola Mía, es un gusto verte, desde ahora seré tu hermano y prometo cuidarte mucho, espero poder llevarme muy bien contigo− Dijo mi hermano mientras le dedicaba una gentil y amable sonrisa a Mía−

−Un gusto Mía, yo soy-

Pero antes de poder presentarme, ella se abalanzo sobre mi hermano y le dio un fuerte abrazo, mis padres solo rieron y se pusieron felices porque al parecer a Mía si le agrado mucho Ian, y mi hermano también abrazó a Mía, pero, en ese momento un escalofrío recorrió mi cuerpo, y sentí una sensación de enojo, no lo pensé mucho y corrí hacía Mía y la empuje para alejarla de Ian, pero la termine empujando con tanta fuerza que se golpeo muy fuerte, su nariz comenzó a sangrar y después se desmayo.

−Y-yo lo siento...No era mi intención...−Pero antes de que dijera algo más mi madre corrió hacía Mía y la recogió con una cara de preocupación−