necio - kazutora

epílogo

kazutora tenia sus manos amarradas gracias a unas esposas, miraba un punto fijo mientras esperaba que lo soltasen.

- gracias, naoto. - agradecio chifuyu palmeando la espalda de hanemiya. - tuvimos suerte de que aun estuvieras aqui.

- no es nada. - le resto importancia. - espero que te mejores, kazutora.

los tres asintieron mientras abandonaban la habitacion sin decir nada mas.

- hasta pronto, no se vuelvan a meter en problemas. - se despidio el detective.

- bien, ¿puedes decirme que sucedio?.

- nada, golpee a unos de seguridad porque no me dejaron acercarme a mia.

chifuyu renego tomando su nariz, ese chico era un caso especial.

- ya, ¿al menos le dijiste todo?.

observo como los ojos amarillos comenzaban a aguarse, su amigo estaba demasiado sensible. - ... no.

- hombre, ya luego le podras decir, calmate.

lo envolvio en un abrazo fraternal que demostraba todo su cariño y apoyo. kazutora se aferro aun mas, mojando su hombro y limpiandose en sus prendas.

- gracias, chifuyu.

se separo al ver como un policia le mostraba una llave para liberarlo, acto que entendio rapidamente y fue desposado.

- no deberias volver a meterte en lios, estas limpiando tu historial.

- naoto me ayudo esta vez.

- esta vez, no siempre.

- y que, de todas formas ya estoy manchado.

chifuyu lo asesino con su mirar, sabia que kazutora bromeaba constantemente con eso pero ahora no era el momento mas oportuno.

- lo siento.

- idiota, no quiero quedarme sin un compañero aun.

lo acerco pasando su brazo sobre sus hombros desordenando su melena.

- ¿quieres comer pizza?, no quiero cocinar ni volver a casa hoy. - chifuyu seguia hablando sin soltarlo. - yo invito.

- ¿alguna vez tuviste novia?.

- cuando tuve trece o catorce años, se llamaba kumiko pero buah, solo amor de niños.

- que virgen.

- ¿virgen?, imposible, mi vida sexual es mas activa que la tuya.

por otro lado, mia estaba viendo una serie infantil gracias a un niño que le hablo y no se habia despegado de ella.

- ¿ellos son novios?.

- aun no. - el pequeño comia galletas sin parar.

- ¿como no se dan cuenta que son ellos?. - se quejo, los dibujos actuales era una mierda.

se acomodo en su asiento dispuesta a dormir un rato, sin embargo, la pegajosa mano del niño sobre su dedo corazon la incomodo.

- mh, ¿estas casada?.

- si. - respondio sin pensar sonrojandose.

- oh, ¿cuanto llevan?.

- un dia.

- ¿¡un dia!?, ¿y donde esta el?.

- se quedo en japon.

- los esposos viajan juntos, ¿por que no viajaron juntos?.

- porque no quise.

- que tonta.

auch, un niño de aproximadamente cinco años tenia razon.

- ¿no lo quieres?.

- lo amo.

- ¿y el te ama?.

sonrio. - mas que a nada.

el niño se asombro y le robo el anillo para mirarlo mas de cerca.

- es bonito.

- gracias.

el pelirrojo lo alzo y entrecerro ambos ojos. - ¿se llama... ka... tora?, ¿tigre?.

- ¿que dices?. - se lo quito dudosa.

kazutora hanemiya. 17-12-2017.

- ah... se llama kazutora.

- que feo nombre.

- ¿excuse me?.

- ¿eres gringa?.

- ¿no se me nota?. - volvio a ponerse su anillo.

- mmh, ¿como te llamas?.

- mia millers, ¿y tu?.

- que te importa.

chasqueo su lengua, de un momento a otro paso a ser un mocoso irritante.

- yo voy de viaje a disney junto a mis padres, ¿y tu?.

- de vuelta a casa.

- ¿viniste de vacaciones?.

- nop, vine de intercambio a hacer mi practica final de medicina veterinaria.

- ¿y cobras?.

- obvio, ¿por que no cobraria?.

- entonces no amas a los animales.

no sabia si molestarse por la inocencia del niño o reirse y amarla.

- y tampoco amas a tu esposo.

- ¿hah?.

- lo dejaste solo.

- ¿cual es tu problema, niñato?.

- ¿no puedes tener dos esposos?.

- ¿que dices?.

- es que tambien me quiero casar contigo, eres muy bonita y me gusta tu cabello. - acaricio las puntas de este sonriendo. - ¿que te paso en el cuello?.

- ¿que tengo en el cuello?. - se toco rapidamente.

- tienes marcas, ¿te picaron los bichos?.

- ... si.

cerro sus ojos luego de carcajear y lo ignoro, definitivamente no iba a molestarse con su inocencia.

se desperto al sentir unas pequeñas sacudidas en el avion como tambien sintio su brazo pesado.

el niño estaba durmiendo sobre su brazo.

acaricio su cabello negando, le habia agarrado cariño al mocoso.

- dentro de unos minutos estaremos aterrizando, por favor, no se saquen sus cinturones hasta que se les indique. - hablaba la azafata.

mia miro por la ventana, el suelo se comenzaba a ver mas cerca.

volveria a por kazutora, si es que el destino la dejaba.