Un ultimo adios-Capitulo 6

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-¡Lenoa, despierta de una vez!¡Sabes que se nos hara tarde si no te levantas y tomas tu desayuno!

-Ya voy mama...-Decia el pequeño mientras dejaba su cama con los ojos aun cerrados.-

Aun asi, no estaba en su cama, ni en su habitación, ni en su casa...
Inesperadamente este se encontraba en aquella calle de su pueblo natal y alrededor suyo solo se situaba el desastre de aquel dia, la sangre, las ruinas y las cenizas...

-¿Estoy en...? Si...E-es verdad...-Murmuraba el pequeño con los ojos humedecidos afrontando la cruda realidad una ves mas.-

Extrañamente alrededor no habia nadie, solo una mujer lamentándose entre llantos en posicion fetal sobre un charco de sangre.

-¡¿S-señora, esta bien?! ¡¿Esta herida?!

El aterrado niño, a medida que se aproximaba, fue notando que el rostro de la pelirroja mujer se encontraba cubierto por una especie de garabato negro. Aun asi, poseía esa inconfundible herida de hacha en el torso.

-Esa voz...Mi pequeño...¿E-estas vivo...?

Su tonada, su cabello, su voz... Todo estaba extrañamente claro para el niño.
Se trataba de su difunta madre.

-¿Que esta pasando...? -El muchacho se encontraba atónito ante el repentino reencuentro, pero solo fue y tomo asiento en el suelo junto a ella.-

El no entendía que pasaba, pero si sentia que ella necesitaba consuelo, a lo que el la abrazo y ella solo sonrió entre lágrimas.

-Perdon por no haber podido hacer mas por nosotros amor, pero me alegra que mi sacrificio no haya sido en vano... Odio que todo pase asi de rapido, pero estoy en paz al verte una ultima vez. -Pronunciaba la mujer moribunda mientras abrazaba a su hijo en su ultima oportunidad-

-Envíale mis gratitudes y saludos a Guion y Monika...¿Esta bien? Cuidate hijo, te amo...

-Y-yo... M-mamá...

El pelimarrón levanto la mirada y noto que ya se encontraba solo abrazando un vacío entre sus brazos sobre aquel charco de sangre.

-Adios mamá, yo tambien te amo...

"¡YA DESPIERTA!" Gritaba la voz de Monika desde lo lejos, para de pronto ser despertado por el golpe de una pequeña piedra en la frente.
Como si de un mal viaje se tratase, se encontraba una ves mas en el refugio de Guion.

-¿¡No me escuchaste la primera vez!? ¡Te perderas el desayuno por andar llorando entre sueños! -Berrinchaba la temperamental pecosa.-

-S-si perdon...Estaba teniendo un lindo sueño.-Se disculpaba sonriente mientras limpiaba las lágrimas de su cara con las mangas de su ropa.-

-Debemos ir con Guion, ¿No es asi? -Preguntaba el somnoliento chico.-

-¿Acaso necesitas que te repita cada maldita cosa? SI, el tiene que enseñarte algo.

-¿Ah?¿Tiene algo que decirme?

-Lenoa, escucha ¿Acaso ves que tengo cara de saber?¿Uh? Deja de hacer preguntas estupidas y alístate que ya nos vamos.

Lenoa comenzó a prepararse, y mientras cambiaba su ropa frente a un gran trozo de espejo roto, noto que sus vendajes se encontraban flojos y algunos otros caídos.

-¿Que me paso...?

Incrédulo, el chico se observaba sin creer que estaba su herida facial ya no existia y solo tenia una cicatriz que recorría su cara verticalmente por encima de su ojo izquierdo hasta el lado izquierdo de la comisura de su boca.

-MIRA MONIKA, ESTOY CURADO. -Gritaba el chico mientras daba pequeños saltitos.-

-¿Mm? Felicidades...(? Ten ponte esto y sigueme. -Decia la niña con una mirada indiferente acercandole un conjunto de ropa verdosa y un tapabocas del mismo color.-

Ya preparados y vestidos salieron porfin del refugio subterraneo viendose rodeados de un extenso y frondoso bosque.

-Este bosque es exactamente como mama me lo relataba. ¿Sabes como llegar Monika?

-Tranquilo estamos a unos minutos de Guion.Si ves en los árboles notaras unas pequeñas marcas que dejo guion como indicaciones de como llegar.

Ambos recorrían aquel bosque humedo mientras Lenoa anotaba y veia todo lo que recordaba de las enseñanzas de su madre, desde esas extrañas plantas fluorescentes hasta unas pequeñas alimañas parecidas a lagartijas voladoras.

Al cabo de unos minutos se toparon con una cueva cuya entrada se hallaba bloqueada por una gran piedra.

-Ya hemos llegado...¡Guion, abre la puerta!

-¿Como se supone que entremos si...

El chico fue interrumpido por un gran estruendo procedente de aquella roca.

-Asi que porfin llegan muchachos, pasen pasen, tengo que hablar contigo Lenoa. -Saludaba el hombre luego de haber movido esa gran piedra como si nada-

Una ves adentro podias ver un gran repertorio de armas en mal estado y rastros de pelea.

-Porfavor Lenoa toma asiento ¿podrias quitarte tu tapabocas? -Decia Guion mientras le daba una ojeada a la cara del niño.-

-Cuando desperte mi rostro ya estaba asi. -Contaba nervioso el muchacho-

-¿Ya lo notaste Lenoa?

-Amm si(? Acabo de decirle que note mi rostro asi en la mañana.

-Asi que aun no lo notaste. Veras no hablo de eso, quítate la ropa.

-¿Q-que? -Tartamudeo Lenoa-

-¡No sabia que eras un viejo de esos Guion!¡Pervertido! -Gritaba Monika desde un lado quien practicaba mientras Guion y Lenoa charlaban-

-Ustedes me sacan mucho de contexto... Apresúrate Lenoa -Suspiraba Guion-

-Ya voy, ya voy.

El muchacho comenzó a quitarse la ropa dejando ver una gran marca carmesí en la zona izquierda del pecho, es decir, en la zona del corazon.

-Hmm, si, esto confirma mis teorias... -murmuraba-

-¿Pasa algo?¿Es malo acaso?

-Todo lo contrario ¡Esto es estupendo! -Celebraba el hombre de aspecto relajado mientras levantaba al niño entre brazos-

-Comenzaras a experimentar cambios abruptos, tanto en tu agilidad regeneración y fuerza como en tus reflejos. Aun no sabemos como es tu bendicion pero...

Una gran explosión procedente de la entrada interrumpe a Guion, para que luego un gran silencio inunde la atmósfera.
Luego de unos segundos el silencio es cortado por una voz desconocida.

-¿Asi que aqui te escondes,ah? Maldito desertor...






















KetsuenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora