Luz

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Zoey prov:

Nathan se va dejándome en el suelo otra vez luego de golpearme porque por enecima vez no hice nada con el ni me le acerqué. Me duele hasta respirar, como puedo me arrastro hasta el colchón y me recuesto en el. Esta vez Nathan no me trajo comida esta vez y siento que en cualquier momento desmayaré. La visión se me nubla y cierto los ojos, clamandole a Dios que me siga dando fuerzas.

Siento que me tocan el hombros y me quejo, intento abrir los ojos pero no puedo.

-Zoey...- escucho su voz y sonrío, siento que es un sueño. Abro los ojos y allí está; con lágrimas en los ojos frente a mí.

-¿Estoy soñando?- me sale la voz como un susurro y Luan niega.- Sé que lo es- niega de nuevo, se acerca a mi y me da un beso en la mejilla, me quejo.

-No lo es preciosa, estoy aquí vine por ustedes- Asiento con mucho dolor en todo el cuerpo, siento que hasta el cabello me duele.-¿Puedes levantarte?-niego- Ven, te ayudaré y tú me indicarás, vamos, somos un equipo- niego sintiendo ganas de llorar- Vamos hermosa, no tenemos mucho tiempo para salir- recuerdo de golpe a Nathan y asiento.

-Vamos- con su ayuda me muevo soportando todo el dolor como puedo y logró sentarme. El me observa mi vientre por unos segundos confirmandome que lo sabe pero va a otro tema.

-¿Te hizo eso hoy?-Asiento- Idiota, imbécil.

-Luan- me observa- Tengo muchas ganas de irme- asiente y viene hacia mí.

-Con cuidado te levantaré y te llevaré en brazos, te ves muy débil para caminar.

-Ok- eso hace y arrugo la cara.

-¿Estás bien?- asiento.- Voy poco a poco.

-Ok pero vámonos por favor- susurro y me aferró a su hombro lo más que puedo.

Caminamos a cuando salimos siento un inmenso alivio, y un escalofrío recorre mi cuerpo, me asombra saber que estaba en un sótano más que oculto, observó a Luan admiración de verdad creí que iba a morir ahí atrapada.

-¿Puedes sostenerte?- asiento- ¿Segura?- vuelvo a asentir.- Te dejaré aquí un momento, apoyate de la pared para abrir la puerta- asiento. Me baja y me cuesta sostenerme pero hago el mejor intento. Abre la puerta con mucho cuidado y se asoma, luego me vuelve a cargar y subimos.-, Ya estamos cerca preciosa, dame un momento- me sienta en una silla en lo que parece una cocina y saca su celular.

-"¿Oficial?.... Estoy en casa de Nathan, si perdón pero no soporté y si encontré a Zoey la tengo aquí conmigo, vamos a salir de la casa..- escuchamos un auto estacionarse- creo que acaba de llegar- me observa- No, vamos a salir estén ustedes o no, asi que vengan rápido"- cuelga y me observa.

-¿Llegó?- Luan se asoma y asiente, siento un escalofrío recorrer mi cuerpo. Otro.- Vamonos Luan, por favor tengo miedo - comienzo a llorar, este se arrodilla frente a mí y coloca una mano en mi rodilla.

-Esto aquí Zoey, ni a tí ni a nuestro bebé les pasará más nada, sobre mi cadáver, ven.- me levanto con su ayuda y me dirige a lo que parece un baño- Quédate aquí, yo esperaré que baje y al no encontrarte cuando suba lo espero y lo inmovilizo para poder salir.- asiento- Saldremos de esta por nuestra familia- asiento de nuevo me da un corto beso en los labios y se va.

Me siento en el suelo y escucho como se abre una puerta, luego unos pasos y siento mi cuerpo temblar. El silencio inunda el lugar y me hace llorar, las lágrimas bajan por mi mejilla y no soy capaz de controlarlas. Luego escucho como otra puerta se abre y un golpe seco.

Cuando intento abrir la puerta escucho voces.

-Creí que eras un inútil, pero me has sorprendido Luan.

-Más inútil eres tú creyendo que no vendría por mi familia.- se escuchan golpes.

-¿Familia? Lo que queda de ella, porque la zorra de Zoey no me ha complacido y le di... - es interrumpido.

Abro la puerta y se escuchan varios golpes y como se golpean de un lado a otro, veo desde lejos que luan está en el piso esquivando a Nathan que tiene un cuchillo y busca de apuñalarlo. Me acerco agarrándome de la pared y con las fuerzas que no se de dónde salen tomo un pequeño jarrón y lo estrelló en la cabeza de Nathan que cae al igual que el jarrón en el piso.

-Wow genial Zo- Luan se levanta rápido y es cuando me desvanezco pero el me sostiene rápidamente.- Vamos hermosa, se está moviendo- me toma en brazos de nuevo y vamos, observó a lo lejos a Nathan moverse.

-Vi... Viene- Luan observa atrás y cuando estamos por salir se escucha un disparo, veo todo borroso y Luan hace una mueca de dolor- No, no lu.. Luan n-no.- salimos y veo tantas luces de autos que me cegó por completo y me desmayo.

Despierto de golpe y vuelvo a cerrar los ojos por la claridad, vuelvo a abrirlos y noto que estoy completamente llena de cables e incluso un respirador, a mi lado se encuentra mi madre sentada en una silla y dormida, Lana en un mueble acostada y Alli a mi otro lado en su celular.

Observó varios globos blancos, y llamó la atención de alli moviendo la mano.

-¡AMIGAAAAA!- Grita despertando a las dos bellas durmientes y ambas me ven y comienzan las lágrimas a salir.

-No lo puedo creer!!!!

-Gracias Diosss- dicen al unisono mi madre y Lana.

-¿Cómo te sientes?- Alli me da un beso en la coronilla y sonrío.

-Con.. Confundida- digo con la voz ronca.- ¿Pueden darme a..Gua?- mi madre asiente y me extiende un termo del que bebo casi medio litro.- Dios sentía que me quemaba- coloco la mano en mi vientre y caigo en la realidad.- ¿El Bebe? ¿Dónde está? ¿Lu.. Luan... Le disparar...ron... Nathan.. Mi secuestro... Los niños...- rompo en llanto y mi respiración se acelera, la tres me observan llorando en silencio. Mi madre coloca una mano sobre la que tengo en el vientre y me da una sonrisa triste.

-Respira Zoey, así no puedo contarte - trato de respirar igual que ella y cuando estoy más calmada habla- No se si soy yo la que deba decirte hija- trago grueso mientras las lágrimas siguen bajando- Luan está bien, no fué nada grave, los mellizos excelente en casa de los abuelos paternos con ansias de verte- respira y me observa- ¿Vas bien?- asiento calmando mi llanto y respiración- Estamos en Caracas, fuiste trasladada para acá por precaución- asiento pero no llega al punto que más me preocupa y presiento que no me gustará esa respuesta- Tuviste tres días sedada completamente y es por ello que dormiste todos estos días, despertabas pero no del todo y está madrugada no te colocaron el sedante para que vuelvas en sí- asiento- Tu situación es muy complicada hija- su voz se quiebra y le acaricio la mano con mi otra mano, ya yo en este punto estoy igual llorando pero no quiero que se desvíe del tema- Y pienso que es la doctora que debe decirte lo demás.- la.observo perpleja- Alli ve por ella.- mi amiga sale y observo a las dos que quedan aquí.

¿El bebé estará bien? ¿Por qué no me dicen? ¿Que sucedería con Nathan? ¿Por qué me trasladaron y por qué estoy delicada? Observó a Lana quién no ha dejado de mirarme con los ojos llenos de lágrimas.

-¿Dónde está Luan?- se acerca.

-Está en...- observa a mi madre.- Viene pronto, no te preocupes.- asiento quedando igual o peor con más incógnitas.

La puerta se abre y entra Alli con el doctor que me dijo que estaba embarazada aquella vez y otra doctora que no conozco.

-Hola Zoey, me alegra verte de nuevo- el doctor es el primero en saludarme- Ella es Blanca mi colega y la principal encargada de tu caso. Juntos hemos trabajado de la mano por y para ustedes desde que llegaste hace cuatro días.- Asiento- Vamos a necesitar que nos dejen solos unos minutos para poder conversar con Zoey, si pueden ordenen que le traigan esto- le entrega un papel a mi madre y estás tres salen tensas.

Dios que desesperación.

Frutos negados (Novela #3 de la saga "Cigüeñas")Donde viven las historias. Descúbrelo ahora