Capítulo 20:🍰Amor que elige💍

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"¿Y bien?" El alfa espero una respuesta de parte del omega.

"Yo..." Louis bajo la mirada. "Yo empecé a sentir cosas por ti hace un tiempo, pero no quiero ilusionarme, no quiero que esto sea pasajero o sólo un capricho"

"No lo será" el alfa lo tomó de la barbilla para que lo mirara. "Siento algo especial por ti, lo siento dentro de mi, creo que somos destinados, ¿No es evidente? Todo lo que nos ha sucedido es por algo"

"Quiero tener algo estable, aunque creo que lo nuestro estuvo muy revuelto, ¡Ya estamos casados!"

"Si" el alfa asíntio. "Pero quiero formalizarlo entre nosotros. Louis, me gustas, y quiero que te sientas bien a mi lado, sé que ya estamos casados pero permíteme ganarme tu corazón, permíteme enamorarte"

Louis lo pensó un momento, volvió su mirada a la cajita que estaba en la mano del alfa aún abierta y tomo el anillo de color dorado. Tomo la mano del alfa y deslizo el anillo por su dedo.

No mentia, Harry también le gustaba, le atraía su aroma y todo lo que tuviera que ver con él, ya no era costumbre como un inicio sino una necesidad, el tenerlo cerca le gustaba a él y a su omega.

"Acepto" el omega alzó su mirada hacia el alfa quien lo veía con ojos brillosos. "Ten en cuenta que a partir de hoy tienes mi corazón en tus manos alfa, me han lastimado mucho, no me decepciones"

"No... No lo haré" Harry sonrió, sus lágrimas resbalaban por sus mejillas y las limpio rápidamente.

Tomo el anillo con el pequeño diamante y lo deslizo por el dedo del omega, después cerró su mano y presionó sus labios sobre sus nudillos.

"No sabes lo feliz que me haces omega, aún cuando no lo merezco"

Louis limpio sus lágrimas, Harry en cambio se acercó un poco más al omega y pasó su mano por su espalda baja para apegarlo. Estaban muy cerca, sus respiraciones se mezclaban al igual que sus aromas.

Así que sin dudarlo ni un momento más se unieron con un beso. En ese momento sintieron algo inexplicable, sus corazónes latieron al mismo ritmo y ambos sintieron esa chispa que se instaló dentro de ellos. Los labios de Louis eran suaves, en ese momento no existía nada a su alrededor, sólo ellos besándose sin ninguna prisa.

Solo eran ellos cerca el uno del otro experimentando esa nueva sensación que jamás habían sentido.

Se separaron para poder respirar mejor, el alfa pego su frente con la del omega y ambos sonrieron aún asimilando lo que había sucedido pero sin ningún arrepentimiento.

Harry cuidaría del pequeño corazón del omega, lo haría muy feliz, serían una familia feliz porque Harry estaba seguro de que en cualquier momento ya no sería cariño, sino amor de verdad.

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Después de eso decidieron que era mejor regresar a casa para que el omega pudiera descansar, sus pies dolían y estaban hinchados.

Cuando llegaron a casa Louis ya estaba un poco adormilado, pero aún faltaba algo más.

"¿A dónde vas?" Pregunto el alfa cuando el omega tomo su mano para que no subiera las escaleras y guiandolo a la cocina.

"Te dije que había preparado algo para ti también" murmuró obligándose a arrastrar sus pies a la cocina.

"Lou, podemos esperar a mañana"

"No, nuestro cumpleaños está a punto de terminar y el regalo tiene que ser antes de que termine la noche o no contará"

"Contará para mí, estás cansado" Louis lo obligó a sentarse en la silla y camino hacia el refrigerador.

"No importa si no lo quieres comer hoy, pero lo hice especialmente para ti" el alfa sonrió cuando dejo frente a él un pastel, no era grande pero tampoco muy pequeño, en letras verdes tenía 'feliz cumpleaños' y algunas flores hechas con crema.

"No tenías porque..."

"¿Te gusta?" El omega se sentó frente a él, sus ojitos azules brillaban. "Lo hice yo solito"

"Es muy bonito" el alfa le sonrió "Es el mejor regalo de cumpleaños"

"No seas exagerado" Louis sonrió levemente viendo hacia el pastel. "No es mucho"

"No necesito un regalo costoso si es lo que piensas" el alfa alzó una ceja y tomo su mano. "La mayoría de personas compran un regalo bonito y te lo entregan, solo piensan en comprar algo que te agrade y ya, pero tú no, tú has hecho algo para mí, esforzándote en cada detalle para que me gustara"

El omega asintio viendo hacia sus manos, ahora que podía ver mejor con la luz los anillos se emocionaba, su anillo era bonito y el de Harry era dorado, ambos brillaban y Louis se sentía raro con algo en su dedo, es decir, nunca había utilizado anillos a comparación de Harry quien estaba más que acostumbrado pues siempre portaba anillos. Ahora que lo pensaba había accedido a no solo que Harry lo conquistara, ellos ya estaban unidos, no necesitaban una boda porque ahora todo el mundo sabía que estaban casados.

Deseaba recordar más de aquel día pero lo único que recordaba era haber bebido demasiado con Harry y después salir del bar tropezandose, después haber corrido juntos entre risas y lo demás estaba borroso y confuso. Louis jamás había tomado y esperaba no hacerlo nunca más.

"¿Quieres un poco?" El alfa lo saco de sus pensamientos cuando se quedaron sin palabras.

"A decir verdad estoy muy lleno, pero talvez en la madrugada baje por una rebanada, el bebé siempre tiene antojos cuando estoy durmiendo"

"¿Sabes? Porque no para cerrar este día de cumpleaños especial para nosotros partimos el pastel entre los dos? Aunque no comas creo que es algo tradicional, al menos lo es en mi familia"

"Si, también lo es en la mía" el omega se levantó caminando hacia el mueble de los cuchillos y tomando uno, tomo un plato y una cuchara para servirle una rebanada al alfa.

Ambos tomaron el cuchillo con la mano donde tenían sus anillos, se miraron un momento y sonrieron para después pasar el cuchillo por el pastel.

"Feliz cumpleaños Louis"

"Feliz cumpleaños Harry"

El alfa se inclino para besarlo por segunda vez en el día, Louis no protesto sino que disfruto de los labios del alfa sobre los suyos.

Y eso se sentía bien.

Cuando se separaron (Louis un poco más sonrojado que el alfa) partió el pastel dejando una rebanada sobre el plato y entregándoselo al alfa.

"Gracias" aún seguían de pie, Harry tomo un poco de crema y la dejo sobre la punta de la nariz del omega.

"¡Oye!" El omega mostró un rostro que fingía indignación, el alfa en cambio soltó una risita.

"Nunca dejes de sonreír" lamió la crema batida de su naricita y el omega sólo lo miro con un sonrojo que se expandía por sus mejillas. "Eres más hermoso cuando sonríes..." Dejo un pequeño beso en su naricita y junto sus frentes para después cerrar sus ojos y sonreír mostrando un hoyuelo. "Y yo me siento tan dichoso de poder presenciarlo"

Since New York (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora