(Te invito a disfrutar de esta canción mientras tanto).
Suena la campana de la cafetería.
Entré en búsqueda de mi capuccino. El frío es demasiado intenso y no puedo concentrarme así. Este lugar se ha convertido en mi refugio desde hace 3 meses. Vengo aquí a menudo en un intento de encontrar chispas de ingenio mientras bebo café. Estoy en el proyecto de escribir mi primera novela. Hace una semana mi profesor revisó el borrador y me recomendó que le diera un giro diferente, pero no se me ha ocurrido algo novedoso... Si tan solo me apellidara Austen, Shakespeare o Wilde, las cosas serían distintas. ¡Bah!
Estaba escribiendo algunas ideas sueltas que nada tenían que ver con mi novela, cuando de pronto, vi entrar al que me pareció un ángel. Sí, es definitivamente uno...un ángel que al parecer, es de los que vuelan. Lo digo por las zapatillas de ballet colgadas en su bolso color café. ¡Detente! Si lo miras mucho, probablemente se de cuenta, y esa vergüenza no la pienso pasar. No, no, mejor me sigo concentrando en mi papel.
Llevo 30 minutos escribiendo, y acabo de ser consciente de que aquel joven se me hace demasiado conocido. ¿Acaso no es como un personaje que vive en mi mente?...Tendré que averiguarlo.
Se ha levantado de la mesa, y no ha pedido ni un café, solo estuvo sentado ahí, leyendo un librito de tapa roja. Pero, oh...ha dejado el librito, ¿debería ir tras de él y entregárselo?, o ¿será mejor que lo guarde en caso regrese? Creo que la heroína de una novela se iría por la segunda opción, así que lo haré así. Mi aburrida vida necesita un poco de drama.
Nadie se ha dado cuenta de que lo cogí. Parece que se trata de un regalo: en la primera página está escrito: "Para N. con todo mi amor". Su nombre debe empezar así, pero pienso en todas las posibilidades para un nombre con N ...son absurdamente pocas.
En fin, ya casi van a cerrar y él nunca apareció. Regresaré mañana a ver si tengo suerte. Todo esto es demasiado curioso, y me encanta.
ESTÁS LEYENDO
A la hora del café
Short StoryEsta es una pequeña historia con una pizca de realidad y otra de surrealismo.