¿Por qué?

MADISON...

-Se que quisimos ser tanto que se nos olvidó ser algo- suena la alarma 6:00 am hora de alistarme para ir a la maravillosa escuela- ¡QUE MIERDA YA AMANECIO PAREZCO MAPACHE NO DORMI NI UN CARAJO!

-Se te va a achicharrar la boca muchacha- Dice mi mamá con tono burlesco, cuando se asoma por la puerta del cuarto- alístate si no quieres llegar tarde a la escuela, Andrew marco y dijo que Lee va a pasar por ti-

-Lee ni siquiera tiene licencia ¿Te imaginas nos detiene la policía? Recuerda estamos en Inglaterra, no en mi México de oro, que con que le des pa'la coca te dejan ir- mi mama me observa con el entrecejo fruncido.

-¿Te he dicho que eres muuuy pesimista? recuerda lo que piensas es lo que atraes- me dice don sabionda.

-Lo sé, lo sé no puedo evitarlo; claro que puedes evitarlo- imito esta última frase con la voz de mi mamá ¿Cómo es tan positiva?

-síguele, y le digo al señor Alfred que ya no te deje entrar a la librería- Dice mi mama riéndose. Auch, eso fue golpe bajo.

-okey, lo siento no hay por qué llegar a esos extremos, ya me voy a alistar-cierro la puerta, me meto a bañar y me pongo el uniforme, me maquillaría, pero soy realmente mala haciéndolo y mi carencia de pacencia digamos que no ayuda mucho.

-Lee, ya está esperándote- mi mamá me da un beso en la cabeza y un abrazo, yo se lo devuelvo. Salgo de la casa y me subo al carro de Lee bueno de Andrew, un Mercedes Benz modelo AMG GT, color vino una verdadera belleza.

-¿qué me ves?- Lee me está mirando fijamente con sus ojos café oscuro casi negros y una sonrisa ladina en la cara, que junto con su 1.85 m de altura, acelera el corazón de cualquier chica en la faz de la tierra, pero no el corazón de esta chica yo soy inmune a sus encantos, pero el no a los míos, no lo culpo como dice Megan Trainor, tremenda diosa del olimpo, por cierto. "If I was you, I'd wanna be me too".

-Lo fea que te vez- maldito infantil.

-no pienso caer en tu juego Lee Thomas, ya maduré tu deberías hacerlo- suelta una carcajada que estoy segura de que la escucho toda la cuadra, y lo miro feo-

- Me lo dice la gran Madison Jonson, que dice que le gusta más que la botella del agua tenga tapadera con chupete porque es más fácil tomar ¿y yo soy el infantil?- suelto un suspiro.

-Tu sigues comiendo en tu plato de Mickey Mouse y tus calzones son de Buzz Lightyear así que cállate- lo volteo a ver y tiene la cara más roja que un tomate y traga saliva, ahora yo soy la que suelta la carcajada.

-¿Me estas acosando? – me mira de reojo y se estaciona junto a los otros coches, por fin llegamos a la escuela, estaba a nada de aventarme por la ventana.

-Ni en tus mejores sueños Lee Thomas.- lo miró fijamente y me rio el solo me devuelve la mirada, ambos bajamos del coche y tomamos nuestros respectivos caminos.

Al llegar al casillero me topo con mi hermana de otra madre, Anne. Anne es una obra de arte andante, se escapó de un museo, es de Francia, pero se mudó a Inglaterra con su hermana cuando tenía 13 años, es alta y tiene el pelo negro como la noche y los ojos azules claro como el cielo como cuando es de día, es toda una artista ama pintar y tocar el violín.

-Bonjur- me dice Anne con una elegancia característica de ella.

-Bonjour à toi aussi- digo tratando de imitar su acento francés.

-¿Quién es ese maravilloso escritor, causante de tus hermosas ojeras ?- Dice Anne pensando-déjame adivinar Alex Mirez- dice sonriendo.

-Alex Mirez, sin duda es la principal esa chica es genial, se llama Alex Toledo y la novela se llama se curan rotos, descocidos y deshilachados.- Anne me mira con los ojos entrecerrados.

- Uooooo maldito Louis Collen con mi amiga no te metas- Dice en son de burla.

-Nada de eso Anne, pero ahora tu dime ¿Quién es tu inspiración en estos momentos?- Anne empieza a caminar al aula de filosofía y yo la sigo, solo escucho como suelta un suspiro exagerado.

-Lo siento, pero no te lo puedo decir es una sorpresa- me dice esto, mientras hace un puchero- la sorpresa no es para ti, solo no quiero que se te vaya a salir decirle mientras discuten- me toco el pecho haciendo un auch exagerado.

-Que falta de confianza, no lo puedo creer.- digo mientras tomo asiento al lado de Anne.

-Tu discutiendo con Lee, eres muy infantil y el también, no les puedo decir nada porque luego se anda diciendo de todo, estamos en la universidad no en el kínder-

-Con esta amiga para que tener una enemiga- digo para mí, solo veo como Anne tuerce los ojos y sonríe.

El profesor Jasper entra al aula nos saluda y nos dice que para la próxima semana le tenemos que entregar un proyecto que haremos en equipo de 3 integrantes, no pierde el tiempo este señor, pasa toda la mendiga clase diciéndonos la importancia del proyecto que cuando está a punto de armar los equipos, suena unos de mis sonidos favoritos el timbre, agradecida con el de arriba.

-¡Por fin!- me cubro la boca, porque lo dije demasiado alto.

-señorita Jonson- escucho que me llama el profesor Jasper, mierda.

-puede venir un momento- No, le digo mentalmente.

-Si profesor, ¿Qué sucede?-

-La directora me pidió que le realizara una entrevista al equipo de baloncesto...

-¿Y?- eso a mí que me importa, pienso.

- Y como yo voy a estar muy ocupado con los proyectos, lamentablemente no voy a poder realizarla a sí que quería que tú la hicieras y le des tu toque enigmático- Dice el profesor como si fuera la idea más brillante del mundo, esto debe ser una puta broma.

-¿Toque enigmático?-me le quedo viendo, esperando una respuesta- okey supongamos que acepto ¿Qué gano yo?-

-Nuevas amistades Madison- dice con un tono de burla.

-No estoy bromeando- lo miro seria.

-No vas a tener que hacer proyectos de mi clase y tampoco vas a entrar, porque vas a estar con los chicos viendo todo lo que hacen antes de entrar al juego-

-Que divertido, no puedo esperar hacer nuevos amigos- digo sarcásticamente.

-Muchas gracias, Madison-

-Solo porque es mi profe favorito, adiós.-

MIERDAAAAA porque dije que sí, relájate madi ve el lado positivo... no hay lado positivo voy a estar rodeada de puros tipos hormonales que apestan a sudor las 24hr del día, sin olvidar al cara de cola de Lee, trágame tierra y escúpeme en una cabaña en los Alpes Suizos, por favor.