𝓒𝓪𝓹𝓲́𝓽𝓾𝓵𝓸 4: Renovación del Hogar

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𝓡𝓮𝓷𝓸𝓿𝓪𝓬𝓲𝓸́𝓷 𝓭𝓮𝓵 𝓱𝓸𝓰𝓪𝓻

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En la ciudad A, la noche es más próspera que el día. Hombres y mujeres disfrutaban de las fiestas nocturnas en un bar. Una mujer coqueta con una minifalda ajustada que resaltaba su pequeña cintura de 55 cm y una prominente figura con forma de S caminó hacia un sofá en la esquina.

"Oye guapo, ¿quieres beber conmigo?" La mujer le guiñó un ojo, pero el hombre se alejó tranquilamente. Él tenía un par de ojos color melocotón extremadamente atractivos y debajo del rabillo del ojo izquierdo había un lunar en forma de lágrima aún más atractivo. Estaba apoyado perezosamente en el respaldo del sofá, y no tan solo esta mujer: todas las mujeres en el bar se sentían atraídas, no solo por la apariencia sino también por su temperamento.

Los ojos del hombre se entrecerraron levemente, como si estuviera sonriendo, pero sus ojos brillaron con frío, y sus delgados labios escupieron implacablemente una palabra: "Vete".

La mujer se quedó atónita, no pareció oír lo que decía el hombre, antes de que pudiera seguir hablando, una gran mano le palmeó el hombro: "Belleza, no hay lugar para ti".

La mujer volvió la cabeza enojada, pero vio a un hombre de cuarenta o cincuenta años de pie junto al sofá con algunas personas que obviamente eran guardaespaldas, su corazón estaba apretado, se levantó rápidamente y se fue maldiciendo la mala suerte de esta noche.

"Hay un millón de yuanes en esta tarjeta, dáselos a tu madre." El hombre de mediana edad se sentó junto al joven y puso una tarjeta bancaria en la mesa frente a ellos.

"¿Por qué me traes este asunto? ¿Por qué no la llamas?" El joven se burló de él y dijo con una mueca: "¿Es por eso que me llamaste?"

Dijo arrastrando las palabras: "¿No es mejor darle esto directamente para asegurarse de que todo el dinero pase?"

El hombre masajeó su sien, "Dile que los asuntos de tu tío han sido arreglados, que más tarde tenga cuidado con los problemas".

El joven tomó la tarjeta con una sonrisa burlona. "No te divorciaras, sin embargo, ¿Necesitas hacerme correr en medio de la noche por una cosa tan pequeña? Yan Han, no soy tu subordinado. No me importa este asunto, envía a uno de tus lacayos."

Dejó caer la tarjeta sobre la mesa y se volvió hacia la puerta.

La cara de Yan Han se hundió en una expresión muy fea. "Yo también quería verte..."

"Todavía estoy vivo, no hay necesidad de preocuparse." El joven caminó hacia la puerta del bar sin mirar atrás, y no dejó escapar un suspiro de alivio hasta que salió de ese espacio sofocado --'oh el aire afuera era mejor'.

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A la mañana siguiente Luo Xun fue despertado por el timbre de la puerta. ¿Sus órdenes ya habían llegado? ¡Tan rápido!

Luo Xun suspiró y negó con la cabeza. Cuando vivía en ciudad M las entregas nunca fueron así. Algunas entregas de paquetes se prolongaron durante diez meses y medio en promedio. No esperaba que la entrega exprés de la ciudad fuera tan rápida. Revisó los numerosos estados de pedido en su teléfono y encontró que la mayoría tenía el estado de "entrega" con algunos todavía en fase de "despacho". Luo Xun se preparó para terminar sus cosas en casa.

Algunos de los artículos que Luo Xun observó que necesitaban ser remodelados aún no habían llegado, por lo que recorrió las habitaciones, confirmó la situación de cada habitación y luego comenzó a asignar el uso de cada habitación.

The Reborn Otaku's Code of Practice for the ApocalypseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora