2: El parque

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Usualmente, suelo pasar mis tiempos de descanso leyendo libros o devorándolos .Pero en ocasiones, salir a correr escuchando a Beyoncé también es una buena opción.

Hoy es sábado, y voy a un lugar que desde ahora será mi favorito: El parque.

Cerca de mi casa hay uno. Y siempre ruego al cielo que llegué el fin de semana. Porque por fin tengo: paz, tranquilidad y serenidad; todo lo que una típica chica después de una ardua semana de trabajo necesita.

____

Decido ir esta tarde caminando. Me siento tranquila y con ganas de relajarme. Los libros son los únicos que siempre me divierten y aquellos que me distraen de la dura realidad que cada uno debe vivir. 

Salgo de casa a media tarde, me coloco los audífonos e inmediatamente suena Love me like you do de Ellie Goulding.

Cuando veo que ya falta poco para llegar, me saco los audífonos y camino entusiasmada como una niña de cinco años queriendo ver a Santa Claus.

-*-

Me senté en la cálida hierba, y me dispuse a centrar mi imaginación en lo mejor que alguien haya podido crear. Las historias.

...

No me percataba del tiempo en lo absoluto. Pero llegó un momento en que debía levantar mi cuello de la posición en como estaba porque me estaba doliendo. Y ahí fue,  donde mis ojos se cristalizaron.

-¡Oh!-dije mentalmente, cuando vi a un joven sentado bajo mi árbol, el que sería desde hoy: "mi árbol."

Irónico que veas una maravilla en carne y hueso cuando te dispones a estirar tu cuello de un libro.

Claro que él no era de por aquí, y me imploré a mí misma que una torpeza no me pasé.

Generalmente soy de las chicas que cuando las sacan de su zona de confort, cometen mil y mil tonterías más.
Me di un vistazo de pies a cabeza y estaba bien; unos jeans, blusa, chaqueta y mi boina. Parecía una niña, pero aún así lucía bien. Si supiera que habría un chico aquí, me habría arreglado un poquito más. No lo creo..., solo estoy divagando.


-Hola-digo tímidamente antes de sonrojarme como un tomate.

-Hola-contestó el chico con sus ojos marrones relucientes por la luz.

-Disculpa,mmm... Creo que estás en mi ...-señalo el sitio donde está sentado-... ¿Puedo sentarme?

-Claro-dice tranquilamente.

Y para evitar esos ratos incómodos de silencio, pregunto ...

-¿Como te llamas? y... ¿Qué te trae por aquí?- traté de sonar amable, a la vez que mi garganta se resecaba, o ... ¿Era la gran mirada de aquel chico? No lo sé, pero me estaba sintiendo algo nerviosa.

Al instante responde:

- Soy Alan. Alan Day- aclara- Decidí pasar por aquí. Soy nuevo en el vecindario, y quería estar en contacto con la naturaleza- me habla mirando mi boina- No creo que se aun problema- esboza una sonrisa cálida.

-Ya veo...- observé el libro entre sus largos dedos.

-A claro- movió el libro- Yo calmó mi estrés leyendo un libro.- fue lo último que mencionó.

"¡Oh por Dios! Él tiene el mismo propósito que yo, ¡y se sentó en mi árbol! ¡Mi árbol!"

-Bueno Alan Day...-me corta y contradice.

-Solo Alan-

Ok..., recién lo conozco y me da mucha confianza , pero seguí preguntando inquisitiva-mente...

- Alan, ¿qué te gusta leer?- buscaba de que hablar, mientras sacaba mi libro del bolso.

Ahhhhh, grito internamente, después de ver que tiene el mismo libro que yo: "Diario de vampiros: Conflicto".

"No lo creo, ¿a él también le fascinan las historias vampíricas?, creo que voy a entrar en shock". Pero antes de que ocurra un pre-paro cardíaco, decide hablar.

-¡Hey!, estamos leyendo lo mismo...-mostrando una sonrisa atónito de la coincidencia.

-Vaya sorpresa...-digo evitando sonrojarme, porque está la serie televisiva, pero nada se compara con el libro.

-Así que..., también te gustan las crónicas vampíricas, ¿no?-me pregunta algo avergonzado.

"¡Esto es una locura! ¿Cómo esto puede ser posible? ¿En dónde, esto, puede ser posible? ¿Acaso esto es una película? ¿Estoy siendo filmada? ¡Esto es la coincidencia más loca que me ha pasado!"

-Si y mucho....- contesté casi eufórica, a su anterior pregunta.

-No te pregunté cuál es tu nombre. Disculpa mi falta de cortesía- vuelve a dirigirse a mí, de manera avergonzado.

-No hay porque, soy...

En eso, maldigo mi pésima suerte, que siempre me rodea en todo momento. Un perro empieza a ladrar y a correr por nuestro delante. Empieza a dirigirse hacia nosotros y nos interrumpe, pero Alan logra ahuyentarlo.

De repente, maldecía incoherentemente que haya asustado al canino. De cierta forma, me había arrepentido.

¿Pienso dar mi nombre a un extraño? ¡¿Pero, qué rayos me sucede?!

Pero, si está en el vecindario, tal vez no sea mala idea. Es como si saludará a un vecino más...¿No?

-Y bien..., sigamos-me señala.

-Ah sí... claro...- tartamudeo- Soy Ani - por fin solté mi nombre, y fue como el nerviosismo desapareció. Sin previo aviso de mi subconsciencia, ya no miraba extrañada a Alan, ahora lo observaba feliz y contenta, mostrando una sonrisa.

-Bueno, pero creo que te diré Vampi, por que amas las crónicas vampíricas.

"¡Oh no puede ser!, recién lo conozco y ya me colocó un apodo. Va muy rápido."

¿Será que ya me había visto antes? ...

-*-

Espero les haya gustado, comenten. XD





¿Planificada? [Editándose :)] [Temporalmente En Pausa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora