Mi último día libre

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-Aooo...-dije despertándome totalmente incómoda del sillón, y como siempre amanezco con mi pelo ¡alborotado!, como una loca; me caigo del sofá y quedo tirada...ahí, justo en el piso.Y para mi mala suerte alguien toca la puerta...
Mierda y ahora..., quién quiera que sea, pensará que soy una loca, asquerosa o sucia...no lo sé(si ni siquiera me he lavado los dientes, mi me he peinado), pero que más da, aún así, estoy horrible.

Me levantó del suelo y me dirijo a abrir la puerta...y...

Lo primero que observo son unos abdominales bien definidos y ese cabello oscuro alborotado...

-Hola Ani-me dice animado.
-Emmm...ho...hola-contestó ruborizándome por pasar este mal momento.
-¿Qué pasa?

No...no...seguramente ya puse mi cara de boba y ya me quedé mirando a Andres...
No...y ahora qué carajos digo!
-¿Cómo...que qué hago?
-Estas mirándome hace un buen rato.

La cagué más de lo que ya estaba!

-Emm...no...solo me preguntaba que hacías aquí...otra vez...-contesté como niña de cinco años...
-Bueno..., quería contarte..., emmm...no... mejor decirte... si... conoces a Alan...
-¿Por qué?
-Porque justo, ayer en la noche me lo encontré y me contó que tú eres su ...
-¿Qué cosa?
-Novia...-dice agachando la cabeza.
-¡Claro que no!, ¡Yo no soy novia de nadie! Créeme solo lo dijo porque...bueno creo que le gusto.
-¿Por qué siento que me mientes Ani?
-¡¿Qué?!-dije exaltada y nerviosa.
-Pues, tú eres preciosa, y muy linda, no creo que a alguien como él le gustes, creo que está enamorado...-me dijo acercándose más a mi.
-Bueno, no lo creas y por si es necesario, te apostaría mi vida, para demostrarte que a él no le gustó.-dije retándolo, pero solo de broma; y como era de esperarse Andres no se dejo, y al instante contra ataco.
-¿Cómo tu vida entera?-dijo ya estando a centímetros de mí, y juro por Dios ... ¡SOY LA REINA DE LA ESTUPIDEZ!
Me caí por torpe al piso y por mi involuntario intento de evitar caer, me cojo de Andres, pero él cae encima mio, y ¡BOMM! Otra vez más, sentía como mis mejillas me ardían, y que ya no podía hablar porque el corazón se me había subido al cuello por la vergüenza...

-Am... yo...
-Ush...Ani-dijo Andres colocando su dedo indice en sus carnosos labios.
-Em...yo...disculpa...soy muy torpe y algo ... bueno...emmm...-dije intentando pararme, pero para mi sorpresa Andres me sostuvo y puso sus musculosos brazos, a cada lado, evitando escapar...
-Ani, te ves muy hermosa cuando te pones roja...

¡¿QUÉ?!, ¡¿Eso fue un alago o un insulto?!

-Amm... gracias, pero quisiera pa...pa...pararme.
-Esta bien...-contesto Andres; pero su tono con lo que lo dijo, me desconcertó totalmente, sonaba decepcionado o arrepentido. No lo entendí...

Me ayudó a levantarme, al momento nuevamente, estábamos a centímetros...
Esos labios carnosos, ¡Ahhh!, mis mejillas me ardían y ¡Dios!, esos magníficos pectorales que hace menos de un minuto, estuvieron encima de mi cuerpo...
Pero ¡NO!, contrólate Ani, contrólate Ani...contrólate...

-Em....um um-dije acomodando mi voz y dejar el nerviosismo a un lado, a la vez que me ponía a una distancia más alejada.

-Viniste por lo que te contó Alan, ¿por qué te importo saber lo que te dijo?
-Veraz, no me gusta que alguien sufra o que luego se sienta mal, y para mi Alan, esconde algo.

"CRÉEME...YA LO SÉ"-pensé sarcásticamente en mis pensamientos y luego le contesté...

-Bueno, gracias por preocuparte, pero... no te es treces, yo sé cuidarme sola...de igual manera gracias por tu preocupación.
-Esta bien, no dudes en llamarme si tienes problemas.
-Ok.

¿Planificada? [Editándose :)] [Temporalmente En Pausa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora