DEFINITELY EVIL LOVE (Lee Cheong-san X Yoon Gwi-nam)

𝐜𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 2

Unas horas caminando en esa silenciosa calle que solo los acompañaba los sonidos de sus propios pasos arrastrando ligeramente el suelo. No había nadie, ni algunos zombies, solo eran ellos dos en medio de todo ese apocalípsis.

No sabían exactamente que clase de comida estaban buscando, tal vez un humano a quien deborar o una comida enlada o panes que podría haber en algún supermercado abandonado.

Solo caminaban sin rumbo fijo, sin siquiera pronunciarse alguna palabra, no era tan incómodo como Cheong-san lo pensó, al contrario era un poco relajante, ir acompañado de la persona que más querías, sentir su presencia caminando contigo era una de las sensaciones más agradables que había sentido, y era tan diferente el caminar con sus amigos, este sentimiento era más lindo, más agradable,  pero se preguntó que sentía su compañero, no creo que sienta lo mismo, hasta podría llegar a pensar que está incómodo con esta situación.

Sus pasos se hizo más lento, Gwi-nam en ese instante no se percató que ya no lo seguía el paso, Cheong-san solo se quedó ahí parado mirando fijamente un punto desconocido.

Gwi-nam sin siquiera pensar en la presencia del otro chico, siguió caminando, después de unos metros más lejos se dió cuenta que sólo escuchaba sus pasos, nada del otro, se giró a su costado y nada, su respiración poco a poco subió, así su corazón latiendo más rápido, signo que había entrado en desesperación. ¡Donde está Cheong-san!.

¿acaso lo abandonó en medio de todo?, por qué lo dejó, no quería, no quería estar lejos de el, no le gustaba estar solo, quería tenerlo.

—¡Cheong-san! —lo Buscó con la mirada, la neblina empezaba a caer y eso lo dificultó buscarlo —¡Cheong-san, maldita sea! —gritó más fuerte para que pueda escucharle.

Regresó por el mismo camino, si se desviaba e iba por otro lugar, entonces el también se perderá.

A pasos apresurados volvia, después de unos minutos se paró en seco al verlo un poco borroso por esa neblina ya caída, de sus labios salió una inconsciente sonrisa, tan suave y ligera que se podría confundir con una sonrisa llena de amor hacia tu ser amado, estaba muy aliviado haberle encontrado.

No se había marchado abandonándolo, sinó se quedó atrás, su pies automáticamente corrió hacia el chico que aún seguía en pie con su vista perdida en una dirección.

—¡Cheong-san! —sin más le abrazó fuertemente al sentir sus cuerpos chocar, sus manos no estaban enrolladas en su cuello como debía ser, más bien le sujetaba la cintura fuertemente.

Cheong-san reaccionó al sentirlo, se sorprendió por ese abrazo tan inesperado, su vista y pensamiento se había perdido en ese restaurante. Ahora lo único que pensaba era en esos brazos rodearle su cintura, así es como una pareja de esposos se solían abrazarse, sabía eso, antes lo miraba todos los días, su padres... eran tan cariñosos, se amaban y se demostraban en cada momento, hasta en su frente sin siquiera avergonzarse.

Ahora recordarlos dolía, no soportaba ese dolor de perder a las personas que más amó en su vida, su madre, su hermosa y cariñosa madre convertida en zombie delante suyo en esa noche lluviosa, cada vez que recordaba, se le llenaban los ojos de lágrimas saladas.

—ey, Cheong-san, ¿por qué lloras? —lo preguntó confundido al escucharlo ipar, ¿es que no le gustan los abrazos?, o lo estaba sofocando con su presencia tan apegada.

Temiendo por algo mal que hizo, quizo desacer su abrazo, pero Cheong-san lo vió venir antes así que también lo abrazó de su cintura, lo apretó gentilmente para sentirlo más.

—solo recordé a mi madre, no me incomodas —le aseguró como si hubiera leído la mente del más alto.

—¿tienes padres?