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HOSPITAL


- ¡Joven de 16 años, quemaduras de segundo grado en la espalda, hemorragia externa y posible hematoma subdural. Heridas en todo el cuerpo, inconsciente, atención inmediata!! - 

Después de que la chica cayera desplomada y que su novio evitara que se rompiera la cabeza contra el suelo, corrieron hacia el hospital mas cercano. Katsuki quien no es de demostrar muchas emociones "débiles" estaba que se arrancaba el pelo cuando se llevaron a la chica de urgencias. Isao por otro lado, ya estaba mal desde hace muchos días. 

Los que habían ido a esa misión de rescate estaban en la sala de espera, pronto llegaron los padres de la muchacha todos sudados por haber corrido entre la multitud 

- ¡¿Donde esta?! - 

- La están atendiendo... dijeron algo de hemorragia, mamá - El menor de los mellizos corrió hasta los brazos de su madre nada mas llegar, pues sentía que estaba perdiendo a su otra mitad y eso lo estaba matando lentamente 

- Estará bien... tiene que estarlo - susurró Katsuki, pues este al igual que la pelinegra se culpaba de lo sucedido y si algo le llegara a pasar a esa chica no se lo perdonaría jamás. 

- Necesito información de Mei Yoshido - el encargado miro asombrado al héroe frente suyo - Ahora - este asintió y se puso a buscar el informe 

- Ha llegado hace diez minutos y le están tratando el hematoma subdural, lo pueden extraer con un pequeño agujero en la cabeza - Eso no fue algo bonito de escuchar para los presentes ahí, ya que sus bocas casi tocan el suelo. - No se preocupen, la señorita Yoshido está en buenas manos - 

Katsuki solo pudo retirarse de ahí hasta llegar a un lugar apartado y solitario, solo ahí permitió que unas lagrimas de rabia salieran con fuerza de sus hermosos orbes rubís



No podía ser cierto que esa chica que había visto algo en el ahora estuviera en una sala de operaciones pasando por una trepanación, no podía ser cierto que esa increíble mujer que le daba una sonrisa al mundo y molestaba a todos con sus comentarios sarcásticos pero ocurrentes hubiera pasado por tantas cosas y estuviera tan rota, no podía ser cierto que ella, justo ella entre tantas personas estuviera lista para abandonar el mundo. 


La relación de esos dos era mucho mas grande de lo que ellos sabían. Era algo inexplicable y raro, pero jodidamente perfecto y correcto. Era lo que era y así debía de ser. 


- No te puedes rendir Mei, aún no - susurró suplicando que ella le escuchara


Y puede que ella lo haya escuchado o puede que no, eso solo lo saben las fuerzas superiores del universo. Pero un pelirrojo y un pelinegro si habían oído y presenciado esa escena...


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- Familiares de la señorita Mei Yoshido - Como si todos tuvieran un resorte ahí se levantaron de inmediato dejando aturdido al doctor 

𝗠𝗨𝗟𝗧𝗜𝗞𝗢𝗦𝗘𝗜 || K.Bakugo × Oc.FemDonde viven las historias. Descúbrelo ahora