La gran investigación de mi vida: Efecto Dominó

Capitulo 1

Era el año 1971 en Los Ángeles California. La comisaría central de la ciudad era la "67. Street scenter",  la palabra "center" estaba mal escrita en el primer letrero que crearon para la comisaría, pero quedó así ya que era un icono, algo que podía diferenciar a la comisaria de las demás. En la comisaría existía un escuadrón de detectives, comandado por el capitán Charles Ghostman, de 63 años, y sus tenientes, el veterano Mark Williams de 58 años, quien además da clases a los futuros detectives de la comisaría, y el joven Daniel Ferdinand de 24 años, quien en poco tiempo había alcanzado un grado de prestigio debido a su habilidad para resolver casos aparentemente irresolubles, el más reciente, el de hace una semana, fue el de un hombre afroamericano muerto en las cercanas líneas del tren de la ciudad.  

Daniel mide 1,82 metros, era fornido y de tez morena, cabello castaño oscuro y de ojos pardos, además que su trabajo lo exige, pero siempre anda de traje, siempre procuraba estar presentable dondequiera que fuera, en la comisaria tenía su escritorio en la sala de trabajo de los detectives, el cual casi nadie usaba ya que siempre los demás detectives tenían trabajo qué hacer, pero Daniel llevaba casi una semana sin resolver un caso, así que aprovecha de descansar, mientras está en su escritorio, revisando una libreta que tiene desde que era adolescente, y con la mente puesta en un antiguo recuerdo de esa época de su vida. Está absorto en su recuerdo, hasta que su subteniente, Izak Barnaard, un joven de 22 años de tez morena, cabello negro y de 1,80 de estatura, entró a la sala. 

-¿Que pasa, Daniel?- le pregunta Izak a su amigo, mientras se sienta frente a el

-Nada, Zaki, cosas del pasado...- respondió Daniel

-Vamos, Daniel, después del trabajo iremos al bar de Samuel, me enteré que llegaron camareras nuevas, quien te dice que no tendrás suerte- dijo Izak mientras se apoyaba en el respaldo de la silla

-Kiara no me cae mal, pero no la veo como algo más, y creo que tiene novio... además hay algo más que me preocupa, ya llevamos una semana sin que nos asignen un caso... no me gusta venir aquí a calentar el asiento sin hacer nada-  contestó Daniel

-Pues tienes razón, que terrible destino el de ese hombre afroamericano- decía Izak, cuando de pronto aparece Mark Williams, otro de los detectives

-Muchachos, los manda a llamar el jefe, parece que les tiene trabajo- dijo Mark

-Llegaste en el momento justo, ya íbamos a iniciar una huelga por falta de trabajo- respondió Daniel con ironía 

-Ya sabes que no le caen bien los comunistas, Daniel, suban a la oficina del jefe para que les cuente el caso, el no me quiso decir- dijo Mark, con cierto aire de misterio, por lo que Daniel y Izak tomaron sus chaquetas y subieron al tercer piso hacia la oficina del Capitán Charles Ghostman, quien está contra la ventana revisando algunas fotos del caso.

-¿Que tal, chicos? Los mandé a llamar porque les tengo trabajo- dijo Charles Ghostman

-Así es, Mark no nos dijo de qué se trataba- respondió Daniel

-Y por una buena razón no le dije, debemos tratar esto con cautela... escuchen, encontraron muerta a una señorita llamada Mary Goodman, de 1,70 de estatura, blanca y rubia, tenía 33 años y era soltera, encontraron su cadaver en la cima del 1887 Grand Tower- describió Charles

-¿El monte "arrumaco"?- preguntó Izak

-Pareciera que lo conoces Izak- comentó Daniel

-Es bien sabido que las parejas jóvenes van a ese cerro poco iluminado a... pues a hacer lo que quieran hacer-  respondió Izak- pero, ¿por qué tanto secretismo con la tal Mary, jefe?-

-Porque ella era la secretaria particular del Senador de nuestro estado, Paul Gerard-Karlson, tengo la sensación que tendremos que relacionarlo para resolver el caso, no sabemos quien acompañaba a la señorita Goodman- contestó Charles

-¿Qué nos dice que el acompañante de Goodman no la asesinó?- dijo Daniel

-No adelantes suposiciones, Ferdinand, vayan al cerro 1887 Grand Tower, los agentes ya hicieron el perímetro y el forense esta allí desde las 4 de la tarde, ¡largo!-  ordenó Ghostman, a lo que Daniel y Izak obedecieron.