Capítulo II

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Madeline

Estaba claro quién había ganado, mi madre. Luego de haber estado peleando y de haber sido arrastrada por todo el living, se enojó y dijo que nos vayamos que somos insoportables

Eso que apenas a estado un dia en casa en pesado de Alan

- ¿Ya estas lista? Tenemos que pasarlo a buscar al final.- Dijo del otro lado de la puerta,

- ¿No puede caminar tres calles? - grite terminando de poner las zapatillas, no me arregle mucho me había decidido por un pantalón corto y una blusa

- Dice que te oyó y que nosotros tenemos auto, que el es pobre. - Exclamó poniendo los ojos en blanco, estaba apoyado en la pared con el celular en el oído, seguro estaba hablando con su Garrapata

- Que dramático que es...

Nos dirigimos directamente hacia la salida ya que mi madre ya se había quedado dormida.

Al subir al auto me acomode en los asientos de atrás y fuimos por la garrapata andante de Valentin. Llegamos en menos de tres minutos, literalmente eran tres calles las que tenía que caminar

-Por qué tardaste tanto?! - chillo la garrapata cuando estacionamos enfrente de su casa

-Tuvimos unos inconvenientes. - Reclamo Alan mirándome por el espejo retrovisor

- Me amas. -Dije tirándole un beso

- Pero miren que sorpresa, pero sí pudieron sacarla de su cueva - Comentó Valen mirándome con una sonrisa desde la ventanilla

- Pero si ya era raro estuvieras un día separado de Alan, como su garrapata estás fallando en tu trabajo.- Dije asomándome entre los dos asientos

- ¿Cómo que su garrapata? - Pregunto frunciendo el ceño ofendido mientras entraba al auto. - Además lo ví ayer

- Los bajó del auto si no se callan,- Dijo Alan encendiendo el auto. - Dios,

recién se ven y ya empiezan

- Ella empezó.

- Él empezó.

El transcurso del viaje fue casi tranquilo, excepto por la discusión de a dónde íbamos a comer ya que los tres queríamos distintos puestos de comida rápida. Así que lo resolvimos de la manera más madura

-¡Piedra, Papel o Tijera!- Dijimos los tres al mismo tiempo

Alan tenía tijera al igual que yo pero Valen tenía piedra, al darse cuenta que había ganado nos dió con su puño a nuestras tijeras

-¡Me hiciste mal la mano! - chille sacudiendo la mano

- JA! LES GANE. - Grito festejando, aún seguimos en el auto, ya habíamos estacionado

- Ya me arrepentí de venir con ustedes.- Dijo Alan mientras bajaba del auto, acción que le copiamos

- Entonces será KFC. - Comento la garrapata presumiendo con una sonrisa

- ¡Pero todo es pollo! Tienen hamburguesas de POLLO!!! Eso ni siquiera debería llamarse hamburguesa!- Grité indignada mientras nos acercamos al local de comida

- Deja de gritar que nos miran, Pesada.-Dijo Alan alejándose de nosotros

- ¡Eso! ¡Se una, buena perdedora Pequeña Torres! - Exclamo Valen poniendo su brazo sobre mis hombro, era más alto que yo así que le llegaba a pasar el hombro

-No me digas Pequeña Torres. - Dije con el ceño fruncido. - Ah. Y esto es por pegarme con tu puño

Y antes de que reaccionara a lo que le dije, le di un codazo en el estómago

- Ey acaba de pegarme! - Se quejo con Alan como si fuera a su mamá

- Para que la molestas. - Dijo entrando al local

- Para que me molestas.- Repeti con una sonrisa antes de entrar

- Te hubieses quedado en tu cueva.- Escuché que murmuró por detrás pero no le di importancia

Hicimos los pedidos y cuando ya estaban fuimos para el segundo piso a buscar una mesa. Fue gracioso como la garrapata rezaba que no se le cayera nada de la bandeja mientras subíamos las escaleras

-Al principio no entendía nada, sabes las veces que me equivoqué de salón y de fechas de parciales! No es nada comparado con la secundaria.- Comento indignado la garrapata con papas en la boca

Nos estaba contando cómo habían sido sus primeros meses en la facultad. Me contó que estaba estudiando Arquitectura, y que recién terminaba el primer año en comparación a Alan que ya iba por el segundo

Dijo que había intentado el primer año luego de terminar la secundaria pero por unos problemas familiares tuvo que dejar, pero que había retomado al año siguiente, de hecho me contaba solo a mi , ya que Alan se distraía contestando mensajes " ¿En qué andará este?"

No recuerdo haberlo visto mal en ese tiempo, pero no me sorprende que no lo supiera. Antes de que ellos se fueran yo solo los tenía a ellos, aunque yo era dos años menor que ellos siempre me incluían en todo, así que no necesitaba a nadie más. Pero cuando se fueron a Capital, ya no era lo mismo, apenas hablaba con Alan, y Valentín siempre estaba ocupado

Extrañaba esto...

-Pero luego te acostumbras O en mi caso no. - Dijo la garrapata riéndose.- ¿Y vos? Ya tenés pensado qué vas a estudiar

- No, aún no. - Respondí restándole importancia, había terminado recién este año la secundaria y para ser sincera no tenía en mente todavía que iba a seguir

- Pero no hay nada que te guste? - Pregunto

- No la agobies Valen.- Dijo Alan pegándole en la nuca a la garrapata

- ¡Son unos agresores ustedes dos! - chillo la garganta haciéndome reír - Tenían que ser hermanos

- Escuchen, mañana se van a juntar los de siempre a tomar algo.- Comentó alan

- Uy que suerte que soy adivina.-Comente con sarcasmo antes de tomar gaseosa

- Pasame la información mentalmente. - Agregó la garrapata siguiendome el juego poniendo su mano en mi cabeza

- Les estoy hablando en serio. - Reclamo alan poniéndose serio haciéndonos reír

Estaba claro quién era el más maduro de los tres

-Okey malhumorado - Exclamó la garrapata levantando las manos en forma de rendición. - ¿Quiénes son los de siempre?

- El grupo del colegio, los de siempre. - Dijo poniendo los ojos en blanco

- Bueno, supongo que habrá que atarla para llevarla - Comentó la garrapata tirándome una servilleta hecha bollo, yo solo me moleste a sacarle el dedo del medio

Estuvieron hablando todo el trayecto a casa de cómo nos íbamos a organizar para ir mañana, por lo que escuché, tenían que pasar a buscar a alguien más mañana por la noche. Luego dejé de prestarles atención y me limité a mirar por la ventana hasta que nos despedimos de la garrapata y volvimos a casa.

Ya acostada en mi cama me di cuenta que eran pasadas la medianoche pero aún no podía dormir como todas las noches.


𝑬𝑵𝑻𝑬𝑳𝑬𝑸𝑼𝑰𝑨 (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora