Capítulo 29. Eclipse.

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★POV RINDOU★

—¿Recuerdas que en aquella ocasión el viejo Yama nos encerró en el sótano por dos días?.-mis hermano parecía realmente feliz con aquello.

Mochi manejaba en silencio. Mikey dormía en los asientos traseros de la camioneta. Koko iba en el asiento de copiloto y mi hermano junto a mí.—Nos dejó sin la cena y el desayuno, hasta que la señora Kang nos llevó aperitivos al día siguiente.-susurré.

En aquel momento, habíamos escapado de la mansión con Aoi, el viejo Yama siempre tan sobreprotector con ella, pero de cierta forma lo entendía, aunque no lo justificaba.—¿Están seguros que estarán ahí?.-preguntó Kokonoi, asentimos al mismo tiempo.

—Heaven no toma rehenes, así que solo si eres importante y no pueden matarte, eres enviado al sótano, lo más cercano a una cárcel, mohosa.-mi hermano arrugó la nariz de solo recordar el aroma.

Cuándo bajamos de la camioneta, sonreí un poco.—Hombre, te ves horrible.-dije acercándome a el chico, mi hermano lo abrazo del cuello y lo despeinó.—¿Tienen lo que Aoi pidió?.-preguntó Mikey mirando a la chica.

Ella asintió y mostró su mochila.—Habríamos tardado menos de no ser por Take-nii y su pésima condición.-miramos al mencionado y se veía incómodo.—Bueno, atravesamos todo el país buscando esto.-dijo sacando un nuevo cigarrillo.

—Quita esa cara, Taiga.-dije mirando al mencionado.—La señorita se sacrificó para dejarnos mover libremente...Siempre me voy a preocupar.-el pelirrojo realmente parecía nervioso.—Bueno, también se sacrificó por nosotros, pero Kakucho y Sanzu están con ella, obviamente no pasará nada malo.-

Decidimos hospedarnos en un hotel pequeño y sencillo cerca de Osaka.—Perdón, pero no me casaré contigo.-Senju hablaba con mi hermano en el balcón de su habitación.—Lo sabía, de hecho...pensaba romper este compromiso si tu no lo hacías. El pecoso es como parte de nuestra familia, lo vimos crecer y con la supuesta muerte de Aoi, la paso terriblemente mal...creo que se merecen ser felices.-

En ocasiones Ran podía llegar a ser una persona más compleja de lo que sus actitudes demostraban.—Así que debemos salvar a la princesa del castillo antes de que suceda algo malo.-susurró y decidí entrar a mi habitación. Miré mi reflejo, tenía algunos golpes en mi rostro, pero me sentía satisfecho, en mucho tiempo no habíamos peleado así contra nadie.

—No volveré a perderte, nunca más...-susurré aferrando el anillo entre mis dedos, me aseguraría de dárselo a cualquier costo, pues así como ella peleaba, yo también debía darlo todo, incluso si el mundo entero se oponía.

A la mañana siguiente, Taiga fue el primero en dar vueltas en toda la recepción.—¿Por qué tan desesperado, Taiga?.-pregunté bostezando.—Las cosas se salieron de control, ¿Dónde está el jefe?.-preguntó y en segundos vimos a Mikey salir de una puerta del fondo acompañado por Koko.

«Por favor que no sea lo que pienso» pedir era sumamente innecesario pero ya no quería más complicaciones.—El Jefe Yamato, fue envenenado y, ya hay un nuevo líder designado.-susurró y me miró, luego a Ran que se acercó molesto.—Izana Kurokawa y...Aoi Tsukino fue acusada por intento de asesinato, sus cómplices y ella, serán juzgados y sentenciados mañana, todos los líderes de los grupos Yakuza menores fueron convocados formalmente.

Mi cuerpo se quedó estático, pero por el aura asesina que traía Mikey.—Nos movemos hoy mismo, ¿Entendido?.-

—Si, jefe.-contestamos sin falta, incluso Senju apretaba los puños de frustración.—Tranquila, Senju...fue un ligero cambio de planes pero seguimos en el mismo camino, Aoi lo planeó todo y ya esperaba que contraatacaría así.-mi voz sonaba tranquila, pero por dentro me consumía la furia.

SoulMate. [RINDOU HAITANI x OC]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora