The New Age

Capítulo 5

-Eventualmente llegaría este momento, solo que no esperábamos que fuera sin adultos... al contrario, que sería provocado por ellos ¿no? -dice Megan.

-Probablemente esto también haya sido provocado por ellos, solo que nos dejaron.

-Obviamente no nos dejaron por voluntad propia, Salvatore, al menos no nuestros padres -dice Rachel.

-Como sea, tenemos que saber que cojones fue lo que paso aquí. Tenemos poco tiempo -dice Jessica.

-¿Poco tiempo? Creo que tenemos el suficiente.

-No, no sabemos si cuando cumplamos 18 años también desapareceremos y yo estoy a un mes de tenerlos.

-Mierda, es cierto

-¿Cuál es el plan? -dice Steph.

-No lo sé.

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-¿No te cansas de fastidiarme la vida?

-No tienes que ser grosera con el niño, Mónica, es tu hijo.

-Mi hijo es Hunter, Salvatore no, él fue un simple error y una desgracia.

-Desgracia es ser tu hijo, ojalá mi papá me hubiera dado a luz, no una loca como tú.

-¡No tienes ningún derecho a insultarme!

-¿Y tú si?

-Pero claro que sí, soy tu madre.

-Acabas de decir lo contrario.

-Bueno, es suficiente, nos vamos a divorciar y Salvatore se ira conmigo.

-Hasta que dices algo coherente y en lo que estamos de acuerdo, los tres.

-Los cuatro, porque tu hijo "estrella", se alegrará mucho más que tú al enterarse.

-Dale Mónica, ve por tus cosas y las de Hunter -papá saca dinero de su cartera- con eso, tendrán comida para mucho tiempo y un lugar que rentar, se van hoy mismo.

-¿Estás loco? -grita- los que se van de mi casa son vosotros, mi hijo y yo nos quedamos aquí.

-¿Tú casa? Te recuerdo que las escrituras están a mi nombre, pero tienes razón, yo soy él que tiene todo el dinero y yo puedo ir directo a comprarle una casa a mi hijo. Salvatore, anda por tus cosas, nos vamos ya. Eso si, olvídate de tus lujos y de los carros, solo tendrás el carro de Hunter y él ya no depende de mí y me vas a dar una renta mínima por dejarte vivir en mi casa.

-¿Le harás eso a Hunter?

-Hunter no es mi hijo, te recuerdo que me montaste los cuernos.

Mientras mis padres seguían discutiendo, me fui al cuarto por mis cosas.

Después de un par de minutos baje y papá me dijo que esperara en el carro.

-¿Qué haces ahí niñata? -se escucha la voz de Hunter- ¿Otra vez llorando por qué mamá no te quiere?

-Déjame en paz.

-Es normal, digo, todos me prefieren a mí, pero te he dicho miles de veces que no le hagas caso, no es como que la necesites.

-No sé si tratas de ser bueno o peor conmigo.

-Solo soy realista, no te quiero, pero me importas.

-Eres un gilipollas.

-No te lastimes más, solo vete de aquí y descansarás de esto y me harás un favor a mí.

-Todo siempre te favorece ¿no?