Sensación Mágica (One Shot)

Sensación Mágica

Spider-Man y Zatanna ellos dos no eran precisamente los mejores amigos, pero todo esto cambió una noche en el Central Park.

Peter había seguido a unas extrañas criaturas pequeñas, parecían pulpos bebés, los cuales con solo tocar una cosa la deshacían en segundos, Peter las había seguido hasta el Central Park, afortunadamente era muy noche, y a pesar de que Nueva York sea conocida como la Ciudad que nunca duerme, un poco de suerte arácnida favoreció al héroe, y el Parque se encontraba vacío, Peter las seguía a la vez que las capturaba, estas fueron a un puente del Parque, y desaparecieron. Peter no entendió del todo lo que pasó, pero en eso un destello de luz apareció deslumbrado un poco al héroe. Era Zatanna, ella era miembro de la Liga de la Justicia, pero hace poco renunció y pasó a ser miembro de otro equipo de superheroes mágicos.

- Spider-Man, es una sorpresa verte por aqui - le dijo Zatanna.

- Bueno también me sorprende que estés aquí hace mucho que no te veo, no desde tu renuncia, y bueno estaba siguiendo a unas pequeñas criaturas que con solo tocar cosas las deshacían - explica Spidey.

- Lo sé, por eso estoy aquí, verás el Doctor Destino se encarga de cualquier criatura mágica, pero el desapareció, y estas criaturas están sueltas - explicó Zatanna.

- Bien te ayudaré -

- ¿Que? - preguntó la hechicera - ¿Me vas a ayudar? -

- Si ¿por que no debería? -

- No lo sé no estoy acostumbrada a este tipo de ayuda -

- Pues acostúmbrate, que tenemos pequeñas criaturas que atrapar - decía tomando a Zatanna de la cintura

- ¿Que haces? -le preguntó algo sonrojada.

- Tengo reportes de varios avistamientos de pequeñas criaturas que corren por la ciudad, y está es la mejor opción de llegar a ellos -

- Pero puedo volar - decía ella.

- Pero no creo que puedas ir tan rápido -

Zatanna se quedó sin argumentos y dejó que Spider-Man siguiera con su plan. Luego de unos minutos ambos llegaron al centro de la ciudad. Y vieron como las criaturas estaban en una cafetería donde estaban asustando a las personas, la s cuales salían asustadas del local.

- Creo que los encontramos - le dijo Zatanna.

- Tranquila yo me encargo - habló Spider-Man mientras iba a la cafetería.

- ¡No espera! - trató de detener Zatanna al arácnido pero este ya había entrado al local.

Ella entró, y vio como las pequeñas criaturas estaban burlándose de Spider-Man quien estaba tratando de atráparlos pero nada surtia efecto.

- Te dije que esperaras - regaño Zatanna.

- Lo siento, pero tengo cuentas pendientes con estas cosas - le respondió a la vez que trataba de atrapar a las criaturas. Las cuales lo evitaban, y se reían de él al mismo tiempo. Zatanna saco una pequeña hoja de papel. En la cual habían varias cosas escritas.
Evitar que posean el tren.
Evitar que los lagartos albinos salgan a la superficie.
Detener unos pulpos capaces de derretir todo lo que tocan.

- Spider-Man -

- ¿Que pasa? - preguntó el héroe.

- Debemos detenerlos, rápido, y creo que se como - lo último llamó la atención del castaño, y ambos idearon un plan.

- ¡Oigan! - grito Spider-Man llamando la atención de las criaturas.

- Atrapenme si pueden - Exclamó mientras salía del lugar, y era perseguido por las pequeñas criaturas. Pero éstas no notaron que había cemento fresco en la calle, Spider-Man dio un salto, y esquivo la sustancia, pero las criaturas no tuvieron tanta suerte, estas cayeron el la trampa del arácnido y la hechicera. Esta última conjuro unas palabras mágicas, y una caja mágica apareció, atrapando a todas las criaturas. Spider-Man chocó los cinco con Zatanna, ambos con unas sonrisa triunfante, pero esa sonrisa se fue tan pronto Zatanna le enseño la lista con las cosas que tenían que hacer, claro ya había una cosa menos, pero eso no quitaba el hecho de que aún habían muchas cosas por hacer (solos mostré tres pero me sacare unas más de la manga, ¿por qué?, pues por el poder de mis grandisimos huevos :v)