IIX - ¿Cuando será el día en el que te pueda volver a ver?

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Ya habían pasado ocho semanas desde el accidente de Rengoku y aún no despertaba, Kyoto se estuvo cuidando bien para que su hijo nazca sanó y sin enfermedades entre otros..

pero, cada día de cada semana, su dolor la atormentaba, tener comer sola, todos los días sin compañía, no volver a sentir a su esposo, no volverlo a ver entrar por la puerta.. le dolía bastante, intento pensar en un nombre para el bebé pero su mente estaba en blanco, no sabía si sería niña o niño, por lo que no lo tenía muy bien planeado y no quería que su hijo creciera con el dicho de que su padre estaba en coma y era posible que nunca lo podría escuchar o sentir un abrazo suyo.

Una mañana, el cuervo kasugai fue a visitar a la menor Rengoku, está se encontraba colgando la ropa de ella y de su amado, hasta que sintió las garras del cuervo en su hombro

"Buen día pequeño.. ¿Qué necesitas?" El cuervo solo empezó a aletear sus alas intensamente, Kyoto no entendía el mensaje, hasta que esté se colocó en la cuerda que sostenía la ropa

"Buen día., ¿Kyoto ya tener un nombre para la criatura?"

"no... no tengo ideas por pensar en Kyojuro., lo extraño mucho...." El cuervo desvío la mirada con tristeza, entendía el inmenso dolor que tenía Kyoto, su esposo podría fallecer.. la menor tomo la canasta y lentamente se acercó a la entrada trasera, el cuervo la siguió e intento llamar su atención pero no logro nada, la pelinegro entro y se recostó en su cama, el cuervo kasugai gruñó y está le dirigió una mirada confundida

"¿que pasa?" El cuervo empezó a esculcar las cosas de Kyojuro, Kyoto solo lo observo con interés, después de un rato, el cuervo saco un sobre que sostenía con su pico y lentamente se lo dio a la pelinegra

Esta observo el sobre con curiosidad y lo abrió cuidadosamente, leyó atentamente y lo que decía provoco unas lagrimas en su rostro

Para mi amada Kyoto, quiero decirte perdón por mis errores que tuve con el corto tiempo que estuve contigo, lamento si alguna vez no fui suficiente para ti o si te decepcionaste de mi, pero deseo con todo mi corazón que seas feliz y si alguna vez, no estoy a tu lado, perdóname por haber roto mi promesa, aun que no lo demuestre, eres mi persona favorita en la vida y en todas, si alguna vez, no aparezco para la mañana, no llores. 

Por que a pesar de todo, nunca te voy a dejar de amar sin importar las consecuencias, la primera vez que te vi, fue con Uzui.. me enamore al instante y dije que serias mi esposa, pagaría hasta mi alma por estar contigo y fue el día mas feliz de mi vida cuando nos casamos, no  quería un momento contigo.. quería acompañarte hasta el fin de nuestras vidas, abrazarte y sentirte. 

- Con amor Kyojuro

La menor rompió en llanto, no podía soportar el dolor que sentía por tal mensaje, quería volver a sentir a Kyojuro, aferrarse a su cuerpo y vivir en familia junto a su hijo., hasta que sus llorosos ojos se volvieron en ira incontrolable, deseo de venganza  sobresalto su mente, tomo un jarrón y lo estrello contra la pared ferozmente, empezó a golpear el muro intensamente, una y otra vez sin detenerse, dejando sus nudillos moreteados, cayendo al suelo rendida entre llanto

El cuervo agacho su cabeza y se fue de allí, la pelinegra se quedo dormida después de horas de llanto, a la mañana siguiente, se levanto y limpio el desastre que había provocado, su sonrisa había desaparecido al igual que su alegría, al pasar los días, no hacia sus deberes de aseo en la casa tan a menudo, por lo que muchas de sus flores se marchitaron y desaparecieron con el viento

Cada día, su jardín estaba mas seco pero estaba demasiado deprimida como para hacer algo al respecto, odiaba caminar por los pasillos, el silencio la atormentaba por lo que a veces se encerraba en su cuarto y se aferraba a la almohada en la que Kyojuro anteriormente había dormido y se relajaba..

Una mañana escucho unos golpes en su puerta, lentamente, llego hasta la entrada y para su sorpresa era Aoi y Shinobu, ambas habian llegado con una alegre sonrisa y eso lo observo detenidamente Kyoto

"Buen día Kyoto-san"

"Buenos días Kocho.. ¿Qué te puedo ofrecer.?" Amas contrarias intercambiaron miradas, Aoi tomo los hombros de Kyoto y dijo

"Rengoku.. despertó" Kyoto abrió los ojos enormemente a tal declaración, rápidamente con lagrimas en sus ojos se arrodillo agradeciendo una y otra vez el cuidado que le habian dado a su marido

"¿p-podrían llevarme con K-Kyojuro.?" Ambas asintieron, llevaron a la pelinegra hasta la finca mariposa y la dejaron a solas con el rubio, quien la esperaba con ansias "¡Rengoku.!" Dijo la menor corriendo abrazar al rubio y este fue correspondido

Ambos estaban apegados, entre lagrimas, Kyojuro tomo tiernamente las mejillas de la oji-azul y la hundió en un profundo y lindo beso

"Te extrañe mucho.. Rengoku.." El mayor llevaba un parche en el ojo negro con llamas decorativas, resaltaba bien su personalidad según su opinión

"Kyoto... Te amo" La menor se recostó en el pecho del rubio con suavidad, evitando un dolor de gravedad de este "perdóname por haberte hecho preocupar tanto.." Kyoto solo sonrió con felicidad al saber que su esposo estaba fuera de peligro y podría volver a vivir junto a el

WAAAA LLORE HACIENDO ESTOOO, así que disfrútenlo :") y no es el final ( - ^ - )

A good life? // Rengiyuu // Tomioka FemaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora